lunes, marzo 14, 2011

La renuncia insondable a pensar el país se cubre con slogans y malas interpretaciones.

 El kirchnerismo es la única corriente política de alcance nacional, articulada con el partido justicialista. No son lo mismo el justicialismo y el kirchnerismo, como bien puede argumentar y por variadas razones un gobernador misionero kirchnerista, un gobernador neuquino kirchnerista, un gobernador santiagueño kirchnerista, una gobernadora fueguina kirchnerista, un gobernador kirchnerista rionegrino, un justicialista salteño, un kirchnerista moronense.
El justicialismo no tiene ninguna expresión, más que jurídica, de alcance nacional. Es una confederación provincial de partidos políticos democráticos: donde hay (perdón por decir estas cosas) elecciones internas, programas, autoridades, congresos partidarios. No como el socialismo -que tiene más distritos intervenidos que con plena democracia interna- ni como el radicalismo, que expulsa de sus filas a quien gane una elección. Los expulsa más o menos, un cachito, pero de por vida.
Como a Brizuela del Moral. O Julio Cobos. Los ex indultados.
El sistema de partidos se reduce, sin embargo, al radicalismo y al peronismo. Yo no sé de ninguna interna en Movimiento para Todos, donde "lidera" Claudio Lozano, del ala lozanista del gran movimiento latinoamericanista, casi mundialista y galáctico del lozanismo, que opina sobre Catamarca y San Juan, vótelos en la Comuna 2. Sé de internas radicales en Chubut y en San Luis, en Entre Ríos y en Mendoza. Lástima que tienen esa vieja costumbre yrigoyenista de intervenir el distrito que no piensa como las autoriades "nacionales" que suelen ser los mariscales de la derrota. Un Gerardo Morales, por ejemplo. A eso, los que de instituciones y república entienden poco y nada, le llaman institucionalismo republicano. Muy bien 10.
Como toda corriente de masas, el kirchnerismo, articulado principalmente en la figura de Cristina y sus diversas significaciones e interpretaciones (todas igualmente válidas, no por su validez en sí, sino porque en su igualdad que no es mismidad -lo que le quitaría potencialidad de ampliar, elegancia y capacidad regenerativa- está la clave de la conducción y el liderazgo, je: divide y multiplicarás, dice el viejo adagio de la conducción política populista) tiene en algunos casos una mimetización con el justicialismo. Esos casos son más bien excepciones, pero contundentes: la provincia de Bs As -la más grande del padron- la de Santa Cruz, la de Tucumán, la de Entre Ríos, la de Corrientes.
Así como en el justicialismo el predicamento de la CGT fue decisivo pero articulado CON la dirigencia distrital, la caída (atenuada por el kirchnerismo) del predicamento gremial fortaleció a quienes tienen poder territorial.
El kichnerismo como corriente cultural tiene una relación de amores y odios, pero funciona como un matrimonio relativamente exitoso con la articulación territorial real que le da sustento electoral, esto es: le da realidad material.
Que mi pensamiento se entienda o sea reducido a pulsiones irracionales,  la verdad, me importa un comino.
Las mujeres pueden gobernar Santiago del Estero, Tierra del Fuego, San Luis, Catamarca. No han logrado esos enormes avances de género en territorios más conservadores y más dotados económicamente, vaya uno a saber porqué. La realidad no es la única verdad, pero este dato empírico es bastante contundente.
Ahora bien, hay una pregunta crucial, que todo militante político, o intelectual comprometido, o periodista curioso, o lector atento, debería, a mi juicio, saber responder:  
¿Porqué son pobres los catamarqueños?

Yo tengo una teoría para esa pregunta, que más o menos coincide con el grueso de las teorías existentes ante esa pregunta. Incluso, he escrito más de 3 años, obsesivamente, sobre eso (lo que no equivale a decir mucho, en realidad, pero bue, se sabe, tengo este egocentrismo tan insoportable) Yo tengo una teoría que mezcla en proporciones diversas la historia dramática de la construcicón de la nación, la economía realmente existente, el desarrollo divergente de las capacidades estatales, la incidencia de las dos grandes familias ideológicas nacionales enfrentadas históricamente, las competencias determinantes que a ciertos sectores del estado -por caso, la iglesia y el ejército- se les dio para "insartarnos al mundo" y principalmente a la región, y así. Comprendo la petulancia de quienes ignoran absolutamente cualquier teoría de cualquier tipo que explique porqué son pobres los catamarqueños y se refugien en la petulancia de la moral y las buenas costumbres: porque Saadi es malo, Barrionuevo peor, Brizuela del Moral se quería eternizar, la llamarada de Cristina nos salvará, etc, etc. La moralina reaccionaria de esas inexplicaciones cae con facilidad casuística en que, poco más, poco menos, los catamarqueños son unos nabos.
Puede que sea así. Pero en cuestiones de género están bastante más adelantados.

