El único argumento público para defender a Papel Prensa, por parte del Grupo A, era tirar alguna gilada que el kirchnerismo no se qué. Puro chamuyo.
El argumento real que vuelve loquito a Pino Solanas sin Fibertel es que quiere salir en la tele, viejito coquetón.
Al distribuir las reponsabilidades, pone en un aprieto a los sectores del Grupo A menos comprometidos con las corporaciones y su conduccion, la AEA (Asociación Empresaria Argentina).
Esos sectores tienen un gran problema.
Poner el tema en tribunales es un recurso táctico: son los mismos tribunales que permitieron, primero la tortura y el saqueo, luego su continuidad en democracia. Dicífilmente los funcionarios de tribunales -incluídos los charlatanes de la corte suprema- se tomen en serio este delito. Tienen el culo muy sucio como para exponerse.
En el congreso, con predominio del Grupo A a partir del transfugismo de ex kirchneristas, es otra cosa. Difícilmente prospere la iniciativa de la Presidenta, pero también, por los costos sociales que acarrea, termine la ley votándose en contra. La van a planchar. O van a intentar plancharla. El problema es que Magnetto está sacado, y seguramente continuará con este tema instalado en la agenda.
Mientras tanto, el gobierno distribuye responsabilidades (ojo, a no confundirse con el republicanismo berreta: ni los tribunales ni el congreso modificaron la impunidad a los masacradores que fue instigada por el poder ejecutivo -Alfonsín, Menem, De La Rúa y Chacho Alvarez, Duhalde- y modificaron su postura cuando el poder ejecutivo instigó a la condena -Néstor y Cristina Kirchner) y asume, de este modo, una agenda propia que pone en escena qué es el estado, en su totalidad.
A la vez, deja del lado de los "crispados" a las empresas comunicacionales, manchadas de sangre. Escenifica el porqué de esa crispación de la derecha. Escenifica quién coordina el Grupo A. Ningunea, correctamente, a los empleados menores -la dirigencia política- de la AEA. Muestra mesura, cuando todos esperaban una expropiación por decreto, con los cual, les saca la escalera a los más sacados de los empresarios.
Un gran discurso, histórico.
Los argumentos que esbozan, ya, Clarín y La Nación, van a la defensiva y huelen, a kilómetros, a chamuyo.
Un gran día, hoy.
Coíncido, hoy es un gran día.
ResponderBorrarTambién coincido.
ResponderBorrarHoy, en mi blog, les deseaba a los de Clarín y La Nación que tuvieran un buen día, como dijera el filósofo contemporáneo norteamerican John Bongiovi.
Para mi es la jugada tácticamente más inteligente que se podía hacer, en función de sustentar a favor de quien opera el Grupo A. En fútbol se llama comerse el amague. Tenían la conferencia de prensa para ponerla pegadita a la finalización de la cadena, y tuvieron que salir como media hora después a hablar: desconcierto se llama eso.
ResponderBorrarSobran los cómplices de la maniobra denunciada. Creo que ya no queda lugar para aquellos que quieren seguir haciéndose los boludos.
ResponderBorrarLa respuesta desaforada de Carrió era la prueba misma que la oposición estaba seteada para responder a la expropiación.
ResponderBorrarLa Pitonisa habló de la Alemania del '39, de las intenciones satánicas de Cristina y de Nestor como el nuevo Lopez Rega. No es exagerado, todos sabemos que el crimen de los nazis y de Lopecito fue enviar leyes al congreso y presentar demandas en la justicia.
Un buen discurso. Algún día alguien me tendrá que explicar por qué lanzaron lo de Fibertel justo en este momento, pero eso es otro tema.