jueves, septiembre 02, 2010

Informe sobre Taxis




 Ayer, le decía a Jimenita algo (en contra) del Informe sobre ciegos, de Ernesto Sábato. No sé porqué, ya no me acuerdo. Andá a saber. El caso es que después me acordaba de eso, porque me subí a un taxi, era de noche y no andaba nadie por la calle. El viaje era largo, y el chofer, se vé, me vio cara de escuchante de monólogos taxísticos, y la verdad que no. El tipo, un jodón de esos que abundaban en los 90, que fabricaba en serie, te acordás, Videomacht, bueno, uno de esos giles (ojo, yo pensé que eran una especie en extinción, como los osos pandas) que me contaba toda clase de chapucerías para ganar dinero a bordo del taxi. Carteras olvidadas, celulares de borrachos, paseos a los extranjeros, y lo más, su punto óptimo de viveza porteña (dios, cómo odio a los porteños): llevar por 100 pesos a un pasajero a Ezeiza, y luego, traer otro de vuelta por 100 pesos (pero sin contarle al dueño del auto, jojo, cuando sea grande, quiero ser como vos) porque para conseguir pasajeros de vuelta, le das 30 pesos a uno de seguridad que se acerca al incauto y le obliga -por su seguridad, señora- a tomar equis taxi, que viene a ser, equis, justamente el que maneja este nabo, que entonces, cuando está cerrando su puerta, arroja, atención, 30 pesos sobre la banquina, que luego el botón de seguridad, recogerá. Sofisticadísima modalidad de delincuenciar, capo total, eh.
El Pelado (no el que me dejó plantado ayer, sino el taxista) al terminar -ah, porque ahí termina el punto óptimo de su carrera de vivísimo- se mandó una risotada más grasa que las risas de Fierita, ese que está en la tele.
Un boludo, el pelado.
Se dio vuelta -ahí por Cabildo, pasaba los semáforos en rojo y ni los veía, porque iba dado vuelta, riéndose en mi cara, buscando mi complicidad, buscando que me interne en la historia pelotuda que me contaba y la haga mía y le diga, no sé qué esperaba que le diga, pero ponele algo así como qué guacho pistola sos, no te puedo creer, sos re groso, cosas así, pelado botón. Bueno, pará, el caso es que mientras yo bostezaba, pensaba en Informe sobre ciegos. Capaz, fijate bien, sacá el tema de los ciegos, y pone a los taxistas. Y si son, epa, una secta: y si están organizados en reuniones clandestinas donde se proponen arruinarnos la vida para luego apoderarse del mundo?, qué me decís, puede ser, no?. Ojo; capaz que lo digo de perseguido, pasa también que yo no creo que la humanidad pierda nada cuando muera el último oso panda (sí, niños, sépanlo en la posteridad: su abuelo fue un desalmado) ni creo que habrá guerras por el agua, de hecho, fijate, los barcos que llevan soja desde los restoranes de rúcula en puerto madero hasta  los chanchos chindios, siguen llevando, nomás, soja: Grobocopatel no la vio. Dejá de llevarle soja a los porcinos chinos e indios, y llevate agua a los Estados Unidos, negoción. Bueno, tampoco creo en las predicciones de Nostradamus ni en los milagros del padre Ignacio, ni en que San Juan contamine más que un recital de Pity Alvarez en el Luna Park, en alguna conspiración tengo que creer, qué tanto. Ah!, no, todos tienen su conspiración ahí, a mano, y yo no tengo derecho a tener mi propia conspiración, no, ta mal eso: los derechos de uno terminan donde empiezan los derechos del otro, ponele: mis derechos terminan donde empiezan los del CEO de Techint: cada cual tiene su derecho, y en las conspiraciones es igual.
Para mí, y lo digo en serio, los taxistas se reúnen los 24 de diciembre en un subsuelo de la manzana de las luces y tienen escritores a sueldo -que secuestraron en Puán y los tienen encadenados como esclavos- escribiéndoles las historias más aburridas, porque esos chicos en cautiverio, encuentran erótico al Quijote y siguen el canon de Beatríz Sarlo, o sea, de coger ni hablar, y escriben las historias más aburridas, tontas, idiotas, fastidiosas que se les puedan ocurrir y los taxistas las estudian, las propagan,  las diseminan buscando generar, como Ben Laden u Obama, caos en el tránsito mental, terror, miedo, fobias, enfermedades mentales, aislamiento social y votos para el PRO. Esto lo sabe bien Martín Rodríguez y se lo calla, pero alguien tiene que decir la verdad, gracias. Dios, cómo odio a los taxistas.
Acabo de llegar a mi casa en Santa Fe, Barletta, ahí están las ramas, todavía, en la vereda, del árbol que me podaste. Traidor. No te digo hijo de puta porque respeto tu investidura, pero ése árbol era mi árbol, criminal, asesino serial, podador, radical, sos la peor especie que uno puede encontrar en un cumpleaños de una tía.  Incluso, de Mí tía, que ya es mucho.
Nacho, necesitamos reemplazar este gobierno municipal por una asamblea de los trabajadores (excluyendo a los podadores de árboles) con inspiración maoísta, lástima que si es por trabajadores y bajo control obrero, quedamos afuera, vos y yo. A no ser que, ponele, vos te proletarizes, no sé si se escribe con zeta, con doble zeta, con ese o la ese o con cé, no sé, cómo se escribe, Eva? . De todos modos, yo, de proletario, con estas manos delicadas, ni en pedo. Que me perdone Otto Vargas, allá en el Cielo. Como me dijo María, que en los setenta militaba en el PRT: "cómo me voy a ir al monte, si ahí en el monte tucumano no hay bares donde tomar un café". El caso es que el taxista, entonces, iba llegando a Retiro, y subió el volumen de la radio a todo pedo (supongo que enojado, porque yo no le daba bola: lástima que no uso celular, en esos casos, lo extraño. Aunque sean las 5 de la mañana, no sé, la llamo a mi vieja para que me de una receta de budin, con tal de que el otro, en este caso, el taxista, comprenda cabalmente, con la tarjeta Cabal, que no quiero hablar con él, eh) y en la radio, 10 la radio, por supuesto, no sé qué boludez decían,algo de que había más muertos iraquíes, claro, pero, obvio, esta conchuda que no hace nada. No pregunte cuál conchuda, porque, bueno, ya sabemos. En cambio, me dice, que la presidenta, es brava. Hay que aguantar una mina así en tu casa, eh. Jojo. Dios, cómo odio a los que se ríen vulgarmente. Y se da vuelta con su risotada desgradable. Jojo; dios!, cómo odio a los taxistas, y pasa otro semáforo en rojo. Pelado botón. Le contesté con otro bostezo. El pelado botón me quería hacer a toda costa partícipe necesario de SU conversación. Y me dice, ya subiendo hacia el andén 3:
-Y vos que opinás de la Presidenta.
-Y...pasa que son muy chorros, le digo, bostezando.
-Sí, ni hablar, a mí eso me indigna.

