Ayer, Marisol, dijo algo tremendo. Escribió, mejor dicho. Escribe muy bien y piensa mejor. Pero, una frase: "Mariano Ferreyra tiene 23 años, mi edad".
Ponerse en ese lugar, el de una víctima de un asesinato político. De un crimen.
Cuando yo tenía 23 años -en el año 2001- en Paraná la policía, en el marco de la represión radical, asesinó a dos nenas de trece y quince años, y a un militante del PCR de 25. El estado nacional y algunos estados provinciales -Reutemann en Santa Fe, Ruckauf en Buenos Aires, Montiel en Entre Ríos, De La Rúa en el país- habían ordenado matar.
La jornada terminó con decenas de muertos.
Por mi trabajo, después visité a los familiares de los muertos. El dolor, el absurdo, lo indecible.
Desde el 2003 el gobierno nacional -en una de sus más nobles e históricas decisiones- resolvió no matar. No asesinar. No reprimir.
El estado, por supuesto, sigue cometiendo crímenes. Ahí están los tribunales avalando las torturas y tratos inhumanos en las cárceles, fomentándolos, festejándolos, ocultándolos.
El pibe tenía 23 años.
Militaba en el Partido Obrero. Como mi hermano, hasta que llegó Kirchner.
Las teorías conspirativas abundan. En torno a una nota del Cronista Comercial se armó un mundo. Una página institucional del gobierno de Scioli tiene en su archivo del resumen de prensa la nota en cuestión. Fechada en setiembre del año pasado.
Los sectores comunicaciones y empresarios que ven en los que ejercen la defensa de los derechos laborales a poco menos que el monstruo, buscan su tajada. El Grupo Clarín, de manera asquerosa, junto a la comparsa política que le hace coro (justito hoy, Pino Solanas le dice con cariño al diario La Nación que opina como la derecha en el caso de Papel Prensa) salen como cuervos a picotear cadáveres. Pero hay cadáveres. No hay que olvidarse.
Y, qué tanto: me parece, entre lo que puede esperarse, hasta te digo, saludable, que todos los sectores en pugna, ahora que se ha visibilizado, durante estos años, los conflictos más profundos de la sociedad, me parece bien que todos busquen su tajada. No sólo porque tienen derecho a decir lo que quieran, y a pujar hasta sin límites éticos. No sólo por eso. Sino porque entre el cinismo de la dirigencia troskista, la miseria del Grupo Clarín, la hipocresía del peronismo disidente y del radicalismo todo, las mañas de algunos sectores oficialistas, las palabras más serias de los organismos de DDHH, entre todos esos, y muchos más, se está creando la presión política imprescindible para la pronta resolución del caso, el castigo penal a los autores materiales e intelectuales y los cambios necesarios en un mapa complejo de sindicalismo empresario, empresarios subsidiados, transporte de mierda (aunque, ciertamente, privilegiado si se compara con el resto del país) y la emergencia de cuadros sindicales jóvenes, que se expresan en la izquierda y en la Juventud Sindical. Puede gustar más menos cada posición política, pero en mi caso, me alegra y celebro esta emergencia de cuadros sindicales jóvenes. Aún tímida como tendencia social. Pero, me parece, positiva. Ahí llegó el tiro, al corazón ése.
Y a un cuerpo, una cabeza, de sueños locos, de 23 años.
Toda muerte es en vano. Pero, ante la fatalidad (triple fatalidad: es un crimen, un crimen político, un crimen que el estado debió prevenir) el dolor social se mitiga con los cambios políticos necesarios, además de el juicio con todas las garantías de la ley a los hijos de puta que mataron, instigaron, planificaron y encubrieron. Cuando de una patota salen tiros y nadie declara quién fue el autor, pasa a ser cómplice.
Y, además, siembra la presunción de que se trata de hechos planificados.
Contra esa tendencia -bah, tendencia como palabra es demasiado sutil, contra este ventarrón- de ya tener todas las respuestas, como en una novela del Séptimo Círculo, de los años 40, me da una cosa tan inusual, tan fuera de lo común en este cuerpito: me pongo modesto, humilde, espero. Me quedo callado. Y sin embargo, la disputa por la significación de este crimen, con la carga de crueldad que implica disputar la significación, me parece algo hasta positivo: porque hay que resolver la crueldad mayor de un asesinato, y es la que carga, para siempre, en su ausencia, el asesinado. Para que el muerto viva, para que se genere presión, para que nos sintamos incómodos, para que los culpables sean llevados a tribunales, para que recuperemos la alegría, que dimensiones la perdida, para que digamos Nunca Más. Para eso es necesario romper los huevos.
