martes, junio 16, 2009

Panorama electoral (pomposamente a las apuradas)


Santa Fe, las hordas violentas del kichnerismo desilustrado nos informan que la cosa viene bien. Uopa, calma, no lo digas fuerte, pèeero....


Me parece que gana Binner, al costo de levantar demasiado al derechista Giustiniani; pierde Reutemaaaaaan y se va una esperanza blanca, snif, para el peronismo de la Mesa de Enlace, el gran encuentro de los argentinos, la Hora Rural.


Y sí hay tantos cortes de boleta como anuncian las encuestas (este fenómeno suele, luego, bajar: las colas, la espera, hacen que uno la haga corta y no corte boleta, es así; pero hay que ver. En cierto sentido, estas elecciones, sin lemas, son inéditas para Santa Fe. Y además, los indicios que detectan las encuestas de corte de boleta se dan en ciudades que sí tienen esta tradición, como Rosario. Pero bue, hay que ver) entrarían en la Cámara de Diputados además del Chivo Rossi, mi amigo Betannin.


En Entre Ríos, la cosa viene calma, el ex aporedado del Frente para la Victoria en el 2003, Raúl Barrandeguy, encabeza las encuestas. Cómodo.


Detrás el Acuerdo Cívico, que no estaría, siquiera, ganando en los lugares donde predomina el voto rural. Las tierras más ricas, la mayor concentración y demás. Divertido, no?


Y Busti que hace campaña, con su esposa -va segunda en la lista- y mencionando a Reutemaaaaan y, ya no tanto, a Schiaretti. Y, el hecho de la que el Frente Entrerriano -estructurado en torno al PJ- tenga de contrapunto a los pequeñso y medianos millonarios en alianza con los pequeños y medianos evasores, en el Acuerdo Cívico y Rural, modifica un poco las cosmovisiones de los que, en su momento, se subieron al palco de la Mesa de Enlace. Dios guarde un manto de olvido oportuno.


Córdoba, todo indica; está jodido. Como Capital Federal. Dónde Basteiro hace pie ante las quejas de los porteños por la contaminación que les producen las mineras, y ni hablar de lo caliente que está San Telmo porque se derriten los glaciares. El voto Bolatil (seeee, Bolatil no va con B larga, pero yo mezclo dos palabras en una: poder de síntesis), que antes acaparó Zamora, antes Patricia Bulrrich, en esta elección le toca a Pino Solanas y Basteiro. Córdoba, jodida la mano. Juez primero. Lejos.


¿Segundo, quedará la UCR? Posiblemente. Ese es el lugar que disputa Schiaretti. Y acaso el kirchnerismo. Que puede quedar cuarto.Mendoza, Cobos, dicen las encuestas; no gana por goleada.


Los gansos (el partido demócrata, antes con Carrió, ahora con Macri) definen la elección con sus 15 puntos. En las últimas, los demócratas no sostuvieron su habitual solidez: al contrario, en la última semana sus votos se diluyeron en una polarización PJ (que le ganó al Cobos kirchnerista en el 2007) y UCR.


Los demócratas en Mendoza juegan el mismo rol que el Acuerdo Cívico en Buenos Aires: si sus votos se van para uno u otro lado (no todos sus votos, pero sí 5 puntos) desequilibran. Eso explica la reunión del Colombiano con Cobos. Lo explica las elecciones de Mendoza y las bonaerenses.


En Jujuy, gana el oficialismo, Gerardo Morales la ve pasar.


Chaco, es un distrito difícil: los radicales gobernaron mucho tiempo, los escándalos de la esposa de Capitanich no ayudan y la solidez de su gobierno contrasta con la fragilidad de su alianza electoral (estructurada en torno al PJ que ahora sí controla del todo).


Río Negro, Santiago del Estero, ganan los radicales K.


Corrientes, pierde el kirchnerismo pero hace una buena elección (a pesar de que la Familia Colombi, de lo peor de la política- que supieron ser kirchneristas- ahoran están liquidando la Sociedad de Responsabilidad Limitada entre el cobismo y el radicalismo).


Tierra del Fuego, los peronistas perdieron empuje; y los radicales K también. La muy desgastada gestión de Ríos no tiene quién la capitalice (lo cual es un dato que genera esperanzas: la gestión de Ríos es una de las cosas más ricas y dinámicas que ocurrió en el país en los últimos tiempos, además de la asunción de Binner).


Misiones, punta d elanza dle final del kirchnerismo (ay, los analistas editoriales...) en el 2005, pues los aliados kirchneristas se alzan, quizás, con más del 55% de los votos.


Salta es compleja: los candidatos de Romero (puesto al frente del Pj, en un garrafal error, por Kirchner y el monje negro: el Chueco Mazzón, uno de los hombres de confianza de Kirchner -el ahora locatario- que más daño le hizo al kirchnerismo) ranquean bien. Juegan la propia. Urturbey es un aliado del kirchnerismo de los más sólidos, pero la tiene jodida. Si gana, la lectura en Salta será que se consolida como nuevo y fuerte referente provincial: el que desbancó a los Romero, vieja familia que poco tiene para envidiarle a la narco política colombiana o mexicana.


