Mario Wainfeld comienza a diferenciarse

El tamaño de la de Yoma

1) Jorge Fernández Díaz sobre el kirchnerismo y el cristinismo

2) Como bien subraya Manolo Barge, este párrafo de Wainfeld era impensable antes del giro a la derecha (y la no aceptación en las encuestas y urnas correlativas de este giro)
El cronista recuerda que Ginés González García, a la sazón Ministro de Salud (el último de nivel que tuvo el kirchnerismo)
El análisis, como siempre, es bueno. Wainfeld es un fino analista político. De los mejores del país. Con mucha muñeca, además, para entender los trazos sutiles del panorama político.
Pero, claro, recordar las escenas post-derrota del 2009, cuando el kirchnerismo giró a la izquierda, es inútil porque tras la derrota del 2013 (denuncias de corrupción mediante, que hasta ahora no han sido probadas en primera instancia por los tribunales, pero el comportamiento de Cristina es BASTANTE OBVIO) cuando el cristinimo, por necesidades penales, gira a derecha.
Y a diferencia del 2009, el propio Wainfeld, que antes no profetizaba cambios de camiseta entre los políticos profesionales, ahora, sí, je.
Acá hay que tener en cuenta, aparte de esta nota, una cuestión sencilla: Cristina, Curto, Massa, Macri, De Narváez, Abal Medina, no tienen talento para otra cosa que no sea la administración (conservadora) del conflicto social. Y su gusto por la guita no lo digo yo, sino sus cuentas bancarias y fastuosos estilos de vida (a menudo, con dinero ajeno).
De manera que, aunque la ideología incide lo suyo, no es gente que pueda hacer otra cosa para sostener sus estilos de vida (fastuosos, indiferentes, a menudo miserables moralmente) y la corte de psicópats serviles de la que suelen rodearse.
Pedirles que no se cambien todos los días de camisetas ideológicas, es en vano.
Si el objetivo es condicionar ese rumbo doctrinario, es a través de las organizaciones populares.
La novedad que para quee so no suceda incorporó el cristinismo, es que en la sorganizaciones populares, se la copa o se las destruye. Consumir poder, jamás producirlo, de eso se trata.
Volvamos a la nota:

Varios programas de tevé se ofrecen remixando el interés propio con un discurso republicano, que siempre queda bien. La Universidad de San Martín ofrece un marco institucional al debate, sería una innovación grata en la conservadora cultura política dominante.

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Congreso, 2014, su ruta: El FpV “provincializa” las campañas un cachito, hay más juego para los candidatos. Pero nadie se engaña: las elecciones de medio término son un plebiscito sobre el gobierno nacional y ésta no hará excepción.




3) ¿El populismo alemán avanza hacia una dictadura?
Fea comparación la de Mus-Grave, pues Alemania es, efectivamente, lo más parecido a un estado dictatorial en Europa (dejando de lado, por supuesto, la nefasta teocracia que dirige el amigo de Cristina, quien tiene, ¡oh qué envidia, no tiene que pasar por elecciones!).
El necesario debate sobre la reforma constitucional en Argentina, con la inclusión de la reelección indefinida, con la cual yo estoy de acuerdo, tiene que pasar por otro lado. Dado el clima, además, debería incluirse la democratización de la justicia, una tarea pendiente de la democracia argentina.

4) Un muy interesante link aportado por Fernando Esteche: la ONU considera que la mayoría de los "rebeldes" en Siria son del partido de Ben Laden