sábado, noviembre 21, 2009

Cumpleaños del Fino Palacios





Lamentablemente preso, hoy cumple años el comisario Fino Palacios. El comisario más joven del mundo: apenas dos añitos. En la foto, espiando a sus compañeros de jardín, y también su compañerito Aníbal Fernández, arriba, pintado.
Les deseamos felíz cumpleaños, dos añitos no se tienen todos los días, eh.



¿Cómo, no nacieron hace dos años?

canciones malísimas para acompañar los tallarines al morrón


Seguimos analizando profundos acontecimientos del quehacer cultural en procura de minimizar las diferencias entre occidente y oriente para lograr un mundo de paz y amor.
Bella presentación, eh. Estoy haciendo tallarines al morrón, amasando y todo: desde este espacio, solicitamos a Mi Pequeña una posterior ayuda para limpiar esta orgía criminal de harina y cosas sucias. Cuando ella cocina, con cierta magia y una ayuda del Señor (me refiero a Dios, no ha Pino Solanas) no sé cómo hace pero sólo ensucia un par de cositas. Y ensucia con estilo, sofisticadamente, ensucia, digamos, limpiamente. Manchas con formas de manchas. Yo ensucio a lo pavote, toda la casa, todas las ollas y sartenes, todos los cubiertos, todos los vasos y todos los corazones tiernos de este mundo. Me olvidé de regar las plantas. Y mis manchas tienen formas desprolijas, torpes, absurdas. Tremendo. Así que me puse a cantar. De algún lado, algún rincón del cerebro, salen las canciones que uno canta. Y busqué cómo se llamaba. Pescador de hombres. La cantaba en el colegio Don Bosco, cuando era un pendejito. Arrodillado en la iglesia. En los retiros espirituales en Funes, Santa Fe. Con la guitarra. Me acuerdo una noche, hace ahora un par de años. Volvía con mi amigo Monchi de un bar en el mercado de Paraná, un mercado donde antes vendían pescado y ahora tequila. O bien, donde cuando era chico compraba pescado fresco y ya de grande, que almuerzo hamburguesas y gracias, compraba tequila. Y entrábamos a casa, ahí cerca, cantando esta porquería. No sé quién, ni cómo, empezó. Señoooorrr me has (pero con zeta: me haz) mirado a los ojos, sonriendo, has (haz) dicho mi nombre. Y la parte que siempre me gustó más: en la areeiinaaaa he dejado mi barca. A Monchi también le gustaba esa canción.




Y también esta otra: (aguantame un toque a ver si la encuentro):






La imagen se compone un poco bizarra, pero la situación fue peor: dos barbudos treintañeros, que después de discutir sobre literatura y psicoanálisis, van tomando tequila y curtiendo ya a una fauna de enemigos en común, para terminar, abrazados, volviendo a casa y cantando estas canciones absurdas, a las risotadas, con la guitarra, y una cerveza inútil, triste, solitaria y final , sobre la mesa. Un foco de 60 vatios. Dios se debe estar cagando de risa. Me has mirado a los ojos, sonriendo, has dicho: Carrasco!. Y adiós a los tallarines, ya me aburrí. Terma, cinzano, un toque de limón y soda: qué mediodía lleno de posibilidades de dormir la siesta. Tantas amarguras. Se viene la lluvia, un día nublado. Más tarde tendría que sentarme a trabajar. Pero puede esperar. Terma (serrano), Cinzano (rosso) limón (en fruta) y soda (nada de aguas finamente gasificadas). Raymond Chandler, para terminar la novela El largo adiós, le hace decir a Philip Marlowe:
"No le digo adios. Se lo dije cuando tenía algún significado. Se lo dije cuando era triste, solitario y final.” Debí haber dicho eso, a la memoria y a la salud de Andrés, el viejo

Comprometedor video en la Casa Rosada: las contundentes pruebas de la presencia del famoso delincuente en la Casa Rosada



Tremendo, señores, y  nadie hace nada!!!!