Impecable.
ResponderBorrarAbrazo
Es tan delirante como la muerte de Matías Berardi. Una "sirve" para que algunos medios escriban una cosa, y otra, para que escriban otra cosa. Cuando algún delirante sale a decir algo, lo enfrento con la muerte de Matías Berardi.
ResponderBorrarOjalá se esclarezca con tanta celeridad como la de él, aunque se trate de un PO, aunque estaba ayudando a un reclamo salarial, aunque no viviera en un country.
Muy buena esta nota, Lucas.
ResponderBorrarLamenablemente hay quienes sacan partido de este tipo de sucesos.
Considero que todos somos un poco cómplices o responsables de esto (es muy largo de explicar para un comentario, pero supongo que se entiende) y como sociedad no podemos darnos el lujo de perdonarnos algo así.
Saludos.
excelente Lucas, y voy a insistir con lo que vengo diciendo desde ayer: "Compañeros y compañeras esto es lo que pienso:
ResponderBorraryo sé que la cobertura mediática es horrible y que la utilización política da asco, pero acá hay un pibe, militante, trabajador, obrero de 23 años muerto, asesinado, si perdemos de vista esto, estamos fregados.
Nosotros los militantes del campo nacional y popular
que somos peronistas no nos da "lástima" ver a un pibe revolviendo la basura sino que nos da mucha bronca, tampoco nos da "pena" que un pibe de 23 años sea asesinado, nos indigna, nos revela, porque siempre lo reconoceremos como uno de los nuestro, pertenezca al partido que pertenezca. Siempre será uno de nosotros."
Lorena
Lucas...totalmente de acuerdo. De esta no puede salvarse nadie. Ni nosotros. El q se quede callado, el q no exiga el esclarecimiento total de este asunto sera complice. Mi apoyo por los K esta ahora condicionado. Tienen q demostrar q son capaces de poner la presion q saben ejercer en los lugares concretos para q este asesinato se resuelva en dias. Les cueste lo que les cueste...Si asi no fuera yo personalmente voy a contribuir para que el costo del no esclarecimiento sea aun mayor que el de mantener el status quo.
ResponderBorrarTODOS LOS CRIMENES SON HORRENDOS E INJUSTIFICABLES, pero los crimenes politicos tienen la finalidad de amedrentar sociedades. CUANDO MUERE UN MILITANTE MORIMOS UN POCO TODOS.
NO PASARAN.
Hoy mas q nunca:
Sara Hustizia
Soy Ximena, estudiante de psicología...con una ideología cercana al kichenirsmo, nose como definirme aun. Con 23 años, la misma edad que matías... y que marisol... y hoy no tengo clases por la muerte de matías.. terrible, super evitable, injustificada...no se pueden defender más lo derechos??... no creo que sea asi... pero me asusta. Me asusta encontrarme con la muerte a la vuelta de la esquina, por que sea por esto, sea por lo de matías, por lo de las chicas de beara..., por lo del gimnasio..donde murio maxi salgado amigo de mi hermana, un pibe divino.. sea por a o por b... inseguridad, manifestaciones, cuestiones edilicias, negligencias siempre perdemos a la juventud??!! al futuro??? como puede ser!! lo mismo paso en la epoca de la dictadura... se perdio una generación entera de entre 18 a 30 años o más.. o menos.. No lo entiendo...y lamentablemente no siento que las cosas vayan a cambiar, es triste pero lo siento asi.
ResponderBorrarbuena lucas
ResponderBorrarlo unico que quiero es no escuchar connotaciones politicas de ningun tipo por un rato, hasta que se me pase un poco el marasmo por esto que paso. reflexion memoria verdad justicia
un abrazo
Muy bueno.
ResponderBorrarNo parece el mejor camino buscar explicaciones y pedir justicia en sentido acorde a determinados paradigmas ideológicos y/o partidarios. Casi nadie se anima a moverse un milímetro de su rol. Muchos parecen querer aprovechar la situación para reforzar su postura, formulando análisis flacos, burdos, apresurados y ruines. Muchos. Todo esto causa una fuerte tristeza. Y altísimo repudio.
ResponderBorrarexelente Carrasco!! post obligado para entender.
ResponderBorrarexelente Carrasco!! post obligado para entender.
ResponderBorrarLucas, tu nota me moviliza. Hace casi dos días que vivo una pesadilla. Mi hermano tenía la cabeza llena de sueños. Le arrebataron todo. Me lo arrebataron. Estoy en una burbuja de dolor. No veo noticieros, no leo diarios. Solo leí esta columna. Quiero quedarme con estas ímagenes de mi hermano para siempre, no con las de los medios.
