martes, noviembre 10, 2009
Microclimas sustentables.
Queda feo decirlo, no, Felipe? pero la actual situación política refleja con precisión el resultado electoral de las últimas elecciones legislativas. Pasa que algunos se cebaron, cosa que está bien: el triunfalismo es denostado, tanto como el voluntarismo en la política, pero denostado con demasiado voluntarismo y triunfalismo.
En algunos casos, como quizás en el mío, por las viejas influencias del análisis marxista o, mejor dicho, colectivista. En otros, por la sobrevaloración de las estructuras racionales. Todas estas cosas, seguro, condicionan, inciden en los procesos políticos. Pero, también la voluntad, el pathos que mueve a líderes y así.
Bue, lo que acabo de escribir lo creo; pero suena feo, hasta para mí: eso de sobrevolar los saberes para cantar las cuarenta, no me va.
De todos modos, veamos que la voluntad es un atributo muy loco, pero importante para el andarivel de lo político: lo de Néstor y Cristina, es increíble. No es fácil, tenés que estar algo loco; para manejar ese nivel de información, comprender que más de medio país te putea, y seguir. Por mucho menos yo me amargaría. Rompería todo, me iría a vivir a una isla desierta.
Lo de Macri, también. Sale, pone la cara, cuando podría seguir boludeando en Europa (como hace Pino Solanas cuando alguien se obstina en señalarle que quizás dios sea un poco más grande que él), no, se la aguanta, muestra temple, da explicaciones inverosímiles, pero correctas para su platea. Resigna sus delirios presidenciales, y con eso, le pega un sacudón a buena parte de los porteños. Al pedo, Mauricio: vos tenés que seguir diciendo que vas a gobernar Unasur; con el único agravante que ahí votan los sudamericanos, así que en el fondo, no te merecen que los presidas; que se las arreglen solos esos negritos. Pero, el tipo contesta preguntas -algo que Néstor y Cristina no hacen- de empresas de medios cuyos empleados se ven obligados a chucearlo un poco. No queda otra que chucearlo un poco. Está bien: el tipo puede dar conferencias de prensa porque representa a los dueños de los medios y sobretodo a sus empresas diversificadas (tener un medio es casi siempre un pasaporte para otros negocios); pero los representa como clase social, no como personas. Después, quizás se haya peleado con Héctor Magnetto porque le miró de reojo la novia. O con los de La Nación porque no le gustan los viejitos que contratan taxi boys y después invitan al Opus Dei a su cumpleaños. Qué se yo. No es fácil, a eso voy.
Bah, iba a otra cosa, pero bueno, a nadie le importa adónde iba, en todo caso. La actual situación política es una foto, si tal cosa se pudiera, de las relaciones de fuerza que expresaron las urnas.
Difícilmente, la clase dirigente haga de un resultado electoral cualquiera un mismo análisis. Cada facción hace el propio. Y está bien. El Partido Obrero siempre publica (solía leer su periódico hace unos años) que sacaron 300% más votos que antes y explican la justeza de su línea política. Los microclimas hacen eso. Y si son grupos políticos grandes, se enfrascan en internas. Es natural. Pero todo partido tiende a poner por encima de todo su propia reproducción. Y la dirigencia de ese partido pone su propia reproducción como dirigencia en un objetivo imperioso, aunque lo envuelva con moño dentro de otros relatos. Un par de meses en el Partido Comunista te explican esto aceleradamente.
Después hay un relato de las cosas que corresponde a la esfera de la comunicación: con su propia lógica. Un semanario entrerriano, con muchos amigos trabajando ahí, saca en tapa a De Angelli para decir que está en caída libre. Primicia total. Hasta hace semanas era un gran ídolo del rocanroll el compañero De Angelli: pero no es que mis amigos se dieron cuenta que Alfredo es un payaso y la algarabía de los patrones sojeros un espanto, naaa, lo que cambió es la realidad. Los periodistas son coherentes, honestos intelectualmente, valientes, audaces, nunca una noche de impotencia sexual: el problema, en todo caso, es de la mina. Uno no cambia, cambia la realidad.
Y el relato comunicacional tiene como fin primordial la propia reproducción. Con la salvedad de que para la reproducción necesita la apariencia de cambio, de vértigo, de ahí el hartazgo, la indignación, la poca onda. Los curas encuentran pecados, los milicos encuentran comunistas, los periodistas escarban buscando escándalos, los políticos su propia pervivencia. Es el juego. El motor de muchas cosas. ¿O acaso, con Manolo, el Ingeniero y Omix no buscamos siempre dónde está abierto para ir a tomar otra? Es el motor de muchas cosas.
