lunes, enero 25, 2010
Las conspiraciones y la épica
Con Edgar Allan Poe nacen varios géneros literarios y periodísticos. Se le suele, también, asignar la creación del género del misterio, del cual deriva la novela policial.
Entre sus muchos exponentes -fundamentalmente anglosajones- se destacan Arthur Conan Doyle y su positivismo, Agatha Christie y ese conservadurismo victoriano y George Simenon. Sherlok Holmes, Hércules Boirot y el Inspector Maigret resolvían la compleja trama justo en el momento de mayor tensión: cuando creíamos -los lectores- saber de qué va la cosa, la estocada, como una piña en la espalda, nos sorprendía.
El desarrollo de la trama, por eso, iba evolucionando en grados de complejidad, tocaba un techo de lo imposible, y después, como en un teatro, se abría el telón. Los esclavos de Platón salían de alegoría de la caverna.
También desde autores anglosajones, el policial de misterio abrió otra rama: el policial negro.
Erle Stanley Gardner y Perry Mason. Patricia Highsmith y Tom Ripley. Raymond Chandler y su Philip Marlowe, conservan, sin embargo, cierta trama conspirativa. Al igual que el género que se les desgrana, el de periodismo de no ficción. Los libros de Rodolfo Walsh, por caso. No así en Truman Capote.
De la novela negra y del estilo narrativo emparentado con la crónica periodística -despojado, minimalista, contundente- surge un autor a mi juicio genial. James Hadley Chase. Con más de cincuenta -por decir un número- novelas escritas, Chase a creado las mejores mujer/fatal, y describió -a la distancia- a la sociedad nortamericana con cierta compulsividad hacia la cloaca. Los personajes son simples: se mueven por ambición, por estupidez, por amor, pueden ser sensatos, brillantes, idiotas, macabros; todo en un mismo cuerpo y lugar.
Y en las tramas generalmente hay una conspiración, un plan, una intriga, que sale para el otro lado. Que falla en su mecánica de planeamiento, que falla por el simple devenir. Hay de trasfondo cierta apelación moral un poco hinchabolas (pero, también me gusta Aghata Christie que es más conservadora que mi abuela; o Henning Mankell sin por eso entender muchos de sus planteos políticos en torno a Africa) y un fatalismo que contrapesa.
El caso es que escribir destrozando las conspiraciones, recordando que los planes siempre salen mal, que hay algo de intangible e inevitable cuando se pretende regir las conductas de otros, que hay motivaciones oscuras, discordantes, complejas; eso, viene a cuento.
Con los años fui aprendiendo -jeje, qué frase, eh: "con los años fui aprendiendo..."- que en una cena con políticos o en un bar con periodistas, desconfiar de la existencia de una conspiración es lograr que todos se enojen con uno. En el relato político y en el relato periodístico -no en el relato público, sino en el relato íntimo- el mundo es regido por conspiraciones y cada cosa que sucede tiene una causa, un motivo, una prueba, una inevitabilidad. Una novela de misterio. Si uno considera que no, fuiste.
Ningún viejo millonario muere al caerse de la bañera antes de casarse con una pendeja sino hizo un testamento. Esa casualidad no puede ocurrir. No habría películas, novelas, conversaciones de café, chusmas de barrio, si las cosas sucedieran simplemente porque sí.
La debilidad de los detectives les suele agudizar el ingenio: cuando están atrapados en un callejón sin salida, surge, al mirar una colilla sobre la chimenea, la luz: y todo, de pronto, se explica, se entiende, se aclara. Y el mundo vuelve a la normalidad de lo predeciblemente aburrido.
Las conspiraciones existen, pero no son la materia prima que domina, cual masones, la realidad.
Es más consistente el poder real, no el político o el público o el estatal, que es apenas el poder temporal, sino el poder espiritual: la Asociación Empresaria Argentina, la Iglesia Católica, la Embajada, la trasnacional republicana, las privatizadas, el pequeño mundillo financiero. Parafraseando mal a Nietzche: no hay hechos, hay intereses.