Y las obviedades previsibles, harto previsibles, tanto si los 4 puntos por arriba eran para el Frente para la Victoria o para el más esperado Frente Cívico y Social, a mí me aburren. Me aburren.

Pido permiso, señores, este blog no habla por mí. Y su voz entre sus sombras dirá, dirá porqué yo no canto así. 
Hasta mañana.

5 comentarios:

  1. Lucas:
    que tenés un indisimulable desprecio para con nosotros los porteños no es algo fácil de negar.

    Ahora, ese desprecio, primero, no es de esos que facilitan la reciprocidad, porque suele estar ien fundamentado. Segundo, es en muchos casos muy merecido. Y tercero y más importante, no empobrece en nada los análisis. Es un elemento más en todo caso, que conocerlo puede servir para matizar un poco la opinión sobre tus opiniones.

    Ahora, hay una cosa también. Por ahí habría que hacer un poco hincapié en la incapacidad de las provincias marginadas para pensar el país, sin aceptar tan mansamente el lugar marginal que el proyecto vencedor (si es que hay tal cosa) les asigna.

    Lo que quiero decir es que a falta de un proyecto de país inclusivo, porteño, en el interior, en las provincias pobres del interior, no pudieron articular nada tampoco.

    Hoy, por lo demás, en muchos de los aspectos que vos mencionás de tu teoria sobre la pobreza catamarqueña, la CABA, Bs As, Santa Fe, Córdoba, Entre Ríos, están más cerca de estar del mismo lado del mostrador que enfrente.

    Un abrazo

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  2. La charla que tuvimos en la radio va a ser transcripta textualmente, sin reducir tu pensamiento ni acomodarlo a mi conveniencia. No siempre hacés vos lo mismo, cuando parece que estás discutiendo con un funcionario de la alianza que ejecutó las órdenes de De la rúa y es cómplice de los asesinatos. Cuando yo hablo con vos no supongo que sos un representante de la oligarquía sojera, ni tampoco pienso que todos los catamarqueños con cómplices del asesinato de María Soledad, ni que todos los formoseños matan tobas. Por supuesto que no votaría a Insfrán. Tampoco uso ni reivindico la palabra "progre", pero sí vos la usas para bajarle el precio a tu interlocutor. Quisiera saber si los paladares negros cuando dicen "progre" con asco lo hacen desde una práctica revolucionaria (?) o desde el tradicional macartismo peronista.
    Pero obviamente la identificación entre materialismo histórico y peronismo de paladar negro que hacés en el post anterior no resulta obvia, menos cuando se opone a una tradición progresista.
    Sobre todo porque parece ignorar que el peronismo en los 40 y el kirchnerismo ahora han sido movimentos progresistas y modernizadores de las estructuras sociales del país, más cerca del progresismo que de la revolución, que en Argentina NUNCA se hizo. Y que no hacen por cierto, los antiprogresistas de última horneada.

    En cuanto al machismo porteño enfrentado a la equidad de géneros de las provincias, permitía que me ría de una de tus habituales chicanas. Sos un tipo provocador y gracioso.
    En cuanto al materialismo histórico, que no se deb confundir con la obra pública ni con el fisicalismo distributivo, que Marx desdeñó, con justicia. El tema del materialismo dialéctico es el trabajo alienado, una categoría compleja, que no se combate con cloacas ni obra pública.

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  3. Son pobres porque son hinchas de Boca y peronistas (?)

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  4. Mariano: ESTOY del mismo lado, como entrerriano, del mostrador que vos, porteño (tengo, de boludo, muy poco). Hago un esfuerzo -se ve que medio al pedo- por pensar un país, nuestro país. Creo que vos también.
    Pero mi incapacidad para lograrlo no deshabilita el debate.

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  5. Te dejé un comentario en el blog de La otra, aunque parezca que esté hablandole a la platea comentadora lectora, estoy hablandote a vos,
    te mando un abrazo
    y ya nos cruzaremos por ahi, algun día espero.
    Leerte ( a veces con dificultad de tragar, paladares más o paladares menos) me hace sentir, aun y sobre todo en la diferncia, menos solo. Hay algo en vos, en tu escritura, voz y gesto, que golpea aca en el pecho, saca aire a veces, pero también hace respirar mejor el grito.
    un abrazo enorme como la soledad, como saber o inentar caminarla con otros...
    ale ricagno

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