Tucumán, el otro gran distrito; es casi un paseo para el oficialismo. Puede perder algunos puntos por el desgaste natural de la gestión, pero supera, fácil, el 60% de los votos. Creo.


Neuquén, es interesante. El kirchnerismo no MPN (en ese partido, que fue un desprendimiento del peronismo durante la proscripción, ganó la interna la vieja familia Sapag, de muy distinto sesgo ideológico que Sosbich y, además, con notables actuaciones en el Senado Nacional) ronda el 10% ( el secretario general de la presidencia es demasiado conocido en su provincia como para liderar nada); el cobismo está para la mierda (supo ser la estrella) y el MPN, aliado al gobierno nacional, arrasa.


Catamarca es un quilombo. El PJ está intervenido. Gana cómodo Brizuela del Moral. Ya de nuevo en licitación, porque ve que el cobismo no va para ningún lado. Avísenle a Macri.


En general, en el resto de las provincias, se gana.



En totales, el kirchnerismo al parecer araña el 35 % (sacó 38% en las legislativas del 2005; y 46% en las presidenciables) aunque pierda algunos, no tantos, legisladores. Se quedaría posiblemente sin quórum propio; cosa que sucedió desde el 2003 hasta el 2005; y además nunca tuvo una mayoría automática como pretende el pensamiento simple.


Sin embargo, en las cámaras,. seguirá siendo la primer minoría. Como en los votos nacionales por fuerza política. Seguidos, por más de 10%; por el Acuerdo Cívico.


Medir las cosas como oposición y oficialismo es una boludez.


Con ese criterio, habría que decir que el 100% de los tucumanos se niega a votar a Proyecto Sur, el partido municipal de Buenos Aires, y no es así; porque en Tucumán no se presenta.


O que el 98,2% de los santafesinos no quiere votar a Proyecto Sur, no tiene sustento ese análisis.


El panorama queda, me parece, así: el kirchnerismo como primera minoría relativamente cómoda; detrás el Acuerdo Cívico, luego la derecha del PRO y el peronismo que lo apoya, luego el peronismo disidente de Romero, Puerta, Reutemaaaan, Schiaretti, Busti, Saá, Adrián Menem (que algo, en La Rioja, sacará).


Si el kirchnerismo cierra su frente interno (alrededor del 35%) puede negociar con relativa fortaleza distrito por distrito con el peronismo disidente que no es PRO.


En ese caso, por ejemplo, es más probable una negociación con Busti, Romero y Reutemaaan que con Puerta o Saá, ni hablar con Menem (Schiaretti está en el medio de ambos polos; tiene de aliado al PRO pero comanda, vía De La Sota, el PJ cordobés). Porque sería una negociación desde el PJ.


Y, si de cara al 2011, logra acuerdos simbólicos potentes (por dar un ejemplo: el MPN neuquino suma poco al total nacional, pero vale. Igualmente, el mejor ejemplo sería el ARI fueguino de Ríos, Sabatella en Morón, una recomposición con los movimientos sociales alejados, la personería a la CTA) seguiría en carrera. A Macri, que guarda el atributo de la gobernabilidad -lo que lo posiciona mejor que un candidato del Acuerdo Cívico hegemonizado por Carrió- le queda sumar el panradicalismo. Ya tiene, apra el paladar fino de sus bases sociales, demasiado peronismo. No lo veo creciendo más ahí. Tiene que, ahora, crecer para otro lado.


Pero, resta ver el contexto regional (complicado, sobretodo en Brasil, Uruguay y Chile, que aunque sean, en el caso de estos dos últimos, muletillas de la derecha, tienen rasgos en común- más profundos que las diferencias- con la experiencia argentina y, para que se entienda lo que quiero decir, también con la experiencia venezolana: entre otras cosas, que el recambio de estos gobiernos no será por izquierda, con los diversos Pino Solanas que pululan por sudamérica; sino por derecha) y sobretodo, resta votar.


Ufff, me fui a la mierda escribiendo!


Bue, qué se yo; con tal de no ponerme a trabajar. Eso sí, lector, sea buenito: vote como indican mis pronósticos, así no me equivoco, che. No seas malo.









9 comentarios:

  1. excelente analisis, carrasco! a ver si esto suma?: ayer convenci a dos grandes amigos, gorilas ellos, el desde la ucr y ella de la centroizquierda, a votar por nestor!!!!! no lo podia creer, asi que ahi le mando dos votos mas para su prediccion!!!!! saludos!!

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  2. Che, Carrasco, porque no te pones a laburar así les haces un favor a los indigentes y sin trabajo que te estan bancando el contrato?

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  3. Bueno,esta visión sumamente positiva la tengo yo tammbieás, hasta que me paso por el blog de Artemio y veo demasiado mala onda. Me parece que voy a dejer ese vicio nefasto.

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  4. "la tengo yo también", se dice. Lo cual no implica que pueda decirlo y desgranarlo como vos lo hiciste.

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  5. Exelente Lucas! hasta los fachos te leen, un saludo para raf que debe ser viuda de algún helicoptero noventista...

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  6. excelente y guarda, guarda que se viene, se viene.
    Estoy cada vez mas profundo.

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  7. Para mi nos rompen el orto, el unico camino que queda es Ezeiza, o volver a los piquetes de negros, huelgas generales, etc etc etc

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