Pero maquinar y urdir la realidad es muy complejo en una sociedad compleja. Ahora bien, ojo, como recurso retórico, es eficaz y en sentido táctico, correcto. Si se pretende, desde la debilidad, conservar lo propio y resistir. En términos militares: una defensiva estratégica. Para salir del empate que es estratégico ahora y acá para los intereses contrarios al gobierno. No para el gobierno. Para el gobierno el empantanamiento, el 1 a 1, le es disfuncional. Aunque el kirchnerismo ha mostrado en situaicones similares mucha astucia para rehacer el juego.
El gran mérito de retener y entusiasmar las bases propias choca con la paradoja de que, como lo propio no alcanza para ganar, podemos quedar empantanados. ¿Pero acaso no es el momento del calendario en que convenga, justamente, afianzar lo propio? Quizás. Bah, seguramente. Ya habrá tiempo de buscar ampliar: no es mucho lo que nos falta.
Pero hay que decirlo: las conspiraciones le ponen condimento adonde no hay épica. El pago de la deuda externa que no contrajo este gobierno, no es una causa que a mí me entusiasme mucho. Y además me incomoda que Martín Redrado me corra por izquierda y que Amado Bouduo encienda su pasión, su fuego revolucionario: la verdad, señora, mmm.
Y como el DNU ya está en el Congreso y las discusiones en Comisión apuntan a ser aburridísimas, la verdad, convengamos, a ver si cambiamos de tema y discutimos medidas sociales, éticas, de derechos humanos, comunicacionales. El casamiento gay, la institucionalización de un mecanismo -como con las jubilaciones- de aumentos para la universalización de la Asignación a la Infancia (la izquierda tonta de Bolivia, de Ecuador, de Venezuela, le debe decir a sus respectivos presidentes que hacen todo mal..."a diferencia de Cristina Kirchner, en Argentina, que puso la Asignación Universal y la Universalidad de las Jubilaciones" ja.) combatir el mercado en negro, involucrar a las capas medias en un proyecto cultural, una política universitaria, profundizar el Plan Remediar creando fábricas estatales, poner blanco sobre negro los subsidios a Techint, cosas así. O discutir las razones por las cuales hay muchos kirchneristas: las razones denostadas, vilipendiadas, desjerarquizadas. La obra pública, la infraestructura, el financiamiento, las paritarias, los medicamentos, la obra social, los hospitales, los salarios docentes, plata fresca en los barrios, fútbol abierto, compañeros en el gobierno.En Entre Ríos el principal debate político es que el dinero de excedentes de la represa de Salto grande no quede sólo en la costa uruguaya de Entre Ríos: lo saldó Urribarri otorgando a la costa del Paraná la coparticipación por la soja. Eso aporta mucho, muchísimo al kirchnerismo.
Esta defensa estratégica crea un relato que cohesiona, pero ojo, somos pocos. Muy pocos.
Y el kirchnerismo se sostiene en los gobernadores, los intendentes, los concejales, los dirigentes intermedios. Y ahí, el ánimo no es muy épico. Reservas de libre disponibilidad, Redrado, la Jueza Sarmiento, las tasas de interés, el mercado de capitales, son cuestiones centrales de la administración. Pero no es con administración financiera que se genera una épica. Aunque se la respalde en relatos eficaces, transgresores, valientes.
Lo siento.
Pero no estoy dispuesto a volverme un extraterrestre.
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Ja. Hace dos días le decía algo (más modestamente, claro) parecido a un amigo que me preguntaba qué opinaba sobre el pago con reservas. - Y... que se yo. No es algo que me apasione, con respecto a lo cual pueda decir: que bien! Vamos todavía! No es algo que me genere.. uff! que entusiasmo. Que se yo. Si es para expandir el gasto, puede ser. Pero la idea de pagar deuda no está entre mis prioridades prioridades. Aunque si expandir el gasto. He alli the contradiction.
ResponderBorrarSalu2!