Abrí la puerta, estuve a punto de decirle algo. Pero bostecé. Y se fue, pelado botón, caradura, andá a robar a Ezeiza.
 Le azoté, un poco, la puerta. Y me fui a Rosario. Pero como el Edu no me invitó a un asado (una táctica que utilizo para estar cerca de...de donde se cocina la cosa) me vine a Santa Fe. Y las ramas, secas, del árbol, todavía, Barletta, ahí, mirá, ves?,no te hagás el sota,  bueno, ahí, mi árbol, muerto, caído en combate, sin notificarme, sin consultarme, sin diálogo y consenso, sin juicio previo, el colmo de los colmos, ahora el gobierno -municipal- gobierna, unilateralmente. Dios, cómo odio a los intendentes. Eso te incluye a vos, Turco, en Paraná, que eras mi amigo. De bronca, me compré un queso a la pimienta, un salamín y un tinto, para mirar, por el balcón, mientras meriendo, a ver si pasa, tipo 6 de la tarde la zorra de mi vecina, que va al gimnasio y me mira así como extrañada, me va perdiendo el cartel, me mira sin comprender. Dios, decí por dios algo del guapo que ayer brillaba. Te vi pasar con un compás tan, y ayer en vez de pelear me puse a correr, por la costanera, estoy hecho, ya ves, un maricón.
Hasta luego.

7 comentarios:

  1. flaco por favor hacete de proyecto sur, sos piantavotos

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  2. "yo, de proletario, con estas manos delicadas, ni en pedo" tamuybueno

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  3. los tacheros y las moscas no se terminan nunca...

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  4. Leo muchas boludeces a diario, pero nunca de alguien que presume de referente de opinión. Tomate vacaciones, pero largas...

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  5. que loco que entre gente para putearte. siempre me pareció loco, no sé porqué, tal vez no tengan nada que hacer pero es raro perder tiempo en algo que no te gusta leer, sobretodo.

    mi viejo que ya no está, cuando me iba a alguna marcha, mi viejo que era re gorila, pero no facho, me decía: ojo con los taxis a la noche, son todos buche de la cana.

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  6. Coincido plenamente, pibe, corta por Lozano, adherite a Patria Libre, y ahí si, anda a ahcer campaña por Pino en la tele, nos das una mano

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  7. Te burlás de los taxistas. Son laburantes. No pajeros como vos.

    Típica progresía que le echa la culpa de los fracasos del kirchnerismo a los taxistas.

    Manual de zonceras argentinas.

    ¿Con qué libros se educaron estos tipos para decir tantas imbecilidades...?

    Hacete de abajo.

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