A medida que voy trabajando, cuando me aburro -sucede demasiado a menudo- escribo acá la pelotudez que se me viene a la cabeza. Si, en cambio, escribiera una vez por semana, ponele, seguramente me contradeciría menos. Pero, voy a esto: la verdad, hay que bajar el clima de crispación, je. No, el clima de Avanti Morocha. El clima de ver quién la tiene más larga. Un rato, un toque, para variar.
Macri no se cae. Kirchner no va derecho al 2011. La derecha la tiene fulera, aunque recupera expectativas, los populismos latinoamericanos enfrentan gravísimos problemas-y no sólo por el golpe en Honduras y las quizás probables jugadas del Cobos Paraguayo destituyendo a Lugo- ésta es la coyuntura más crítica para los gobiernos nacionales y populares de la región.
Estamos hasta las bolas. Saquemos la hielera, sentémonos en el balcón, charlemos.
El juego de trincheras es una táctica que desgasta y se torna ineficaz cuando es la única táctica. Todo bien con Aníbal Fernández, pero si quiere dedicarse a ironizar sobre los opositores, que se habra un blog -sirve para la catarsis- y cuando te aburrís, Aníbal, del laburo, metes un post y después volvés a la tarea gris de la administración manso y tranquilo. La política no puede manejarse siempre con la lógica de, digamos, el diario Perfil, que es el Jorge Rial de la política, y tiene un escándalo por día. Por eso a Jorge Rial y a Perfil nadie lo toma muy en serio.
Bueno, conclusión, y me voy a mirar una película: se me hace que todas las fuerzas políticas en pugna están en la misma situación de debilidades y fortalezas que tras las elecciones de junio. Pero el kirchnerismo logró deshilachar el discurso de los mass medias de que estaban hechos pelota; los radicales se creyeron ese juego y comenzaron a destrozarse entre ellos al calor del inminente poder y los peronistas disidentes tras soñar con Reutemaaan, Felipe Solá, Das Neves y ahora Duhalde, están volviendo a la realidad y tratando de organizarse para pactar -como sucedió con Lavagna, el candidato de Duhalde y Alfonsín- con los radicales y entregarles el gobierno para comandar el movimiento peronista tras el 2011. Si llegamos al 2011, claro.
También se me hace y con mi habitual modestia, que para llegar al 2011 hay que bajar los decibeles, dejar que la oposición radical y del peronismo de derecha se ceben con que el 10 de diciembre viene Papá Noel a traerles el gobierno, neutralizar las izquierdas reaccionarias que ven peligrar su empresa con el ingreso para la infancia, y reorganizar una ofensiva que se base, esencialmente, en mejorarle la vida a los sectores populares de las provincias y sobretodo, el conurbano. Avanzar, o hacer creer que se avanza, retroceder, o hacer creer que se retorcede. El partido del orden, para los sectores populares, en medio de crisis internacionales, sectores golpistas, derecha radicalizada, debe ser esta versión del peronismo: el hecho maldito del país burgués.
La guerra de trincheras constante desgasta a la oposición, pero también a los propios. Y la verdad, todo bien con Luisito y su cruzada contra Tinelli, la mejor con Capusotto (que tiene la sabiduría de hacer, al año, pocos programas: la cantidad justa, para no desgastarse y quemarse y repetirse y no perder capacidad para sorprender) muy linda la tapa de Barcelona y así, pero el Senado de la Nación acaba de aprobar la reapertura del canje de la deuda.
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No se si estoy taaan de acuerdo, pero si te puedo decir que este post me hizo las veces de exegesis de muchos otros de similar tenor, que he venido contestando medio en tono de resongo.
ResponderBorrarCreo que la eleccion de junio fue importante en si misma, si hubiera dado un ganador, pero no lo dió.Ahora; la composicion delas camaras es guevada, mas allá del uso simbolico que le quiera dar la oposicion.
¿Bajar los decibeles? hmmm no se, lo voy a hablar con el Nestor y despues te cuento.
De ahi a que nos marquen la cancha, habria que ver que distancia hay...
UHH, ¿Ud. está queriendo levantarse alguna minita nueva Comandante Carrasco? Digo, porque últimamente viene muy, muy afilado. Felicitaciones y suerte.
ResponderBorrarPor otra parte, termino de ver "Soy Leyenda", quién sería para Ud. el mejor capacitado para interpretar el papel de Will Smith, de los políticos argentinos digo: solo contra el mundo y sin ni siquiera una perra que lo lama.
Abrazo