Muy Bueno. Carrasco.
ResponderBorrarQusiera agregar una estupidez.
En las novelas de Chase, a diferencia de lo que sucede en la mayoría de las novelas de los autores con los cuales aparece mencionado, suele suceder que el personaje principal (del cual ignoramos casi todo, cosa que no sucede con Marlowe, o Poirot, o Holmes) se encuentre envuelto, por el desarrollo de la trama, en situaciones absolutamente imprevistas o fuera de lo que podría considerarse su "órbita de normalidad" (que a marlowe lo fajen no sorprende, ni que a Holmes lo corran a los cuchillazos... ellos están para eso). En otras palabras: Chase es un maestro para narrar historias en las que alguien está absolutamente fuera de lugar.
Marlowe y Holmes son Marlowe y Holmes. Siempre. Los personajes de Chase no se pueden dar ese lujo. Deben ser en función de las circunstancias. La estupidez que quiero decir es, precisamente, que lo más interesante de las novelas de Chase es que las tendencias moralizantes se diluyen en tanto como lectores no podemos separar nuestros juicios sobre lo que hacen los personajes del contexto en el que lo hacen. Holmes es bueno. Marlowe es bueno. Poirot es bueno. Lo son ANTES de que empiece la historia; ¿Qué significa ser bueno para un personaje de Chase? ¿Cómo podríamos juzgar si es bueno o malo independientemente de sus actos si son sólo sus actos lo que conocemos de él? (Chase prácticamente no escribe sagas: los personajes nacen y mueren para nosotros en cada relato).
Como ya me aburrí de mí mismo, no escribo más.
Moraleja: Vaya a saber.
Muy buen post.
ResponderBorrarLa deuda no es prioridad, pero dados los benditos vencimientos, apúrense y auditen! aunque hay que tener cuero para eso.
Saludos!
Alejandro: coincidimos ene se aspecto, que es justamente el que quería tomar para demoler la idea de las conspiraciones como materia prima dinámica de la realidad.
ResponderBorrarLo que vos planteás es que el cuestión moral está ausente en Chase de por ejemplo -por citar alguien emparentado literariamente- Chandler.
Es interesante lo que planteás. No lo había pensado así, sino en el hecho de que, quienes hacen algo "malo" casi siemrpe terminan pagando ese "pecado".
Pero la idea fuerza que vos planteás, meparece que se superpone y tiene más jerarquía a eso otro que yo digo. Así que puede que coincida más y me corrija en ese punto.
Fijate Lucas que aun pensándolo desde el punto de vista del mal recibiendo su merecido, Chase tiene momentos sublimes pero por lo complejo que lo hace.
ResponderBorrar¿Cuál es el "castigo" que "paga" el "mal" en el secuestro de Miss Blandish? ¿Cómo se mide eso? Creo que Chase es tan grande que si algo queda claro después de leer esa novela (la recomiendo fervorosamente y apunto, además, que tiene una especie de "saga" que se llama "La sangre de la orquídea", que es otra joya) es que en determinadas circunstancias sólo parece quedar como línea de acción modificar el curso de las cosas; ¡Pero eso no es gratis para ninguno, no sólo para los "malos"! ¿Hay que hacer pagar el daño o simplemente hay que buscar un modo de que el daño deje de producirse? ¿O las dos cosas? ¿En qué orden? ¿Y si no se pueden hacer las dos? ¿Qué se hace? ¿Y si se puede cómo se hace? Me imagino a Pino leyendo a Chase y me da como un impulso chicanero que me aguanto.
Basta. Chase es genial. Todo esto sólo pare decir que lean al tipo, que es un capo.
En El secuestro...ninguno gana. Digamos, el mal (que siempre se combate desde el mal y es víctima dle propio mal) es la normalidad, no la excepción.
ResponderBorrarDado ese presupuesto, los villanos (y nadie) gana.
