Ultimas imágenes del naufragio

Se informa a los deudos que se agradecerá no enviar flores al velorio de la candidatura de Reutemaaaan, que en todo caso, envíen alimentos que serán donados a los chanchos chinos, que tanto hacen por nuestro país y por el federalismo.

La mansa vaca que se deja ordeñar está tristona che. Reutemaaan, perdón, la candidatura del ex propagandista del gobierno de Videla, se acaba de suicidar, en suma, no somos nada, de un polvo venimos y en polvo, procesado en otro país, iremos hacia la lejana mar. El mundo se derrumba, nosotros nos enamoramos mi pequeña, y mueren los mejores sueños de la patria blanca, esa que está al pedo pero madruga, obvio, papi, a sol y sombra con el sudor laborioso de los que hicieron grande esta patria, cariño. Qué tristeza hay en la ciudad amor, sábado de mierda. No somos nada. Suerte que a pesar de la caída de los grandes relatos, de la candidatura de Reutemannn y de la crisis de la modernidad, nos queda la humildad de Claudio Lozano. Pero, igual. Todo mal, todo mal, la fiebre de un sábado azul y un domingo sin paperas; todo mal.

Tendremos que encomendarnos al señor (Claudio Lozano) y que sea lo que dios (y Lozano) quiera.

Pero así no se puede, no se puede, che. En un país normal, el balbuceante que "vi algo que no me gustó" no se baja dos veces de una improbable candidatura. Por favor, habría que mandarlo a hacer un curso de formación intensiva de candidaturas con Jorge Altamira, el hombre que jamás se bajó (ni subió). Es una pena. Nuestras condolencias. Los argentinos (y la mansa vaca que se deja ordeñar) hemos perdido otra oportunidad histórica, y tendremos que esperar cincuenta años para que se den las condiciones favorables para ponernos de acuerdo en tres o cuatro puntos y mirar al futuro y no tanto al pasado, snif. Ulschmidt, todo mal; teníamos dos precandidatos a presidente en Santa Fe y ahora no tenemos nada. Andá vos, que sabés hablarles con dulzura, a consolar a las mansas vacas que se dejan ordeñar. Dios (y Claudio Lozano) mío! No somos nada. Pero el peso de las generaciones fallidas de candidaturas oprime como una pesadilla el cerebro de los vivazos como Biolcatti, que será un gorila cuadrado y algo estúpido pero qué talento literario qué talento por dios (y Claudio Lozano) lo de la mansa vaca que se deja ordeñar por favor una joyita una joyita...no somos nada. Y todos moriremos.