Tremendo lo que está pasando, y yo boludeando con la Quatrinidad; pfff.
En las gacetillas de TEA; está esta nota:
Un manual elaborado por expertos de los ministerios de Educación y Salud de la Nación dio pie a un exaltado “mensaje” del arzobispo de La Plata, Héctor Aguer, quien puso si no el grito al menos el texto en el cielo, ante lo que consideró de “inspiración neomarxista”. Aún más: el Material de Formación de Formadores en Educación Sexual y Prevención del VIH/sida –que fue avalado por organismos internacionales– resulta “reduccionista” y “constructivista” para monseñor. Consultado por este diario, el flamante ministro de Educación nacional, Alberto Sileoni, advirtió que no era su intención polemizar: “El que critica Aguer es un documento que se desprende de una ley, la 26.150, de Salud Sexual Integral. Y para este ministerio la ley no es una opinión, sino una disposición normativa que da la sociedad y hay que cumplir”.
Ok, al secretario de estado en funciones en una ONG Héctor Aguer, no le gusta un manual de educación sexual (che, a todo esto, del condenado Juluio Grassi ni una palabra, no?) y lo considera "neomarxista". No entiendo. Será la Quatrinidad, o algo así, pero no entiendo. ¿Porqué es "neo" y no, directamente, marxista?
Ese manual es una garcha, no enseñar a curtirse nenes.
ResponderBorrarporque ese manual es el elegido que nos va a sacar del yugo de la iglesia mediante las pastillas azules?
ResponderBorrarcarrasco querido, el motivo del "neo" es muy evidente. el manual sería marxista si intentara generar conciencia revolucionaria entre los estudiantes para que ellos tomen las armas y salgan a hacer una revolución. pero el manual sólo quiere que cojan con forro y eso ya no es marxista-leninista, sino una derivación claramente gramsciana.
ResponderBorrarme explico?
abrazo