"No vi ningún partido" El papelón de Cristina

100 detenidos, según la cana, no le mueven un pelo a la vieja

Beliebers k, decime que se siente tener en casa a tu mamá te juro que aunque pasen los años de reírnos no vamos a parar

Cristina obligó a los jugadores de la selección a escucharla, transmitido por ATC; en el predio de Ezeiza. Naturalmente, por el cagazo de lo que pasó ayer en el obelisco y porque se está enterando que fuera de los beliebers K en el patiecito de la Casa Rosada, la gente ya no la soporta.
Así que nada de Casa Rosada, porque la negrada llegaría ahí y los incidentes se trasladarían a los aposentos donde holgazanea la Su Eselensia.
Cristina explicó cómo vivió ella el Mundial, como si a los jugadores o a los argentinos debiera importarles y le dio consejos médicos a Higuaín, que tras una brutal patada siguió jugando el partido, comparándolo con ella, que por un chichón electoral huyó de su trabajo de presidente por cuatro meses, para volver y bailar sobre cadáveres con el mismo espíritu de negación que hoy demostró con lo que pasó ayer.
Después, conduciendo su programa de TV obligatorio, hizo pasar el micrófono por cada jugador, estirando la ronda aún cuando era evidente que agachaban la cabeza (parecían Randazzo con Boudou)  para disimular el fastidio y los bolazos que decía la vieja.
Sin embargo, sucedió algo extraordinario que refuerza la tesis cosmogónica de los superpoderes de Mascherano: fue el único que logró que Cristina participe de un acto oficial antes del mediodía.