viernes, noviembre 20, 2009

Contra la crispación


Jamás pensé que iba a decir una cosa así, pero, bueno. Ya recibí un par de cargadas. Algo parecido dije recién en La Bloguera.
Pero, bueno, tampoco es fácil cuando uno no sabe expresar una idea que siente compleja verbalizarla: pero la misma táctica constantemente pierde eficacia. Deja de sorprender, crear escenarios, descolocar al adversario.
Y ahora, se me hace, la cosa pasa por represtigiarse, Cristina, y elevar el nivel de diálogo. No como lo plantea la derecha, como un monumento a la pavada, no desde los interlocutores desprestigiados de la oposición, sino en un proceso, si se quiere, más sofisticado y con los propios.
Sino, nos quedamos los buenos aguantando los trapos, siendo poquitos, cada vez menos. ¿Si se puede avanzar abriendo el juego?
Ojo, no creo, para nada, que haya que abrir el juego hacia la clase media, crispada y tonta, capital simbólico de la derecha (¿con qué votos gana Bush, Berlusconi y Aznar, sino? Por no mencionar a Macri, que no es feudal ni clientelar: lo cual habla del desacierto de esas categorías, eh) sino hacia los sectores que se pretende representar.
Mejorarle la vida a los sectores populares, mostrarles más previsibilidad, llevar tranquilidad, pisar el freno discursivo.  Por ahora, después se verá.
Que demasiada seguridad jurídica tienen los empresarios cercanos al kirchnerismo, la Bolsa de Comercio, ciertas privatizadas, la gente buena y madrugadora del campo privilegiado, el monopolio siderúrgico, los que deberían competir con Brasil, la Patria bancaria y financiera, demasiados horizontes previsibles, certezas, garantías emana para ellos el estado. Debería pedirse una redistribución progresiva de certezas, futuro, posibilidades, seguridad jurídica.

Otra versión de la caída del muro


Heinz Dieterich es alemán, pero vive en México y sigue de cerca la realidad latinomaericana. Supongo que su obra más conocida es "El Socialismo del Siglo 21".
Dieterich tiene altos contactos con lo que fue el Partido Socialista Unificado de la alemania comunista. En estos días, hubo algarabía transmitida desde Berlín -con las fichas de dominó que caía a los ojos de la crema política occidental- y documentales televisivos a rabiar sobre "el momento" en que cayó el Muro de Berlín en versión para consumo popular.
Acá un extracto de otra interpretación (con la que no sé si coincido, me faltan, en todo caso, elementos):

La versión políticamente correcta de Occidente sobre “la caída del muro” es la siguiente. Guenter Schabowski, periodista de profesión y miembro del Buró Político del Partido Socialista Unificado de la Alemania socialista (SED), anunció en una conferencia de prensa televisada del 9 de noviembre de 1989, una liberalización de los viajes de ciudadanos de la RDA a Occidente. Al terminar la conferencia, un periodista le preguntó: ¿Cuando entra en vigor esa ley?” Schabowski dijo, “de inmediato”. Y, de inmediato, muchos ciudadanos de la RDA fueron al muro para pasar a Berlin Occidental, a la Alemania capitalista (RFA). Las tropas fronterizas, que no estaban informadas, no las dejaron pasar. Cuando sus sorprendidos oficiales consultaron con autoridades superiores, les dijeron que sí, que era un nuevo decreto del Politburó dado a conocer por Schabowski hacía unos cuantos minutos en la televisión. Entonces los dejaron cruzar. Todo espontáneo y democrático: un pueblo buscando la reunificación.
La verdad histórica, que empieza a abrirse paso, es diferente. El entonces alcalde de Berlin-Occidental (RFA), Walter Momper, acaba de revelar que se reunió unos diez días antes de la apertura del muro clandestinamente con Schabowski. En esas reuniones, el funcionario de la SED le informó de que se iba a abrir la frontera y de que las autoridades de la RFA debían prepararse para un éxodo. De la misma manera, la pregunta del periodista acerca de la entrada en vigor de la ley liberalizadora, no fue más que una finta para ocultar la conspiración de la entrega de la RDA, organizada por sectores de la elite política de la SED. El periodista que hizo la pregunta era el italo-alemán Riccardo Ehrman quien trabajaba para la agencia noticiosa italiana ANSA. Ehrman había recibido una llamada de Gunter Poetschke, director de la ADN, agencia de noticias de la RDA, en la cual Poetschke le solicitó que hiciera la pregunta sobre las nuevas leyes de tránsito. Ehrman llegó tarde a la conferencia, pero logró hacer la pregunta -con Schabowski pasando por alto a un periodista estadounidense- y obteniendo la consabida respuesta. A pocos minutos de haberse terminado la conferencia, a las 19:31, ANSA distribuyó por el mundo la noticia intitulada: “Ha caído el Muro de Berlín.”