Y si alguien gana, o es apenas un trofeo en la disputa, son las mujeres-
Genial Carrasco. Me quedo con esto: "las conspiraciones le ponen condimento adonde no hay épica". No hace falta más que ver la democracia más diluida del globo, Estados Unidos, para ver cómo aflora por todos lados la dialéctica conspirativa para explicarlo todo en un país donde habrá de todo pero escaseó siempre la épica: su Revolución consistió en tirar unas cajas de té por la borda. No al cuete Chandler y Poe salen de ese caldo de cultivo.
ResponderBorrarDe Lévi-Strauss nos quedaron, además de jeans, kilos de libros pero nada tan famoso como su sentencia acerca de que la manera de pensar del hombre no cambió, sino que sólo lo hicieron las cosas sobre las que piensa. Para el positivismo la mentalidad primitiva sólo ve causas inmediatas, jamás mediatas, achacando a todo la acción de maleficios, seres sobrenaturales, espíritus; anulada la idea de una mente primitiva distinta a la civilizada tenemos que concluir que siempre se tenderá, más o menos abstractamente, a colocar eslabones que salven la brecha de la mediatez. En otra época fueron los espíritus, hoy son las teorías conspirativas. De ahí que en el Occidente urbano -al menos- no adoremos tótems pero siga siendo tan difícil mantener una conversación piola sobre fútbol sin que algún pánfilo salte con que tal cosa "estuvo arreglada" a los cinco minutos.
Si la pos-modernidad (y su auge conspirativo) deviene cuando el hombre "pierde contacto" con las causas que le dieron origen a la modernidad, quizá hay que pensar al al kirchnerismo de la misma forma. Digo, no sé. Hasta ahora siempre fueron cachetazos los que lo hicieron reaccionar.
No recuerdo bien en qué momento fue, pero no es la primera vez que tengo, como vos, esta sensación de opacidad, este síndrome de abstinencia de épica. Capaz es ese mito de la "conducción pendular". Dicen que lo peor de la guerra no son las batallas sino la angustia de la espera; capaz así es el juego republicano, y habrá que aguantársela (si aguantamos, si aguantan) hasta ordenar el equipo para poder armar una jugada de vuelta.
En fin, que el calor no nos ponga impacientes. Abrazo.
Si, es verdad Lucas, en el fondo es un tema bastante ajeno.
ResponderBorrarAsi que sigamos en lo que estabamos.
Lucas me hacés acordar al famoso "se quebró" de los años 70, cuando militabamos en la JUP y algún cumpa empezaba a cuestionar y nos poníamos todos mal porque sabíamos que después se venía el cambio de bando a la izquierda esclarecida y alejada de la realidad, sufríamos un montón, espero que la discusión en este blog sea para construir y aportar sin rajarnos del movimiento.
ResponderBorrarPara algunos no es épico criar a un hijo, la mayor parte del tiempo se aburren; para otros es épico armar una cesta de mimbre (¿para qué?) o pasar un escobillón (¿dónde?) o tejer un pulóver (¿para quién?). Qué importante es la perspectiva. Lo siento.
ResponderBorrarAlina si una duda te va a angustiar así capaz no sea Carrasco el que "se quiebre". Buceá un poquito en los archivos para ver si esto es algo tan nuevo.
ResponderBorrarEstá bien lo que decís, pero lo decís de una manera muy guaranga.
ResponderBorrarYo te lo voy a decir como me lo dijo un amigo el otro día, más académicamente:
Redrado, muchachos, no le para la pija a nadie.
Lagente está de vacaciones che. Trataron de arruinárselas pero no pudieron. La clave estará en pasar febrero. La clave va a estar en el discurso de Cristina el 1 de marzo abriendo las Sesiones Ordinarias. Ahí va a estar la épica. No tengan dudas. Es mi pronóstico.
ResponderBorrarSalu2
que embolado estas Lucas. se nota demasiado.
ResponderBorrarLucas: se te olvida un nombre importantísimo en la evolución de la novela policial: Ross Macdonald. Para mi fue el único auténtico heredero de Chandler y su Lew Archer fue el legítimo sucesor de Marlowe.
