Me gusta esa foto. Me gusto yo, digamos. Me gusto tanto. A veces, desmesurado, pienso que no puedo vivir sin mí. Pero me guardo de andar diciéndolo mucho, más que nada por razones estéticas. La gente como yo, con esta inteligencia desenfrenada, el talento que desorbita, acostumbrados, con naturalidad, a tener la pesada carga de liderar al resto, la gente así tiene la obligación de ser humilde. De parecer, incluso, un poco agrandado; cuando en verdad uno está siendo humilde: está tratando de bajar, de parecerse a la media, de no parecerse a la media sólo en el defecto torpe de la soberbia. Los más se equivocan -un error filosófico que es parte de nuestra cultura- al encontrar debilidad en la persona soberbia. Es un error. El soberbio siempre te empoma, sabelo. La psicología disponible en el mercado latino dice cosas tremendas, como que la soberbia es una consecuencia del complejo de inferioridad. No es así. Pero la psicología disponible en el mercado es una receta moral que encima se enseña en universidades públicas. Hay algo del orden de la venganza de los enanos contra el gigante. Un déficit de nacimiento, una marca de fábrica, un pecado original que al final termina igualando a justos con pecadores, a humildes de espíritu -a mediocres- con altivos, con soberbios, con los hombres solitarios que suben a la montaña. Cuando era chiquito, las viejas con guardapolvo eran menos confusas, le llamaban, a eso, catolicismo. Ganarse el cielo. En la adolescencia el cielo se tocaba en una cama, que flotaba entre las nubes. Como en esa película de Subiela, firmada, erróneamente, en los 90. La juventud que tuve tocaba el cielo cuando provocaba. Ya no soy joven, se van gastando los cartuchos de la provocación. Me queda tomarme el pelo. Poca cosa.
jueves, junio 23, 2011
el amor es así, me quiero, qué querés que le haga, corazón.
Me gusta esa foto. Me gusto yo, digamos. Me gusto tanto. A veces, desmesurado, pienso que no puedo vivir sin mí. Pero me guardo de andar diciéndolo mucho, más que nada por razones estéticas. La gente como yo, con esta inteligencia desenfrenada, el talento que desorbita, acostumbrados, con naturalidad, a tener la pesada carga de liderar al resto, la gente así tiene la obligación de ser humilde. De parecer, incluso, un poco agrandado; cuando en verdad uno está siendo humilde: está tratando de bajar, de parecerse a la media, de no parecerse a la media sólo en el defecto torpe de la soberbia. Los más se equivocan -un error filosófico que es parte de nuestra cultura- al encontrar debilidad en la persona soberbia. Es un error. El soberbio siempre te empoma, sabelo. La psicología disponible en el mercado latino dice cosas tremendas, como que la soberbia es una consecuencia del complejo de inferioridad. No es así. Pero la psicología disponible en el mercado es una receta moral que encima se enseña en universidades públicas. Hay algo del orden de la venganza de los enanos contra el gigante. Un déficit de nacimiento, una marca de fábrica, un pecado original que al final termina igualando a justos con pecadores, a humildes de espíritu -a mediocres- con altivos, con soberbios, con los hombres solitarios que suben a la montaña. Cuando era chiquito, las viejas con guardapolvo eran menos confusas, le llamaban, a eso, catolicismo. Ganarse el cielo. En la adolescencia el cielo se tocaba en una cama, que flotaba entre las nubes. Como en esa película de Subiela, firmada, erróneamente, en los 90. La juventud que tuve tocaba el cielo cuando provocaba. Ya no soy joven, se van gastando los cartuchos de la provocación. Me queda tomarme el pelo. Poca cosa.
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La primera vez que escribís algo con lo que me siento identificado.
ResponderBorrarY hasta me gustaría estar hablando en joda. Si fuera en joda no tendría que soportar las tremendas consecuencias de que sea cierto.
sabés qué ? la soberbia es el único defecto que te impide ser perfecto, por eso se combate, sabélo, pero ojo eso es para el religioso y el humano es religioso crea ó no
ResponderBorrarYo no creo en nada de eso,soy de Marte, pero sé que el tiempo te pone en tu lugar que es justo, justo donde estás en cada momento y que si no provocás no es porque sos viejo ni por soberbio ni por humilde sino porque se te va muriendo la alegría, sabélo, solo para que el cielo no se aleje, total te vas a seguir amando, lo sé porque yo también me quiero,corazón
noooo, no te metas en terrenos donde sólo podés balbucear pavadas, como la psicología... no está probado que exista algo que se pueda llamar "complejo de inferioridad", pero sí existe el resentimiento, y la soberbia es uno de sus síntomas más frecuentes... vamosss lucasss, siempre vas a desear ser alto y con voz gruesa!
ResponderBorrarQue buen regalo en el día de mi cumpleaños, una foto mía en tu blog, y encima decís que te gusta. lastima que no es nada buena. Pero con lo que escribiste le pasaste el trapo.
ResponderBorrarAbrazo grande Lucas!
Si tanto te quieres, este bonito tema te va a gustar: http://www.youtube.com/watch?v=9Ce5eGKP39w
ResponderBorrarfeliz cumpleaños, Victoria.
ResponderBorrarehh ese que dice que la soberbia es un defecto... chupala.
ResponderBorrarLa soberbia es un derecho adquirido.
No hay ningún problema con la soberbia, el problema lo tienen quienes no pueden argumentar y acusan de soberbios al que te cierra la boca.
Esta todo bien con la soberbia.
El problema es la combinación de ignorancia y soberbia, que es lo mismo que decir el uso de la soberbia sin haberse ganado el derecho a su ejercicio.
No es el caso de lucas carrasco