domingo, abril 05, 2015

Risas grabadas

Después de mandar a asesinar a Niman, mientras los beliebers K explicaban que no fue la vieja (presentaban pruebas penales para que la vieja alcance a comprenderlas: "¡van a hablar mal en la tele, por eso no le convenía!" como si, de poder controlar con su sillita de ruedas todos los canales a todas las horas, mataría sin dramas) la vieja llamó a Susanti Pancho para usarlo de coartada. Le lloriqueó, le habló del marido muerto hace poco (qué son 5 años para la única persona en el mundo que perdió un familiar y no le dejó nada de herencia, exceptuando la presidencia, hoteles y casinos y cuentas en el exterior) y todo el clásico repertorio de conspiraciones mundiales contra la mejor presidenta de toda la historia argentina. Cosa en la que coincido. Pero fuerza, aún se puede ser peor que Isabel Martínez de Perón.
Fue todo muy divertido, porque Bergoglio escuchó que la vieja quería renunciar y le dijo lo obvio: que no, que tenía que trabajar (no creo que le haya mencionado esa palabra, para no ofenderla).
Los beliebers denunciaban que el mundo entero les quería sacar como 7 sueldos de la SIDE antes de cantarle la de la patria liberada a Massa, Scioli o Macri y la vieja quería renunciar.
Naturalmente, Susanti Pancho no se comió el amague, que era para usarlo de coartada (que el Papa salga a decir que la vieja quiso renunciar, equivale a hacerla inocente) y se mandó a guardar, así que la vieja tuvo que salir a dar lástima por sus propios medios. Fue divertido, yo no paré de reírme cuando la vi en silla de ruedas explicando que fue un asesinato contra ella, porque incluso el suicidio de Rucci o el accidente de Cabezas si se lo mira bien, fueron contra ella.
El gobierno no tenía lacayos con credibilidad para pasarle este dato, por lo tanto, la cosa se diluyó. Bergoglio la extorsionó a la vieja con la clásica coima para mantener sus militantes a través de la educación privada y luego, recién a los dos meses de impunidad (cuando se espera que sean décadas) reveló el dato. Los 1000 tipos que trabajan en la batalla cultural (sea para la viudita Ernestina o la viudita Cristina) no supieron cómo sacarle dinero a ese dato así que lo pasaron de largo.
  No somos nada, chicas


(A partir de este momento, los lectores continúan con su programación habitual de lecturas, sobre el eterno drama de la Familia Kirchner o la Familia Noble)

No hay comentarios.:

Publicar un comentario