La verdad, che, no paro de sorprenderme. Todavía no he leído ni la mitad de los mensajes, tengo que agradecer a un montón de gente, trato de no nombrar a nadie para que nadie me quede afuera. No sé, todavía no tengo los dedos entrenados. Ya voy a ir respondiendo. Tengo que poner los enlaces, tengo que darle una apariencia menos parecida a un velorio (ese negro parece pintado con aerosol, je) tengo que ajustar cuentas, y tengo que tomar mate. Muchas cosas. Incluso, estoy levantado desde las siete de la mañana, un despropósito. Hoy noté, cuando venía a Paraná, que hay mucha gente incomprensiblemente levantada temprano, con caras felices, a puro optimismo y sin ojeras. Todos los días se aprende algo nuevo.
Venía, de paso, conversando con un economista amigo que me explicaba que el blanqueo de capitales es un negoción para los que tienen guita guardada en, ejem, silobolsas. Pagan el 6% si la plata es del circuito comercial, y pagan un 1% a interés negativo y a cietos de cuotas, si la plata viene del campo. Qué lindo. ¿No es bueno defender, desde la izquierda nacional, el blanqueo de capitales, el blanqueo de la oligarquía (en manos de menos de dos mil personas hay cerca de veinte mil millones de pesos guardados en silo bolsa) junto a la izquierda boba, la derecha reaccionaria y la antipolítica eclesial? Me siento formando parte de la unidad nacional.
Ahora bien, mi espíritu propositivo -palabra que siempre me encantó como muletilla de Franja Morada- y para nada confrontativo, por el contrario, dialogador y consuensualista mirá vos, se pregunta en las tiniblas: ¿no es injusto pagar ese 1% que va a las manos de la burocracia estatal? ¿Y si el carcerolazo del 25 de marzo lo hacemos para pedir que el porcentaje sea, directamente, cero?
Todavía tengo que poner el cartel proclamando el 25 de marzo como Día Nacional del Cacerolazo. Y obvio, nene, el del TEMA de la lechería. Que se viene. A puro biolcatismo.
Y encima tengo que ganarme el pan, recuperar la tarjeta de débito que perdí, y escribir algo decente. Y se viene en Uruguay, también. Donde los productores agropecuarios, olvidan viejas disputas con los sojeros transgénicos de espíritu ambientalista de la vecina orilla, y ahora, más que unidad nacional esto es un hito en la unidad latinoamericana. Nos dividirán los gobiernos, tá, porque en Uruguay gobierna la centroizquierda responsable y acá el populismo facistizante, pero los pueblos, mi cielo, siempre unidos. La verdad, hoy es un día de gloria. Hay que tener cuidado, nomás, con los chilenos. ¿Sabés porqué te digo? Mirá el mapa de Sudamérica. Vos sabés que los chilenos siemrpe quisieron invadir a la Argentina, no? Tá, sí, se están armanado. Bueno, ahora, podrían quedarse con un pedazo de la argentina: es que argentina, ubicate en el mapa, se está corriendo tan a la derecha, pero tan a la derecha, que va a quedar pegadita a sudáfrica y los chilenos se quedarán en el espacio que les dejemos. Posta. No hay que girar tanto a la derecha. No nos lleva a Europa y al Primer Mundo, nos lleva a Africa.
Pero qué lindo día de unidad nacional, Monseñor, qué lindo día.
(Posta, ya escribiré algo decente)
lindísimo post, tiene toda tu creatividad, te juro no va a pasar un día sin que pase por tu blog. No pasó nada Lucas, sacale el negro que es demasiado tenebroso, pero por favor, mantené el contraste entre el color de la letra y el del fondo, que tu tía Eva Row necesita eso para ver mejor. Enorme cariño Lucas. Enorme.
ResponderBorrarNo puedo creerlo, publiqué el comentario y apareció cumplido mi deseo: fondo blanco y letra negra. Un premio extra Lucas.
ResponderBorrarBienvolvido Lucas y que esta "Segunda Época" sea tan buena (o mejor) que la primera.
ResponderBorrarPasate por Gualeguaychú y no dejes de cronicar los últimos operativos guerrilleros desde el país hermano de Entre Ríos!
ResponderBorrarUn abrazo grande, Luquitas, qué bueno leerte otra vez. Te diste cuenta de que te extrañamos mucho, como cuando Manuelita vivía en Pehuajó pero un día se marchó?.
Magui
ResponderBorrarQue suerte que volviste por el pedido unanime de la plebe,soy seguidora de tu blog y el fin de semana caimos en el negro de tu página,pero hoy volvió la luz y clarito,,ha eso si, esta letra nos clarifica .Bien vuelto al ruedo
Lucas, mi alter ego "El Paparazzi que llega Pronto", me dejó unas líneas de bienvenida, que agradecería que Usted leyera.
ResponderBorrar"Carrasco, no sabe las cosas que pasaron ayer, el día que su blog estuvo cerrado.
Parece que Eva Row, de los nervios que tenía, confundió las recetas de los oftalmólogos y terminó dándole unos lentes equivocados a un sobrino de Mr. Magoo. El pobre no veía nada, y se tragó un semáforo en la esquina de la óptica.
Y ni hablar de Mendieta. Los vecinos se quejaron de que estuvo aullando todo el día.
También dicen fuentes bien informadas de La Plata que el Ingeniero, totalmente desolado, decidió suicidarse firmando la ficha en el partido de Carrió, y con la boleta cortarse alguna vena. Por suerte lo pararon a tiempo.
Un vecino que es cuñado de la esposa de un kioskero de Parque Chacabuco le contó a Derek que el kioskero le escuchó decir a Artemio que si Usted no volvía a la actividad bloguera ponía en venta el Torino y cambiaría su colección de Credence mano a mano por un simple de los Monkeys.
Y Derek, Mauri estaba insoportable. Pero dicen los que lo frecuentan que ese estado es el más común del Marciano, vaya a saber uno, no?"
Bienvenido de corazón.
Bien por el regreso. Ahora mi sugerencia es que paremos con los elogios fugazzeta. Suenan como oyentes de Mitre extaciados con la llegada de Chiche.... yastá!
ResponderBorrarLas cosas han vuelto a su lugar!!!
ResponderBorrarSe agradece.
Otro abrazo,
Rob.
Bueno, yo leo mucho, comento poco porque si comento tengo que decir: "jajaja es cierto, pienso igual" y seria bastante pesado tener un comentario asi en todos los post.
ResponderBorrarNo soy participe de la nueva religion blogsfera pero igualmente me alegra que vuelva a tratarse el tema de la lecheria y recordar siempre que Joaquin Morales Sola vive.
Saludos,
Vamos Lucas! Por suerte no llegué a sentir la pérdida de Carrasco, tuve abstinencia de blogs durante casi una semana, cuando volví al ruedo ya estaba todo pipí cucú.
ResponderBorrarNo vuelva a irse.
Vuelvo al silencio.
Bienvenido a casa. Un abrazo,
ResponderBorrarBuen retorno, Lucas! Espero que toda esta demostración de afecto haya sido lo que necesitabas para rearmar fuerzas y que estés por mucho tiempo más en la trinchera de tu blog. Un abrazo
ResponderBorrarLucas Carrasco, Segunda Temporada.
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