¿Qué pasó con Unidos y Organizados y La Cámpora?

Por Mariano Montenegro

A lo mejor se equivocan

Pero Wado... ¿Tengo contrato para 2014?

Mantenerse en el poder por el poder mismo. Esa es la ideología de Cristina y sus agrupaciones televisivas. El mantener los contratos, el empleo estatal y la impunidad penal, son las banderas que llevan al hombro los soldados de Simón y Cristina. No importa a quien se tenga que excluir, no importan las decisiones que se tomen.

La construcción de una fuerza u organización política propia, a través de Unidos y Organizados, fracasó estrepitosamente. Hoy no existe, envían a los cardúmenes que quedan, a afiliarse al PJ donde ven la única salida posible.

No hay hecho mas contundente que demuestre el grado de ineptitud en la construcción política, que ir a afiliarse al PJ.  Máximo, el alabado dirigente político que no da la cara, tomando el ejemplo materno, reconoce su fracaso de esta forma. Lo que armaron, el rejunte kirchnerista que podría haber funcionado, hoy se desgrana para sumarse al único salvavidas posible.

Salvavidas necesario para que los contratados no tengan que salir a buscar trabajo y sus empleadores no terminen en la cárcel. Salvavidas que arrastra por el suelo las banderas que supieron enarbolar. Salvavidas que demuestra su falta de compromiso con las ideas que decían sostener.

¿Quién será el elegido en 2015? A nadie le importa. No hay diferencias entre un Scioli y un Capitanich.  No hay diferencias ideológicas porque su ideología es el poder por el poder mismo. Ganar por ganar sin riesgos. Para los que traicionan las ideas, vale mas cuanto miden que cuanto piensan. Es la búsqueda de mantener el poder y los fueros por el poder mismo. Y en esta jugada, en esta entrega de las organizaciones políticas propias con fracasos al que gane, se caen las ilusiones de quienes tienen ideología.

Cristina se esconde porque lo sabe. Cristina se esconde para que no se note que se les ríe en la cara a quienes le van a bancar los trapos en el Patio de las Palmeras. Bajar el tono… es la táctica discursiva. Bajarles las ilusiones en discursos cada vez mas vacíos y distantes. Calmar el ánimo de los que creyeron que iban por la Liberación Nacional.  Calmar el ánimo de los que no entienden que perdieron. Calmar el ánimo de quienes creen que la militancia es importante para Cristina. Calmar el ánimo…

Cristina no les dice la verdad. No les cuenta que Axel anda como perro yendo al pie de los organismos internacionales de crédito como buscando agua en un día de enero. No les cuenta que ante el fracaso, en vez de bancarse la derrota, fue a llamar a los titulares y tranzó con ellos. No les cuenta en que empedrado cayeron las banderas. No les cuenta que la militancia no le importa mas. No les cuenta ella cree que los militantes no sirven para nada. No les cuenta que para reemplazarlos, ahora tiene un ejercito que se ocupa de la inteligencia. No les va a decir la verdad.  Por eso tan calladita… por eso, ni asoma la nariz.  Y cuando la asoma es para dejarles bien en claro, que bajen las banderas.

Perdieron con la organización y las banderas que levantaron. Y como lo único que les importa es ganar, como lo necesitan para consolidar su impunidad, los entregan sin vergüenza.

Los toman por boludos. Los hacen escuchar a Wado de Pedro diciendo que Máximo, el inepto que no pudo construir una organización política que se sostenga con toda la plata y el poder a favor, es un gran dirigente político.  Y sus razones son las mismas que las de un esclavo del siglo XVI. Máximo es hijo de… lleva sangre azul el gordito. Mamó de chico la política… vivía donde vivían dos presidentes… Como si eso fuera suficiente para poder dirigir políticamente algo mas que una inmobiliaria.

Lo peor es que ni siquiera lo cree, lo dice pensando que la militancia es tan bruta, que puede creer semejante argumento entupido. Lo dice pensando que un militante que tiene ideas, es capaz de entregarlas porque el inútil de Máximo necesita que la mamá conserve las inmobiliarias.  Los toman por boludos.

¿Qué quiere Cristina, Máximo y toda la dirigencia inmobiliaria de la militancia? Que entren al PJ para llevar un numero suficiente, ingresar un volumen importante y así poder arreglar con los gobernadores. Los quieren como peso, como inversión en el negocio de la transa.

Y los que no arreglen, los que no se entreguen para ser la mercancía de Cristina, los quieren desilusionados. Inmovilizados y en su casa. Sin capacidad de organizarse para luchar por las banderas y las ideas propias que CFK ya vendió.

¿Se imaginan lo que podría hacer la militancia con ideas, que no es poca,  si se organizara en contra de la entrega de Cristina?

Pero confían en que son boludos, en que sin Cristina no pueden hacer nada.