ResponderBorrarpablo.r.ferreyra@gmail.com
Fuerza Pablo...
ResponderBorrarPablo mucha fuerza!
ResponderBorrarGracias Lucas, como siempre muy bueno lo que decis!
ResponderBorrarPablo mucha fuerza para vos y los tuyos.
Fuerza, Pablo.
ResponderBorrarImpresionante. A romper los huevos.
ResponderBorrarQue esta lamentable muerte, sirva, como otras muertes bisagra en otros temas (caso Carrasco, María Soledad, etc), para profundizar el modelo allí donde todavía no llegó: el trabajo precarizado, en negro, el sindicalismo empresario explotador de trabajadores, las relaciones de algunos funcionarios con personajes que no merecen llamarse peronistas (así como tampoco esos funcionarios), la democracia sindical que sólo se vive en algunos gremios; en fin, derribar los últimos mojones del modelo neoliberal que nos pudrió la mente a todos los argentinos.
ResponderBorrarSólo así nos sentiremos completamente orgullosos del proceso de transformación que estamos llevando adelante.
Banco a muerte a este gobierno, creo que es el mejor que viví y viviré, pero hay cosas grosas, pesadas, donde aún la mano reparadora del Estado no llegó, y espero que llegue para que el cambio no sea sólo coyuntural, sino estructural.
Un abrazo peronista
Fuerza Pablo, para vos y tu familia.
ResponderBorrar...
ResponderBorrarChelus dijo...
ResponderBorrar"Banco a muerte a este gobierno.." No,no,no "a muerte"? es lo q se trata de evitar,lo apoyas en todo caso,estas de acuerdo en todo,pero terminemos con esto de "bancar a muerte",eso tal vez pensó el asesino y no olvidemos q hay una mujer grave q no murió de casualidad y otra persona herida,pudo haber sido cualquiera, pudieron ser más
Extraordinario. También tu reflexión va directo al corazón y a la cabeza, como la bala que alcanzó a Mariano. Estoy desolada y más que nunca deseo debatir y reflexionar pero el ruido mediático es ensordecedor y muchos argentinos siguen su ritmo.
ResponderBorrarGracias
Viviana
Muy bien Lucas
ResponderBorrarEl mensaje de Pablo me dió vértigo. Me hizo recordar lo enloquecido de dolor que estuve los días siguientes a la muerte de mi primo Fabián y me pregunto de dónde sacó fuerzas para dejarte su mensaje.
ResponderBorrarPero releyendo tu post se entiende: era el lugar indicado.
Yo también, como Chelus, me acordé de tu homónimo el soldado Carrasco, en el deseo de que al menos podamos recordar esta desgracia como una bisagra. Y también pensé en esa lista de tareas inconclusas.
Sólo que no soy peronista y no banco a este gobierno hasta la muerte, aunque sea el mejor que he vivido de adulto (junto con los tres años felices de la primaria con Illia). Pero elijo bancarlo con sus defectos, sabiendo que las presiones le hacen bien; porque en varias ocaciones respondió mejorando. Ojalá ocurra así ahora y se merezca ganar la continuidad, por el bien de todos nosotros.
Esta cuestion nos revela y nos rebela. Es dificil eso. Porque si rebela, nos sentimos victimas y nos levantamos por una causa, sintiendonos heroes (Tal vez). Pero si tambien nos revela, se deja ver todo el entramado politico social y también nos enfrenta a nosotros mismos. Esto es tremendo porque no es una situacion ideal es un proceso de descomposicion pero de doloroso nacimiento. Esta irreparable e injusta muerte quizas lleve el germen de un nacimiento. Ojala asi sea.
ResponderBorrarMUY BUENA NOTA!
ResponderBorrarMe limitaré a decir que OJALA QUE LOS CULPABLES PAGUEN. y celebro esa postura de que se les brinden todas las garantias, como celebro desde hace años que este gobierno haya decidido, ante todo, respetar la vida y el Estado de Derecho, pero en serio..
Muy bueno Lucas, aunque ahora la verdad es que no estoy con ganas de escribir...
ResponderBorrarEntenderás porqué...
Adrián Corbella
Felicitaciones lucas, es un placer leerte.
ResponderBorrarPablo todas las fuerzas desde mi humilde lugar!!!
por otro lado, Adrian Corbella, profesor de historia en escuela y medios hasta 1999?
Soy ese Adrián Corbella...
ResponderBorrar¿Con que Melina estoy "hablando"?...
[Vas a encontrar un blog con mi nombre, si querés comunicarte en forma directa].