ResponderBorrarSi yo fuera Cristina, hace rato, pero rato, hubiera hecho los Campeonatos de Fútbol Infantil "Cristina", igual que lo que hizo Evita. Meter a todos los chicos del país a jugar fútbol los fines de semana. No te imaginás una medida como esa, si es masiva, lo que moviliza las conciencias de todos. La juventud argentina necesita ser convocada para algo. Qué lindo sería que a los chicos de todas las villas los fueran a buscar con micros y fueran llevados a los clubes de fútbol y jugaran un campeonato nacional infantil.
ResponderBorrarPodría ser primero en cada colegio en el fin de semana. De ahí seleccionar los mejores chicos y hacer un equipo de cada colegio. Luego, con los mejores jugadores un equipo de cada barrio, y así seguir hasta formar la selección infantil de fútbol, y hacer un campeonato de fútbol infantil latinoamericano. Qué lástima que me la paso pensando en las conspiraciones. Tenés razón, estamos un poco podridos de ir detrás de la marca que nos ponen.
totalmente de acuerdo con Eva. Aunqe yo preferiría que los campeonatos infantiles se llamaran Evita.
ResponderBorrarParece que la épica está del otro lado....
ResponderBorrarOJO!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
"Ya se sabe que las buenas relaciones de los hombres de la Armada con el
macrismo son de larga data. Pero esta semana una altísima fuente de la
Metropolitana reveló a Miradas al Sur una información estremecedora: esa
institución habría sido víctima de una prolija maniobra de infiltración por
parte del SIN."
http://www.elargentino.com/nota-74971-La-Metropolitana-es-un-puerto-deseado-por-\
el-Servicio-de-Inteligencia-Naval.html
Armas cuestionadas por la ONU
La oposición porteña denunció la compra de "picanas eléctricas" para la
Metropolitana
http://www.elargentino.com/nota-75192-La-oposicion-portena-denuncio-la-compra-de\
-picanas-electricas-para-la-Metropolitana.html
A veces me hartan ciertas críticas que se hace a nivel de conducción. Ni Kirchner, ni Anibal, ni Boudou (?) son una vanguardia esclarecida, esperar que siempre la vean clara es de ingenuos. Sin embargo, me parece que a nivel de bases también pasa por cada uno los mecanismos de movilización. Voy a ser duro con lo que voy a decir, las bases muchas veces reaccionan con dislay frente a las medidas del gobierno, es cuestión de articularse, en ello hay una corresponsabilidad.
ResponderBorrarNo creo que deba ser el gobierno quien involucre a las capas medias en un proyecto cultural, dudo que pueda hacerlo. Estamos empezando a transitar el bicentenario, esto tiene un potencial simbólico que tendría que ser explotado por nosotros, sin esperar que sea el gobierno quien lo haga, bah, no se, es una idea.
Que pena lucas, creo que estás "conspirando"
ResponderBorrarNestor en 678?
ResponderBorrarQue estados unidos mantenga una permanente dialéctica conspirativa, que le permita justificar ante el mundo y su propio pueblo un continuo accionar imperialista, no significa que no exista conspiración alguna, sólo que no esta ahí, donde el discurso lo señala, sino que forma parte de la estructura misma del lenguaje que la expresa.
ResponderBorrarAguante Ross mac Donald
ResponderBorrarFijate que este año se han ido 11 mil millones de dólares en pagos de bonos y otras chauchas derivadas de la Deuda ajena. Hacer a nuevo un kilómetro de via (rieles, durmientes etc.) para que los trenes puedan circular a unos modestos 120 kph sale medo millon de dólares. O sea que lo que pagamos (¡en un año!) equivale a renovar vias entre Mar del Plata, Buenos Aires, Rosario, Córdoba y Tucumán. Esto es solo un ejemplo de la sangría que hemos venido padeciendo.
ResponderBorrarConcuerdo totalmente con vos en que son contados los ejemplos de una mística de grandeza en los niveles intermedios y bajos del aparato Estatal.