domingo, octubre 25, 2009

Canción urgente para milagros sala


Recién estaba leyendo la entrevista a Carlos Chile del MTL sobre la Túpac Amaru. Caliente, de verdad, le cuento por el msn a mi amigo José que Chile tiene razón sobre lo que pasa en Jujuy, y en cierto modo, predecible a partir de lo que sucede en Bolivia. También lo que Luis D elía plantea acá.
José me envía un post mío, que guardó (ese blog lo cerré) y hablaba de Bolivia, un día en que mataron a varios indígenas en una emboscada de paramilitares, intentando un golpe de estado. Yo estaba de viaje y leía los diarios argentinos, en papel, y no podía creer lo que leía: la derecha, cuando es lejana, existe. Y busqué un ciber y me senté a escribir, para despachar la bronca. Releído ahora, quizás me fui un poco al carajo, pero es que fue (es) tan brutal lo de la derecha boliviana. En fin.
Acá va: Canción Urgente para Bolivia, se llamaba.


Bolivia tiene un gobierno popular, con una reivindicación étnica, con una búsqueda de la igualdad, el desarrollo, la superación de la pobreza y el atraso. Bolivia recibe el respaldo regional, pelea por salir de un modelo extractivo. Enfrente tiene a una derecha impresentable, racista, xenófoba, oligarca, apoyada explícitamente por el gobierno de los Estados Unidos.
Es realmente bello leer esto: ¿bello? Sí, señores, es que esto siempre sucedió, siempre existió, se ve desde abajo, aunque desde arriba no se note. Lo que cambió es que hay en el gobierno un indígena que no molesta por esa condición-fíjense sino el caso del obrero Lula- sino porque es de izquierda, sí, es de izquierda y es de izquierda de verdad: te lleva el conflicto de abajo a la más alta magistratura, te sienta a la muchacha que limpia en casa a la mesa de la familia, es como tener un conserje que quiera dormir en la suite, es como tener un peón que también quiera tener Direc TV . En buena hora que moleste a los tranquilos, que inquiete a los asegurados. Que los ponga nerviosos. Es muy lindo, es realmente bello, leer las plumas argentinas que se desgarraron el velo tildándonos de anacrónicos a los que decíamos que la oligarquía existe, que el golpismo existe, que la derecha es racista, xenófoba, cruel y profundamente egoísta, es lindo leerles la traducción de Bolivia. Los oligarcas bolivianos no hablan en quechua, hablan un castellano bien blanquito y de acento gringo (algo conocido en estas pampas húmedas) pero si dicen: queremos más coparticipación, acá lo traducen: los secesionistas. Cuando dicen: queremos terminar el conflicto, acá lo traducen clarito: son los golpistas. Dicen: queremos toda la renta de la tierra, y acá lo traducen: es la oligarquía. Qué bello leerlos, sin que digan con sus plumas facilongas que la realidad es más compleja cuando hablamos de plata pero tan simple cuando hablamos de la justicia norteamericana, que ya no existe la oligarquía, que es insultante nombrar a la derecha como derecha, que vemos fantasmas cuando hablamos de golpes blandos, climas destituyentes, falsos lenguajes de una derecha cerril que habla como progresista y agrega eses conchetas al final de una palabra singular. Ahí los tienen, esos brutos, blanquitos, nazis, asquerosos y violentos, son el espejo de ustedes, de sus cacerolas, de sus asambleas propietarias, de sus defensas de la propiedad, de su escándalo por la falta de conferencias de prensa, de sus diatribas contra el clientelismo, contra los intendentes de malos modales, contra toda esta grasada que somos nosotros. Mírense de lejos, eso son ustedes. Son esa mugre que golpea la democracia, son esa mierda que se las da de progre. Son la vieja lacra que arranca con la colonización, son los que buscan diálogo a los garrotazos, son los que defienden mientras toman las instituciones, son los que tienen la llave del estado de derecho y deciden quién entra y quién queda afuera, son los que apagan y prenden la luz de la democracia, son los que hablan desde la televisión en nombre de la gente, en nombre de nosotros, ustedes, con sus cruces, virgencitas, Lozanos y Grondonas, son los que conocen muchas ciudades del mundo pero no se dan cuenta que son una vergüenza universal, una maldición privilegiada. Están, como ustedes, dispuestos a matar en nombre de la paz, a imponer en nombre del diálogo, a excluir en nombre de los buenos modales, a despreciar en nombre de la unidad, a desabastecer en nombre de los pequeños propietarios, a chicanear con la soberbia propietaria. Mírense, allá, donde hasta ustedes reconocen que existe la oligarquía, los cipayos, la derecha, los reaccionarios, los golpistas. Mírenlos bien, porque tienen que saber, para que en la próxima les quede claro: así los vemos nosotros a ustedes. Que así los leemos, los entendemos y los vamos a entender siempre. Mírenlos fijamente, para que después no se sorprendan: eso son ustedes.

4 comentarios:

  1. ese fué uno de los post que más me gustó de todos los que hiciste, y eso que hiciste muchos grosos!, me acuerdo que habías generado una oleada de comments emocionadísima, recuerdo un mina de españa que se deshacía en lágrimas y te llamaba el hijo que no tuve o algo así...ya te lo había pasado, Salu2!, un garrón que no se pueda rescatar todo ese archivo!?!

    http://lucascarrasco.blogspot.com/2009/05/recuperando-post.html

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  2. Lo recuerdo perfectamente. Fue brillante. Pone brutalmente el dedo en la llaga. No te voy a garpar derechos pero se lo mandé a un par de personas que ya tenía bastante atragantados y se pusieron como locos. ¿Como yo? Yo que leo a García Márquez, me gustan las pelis de Woody Allen y escucho a Coltrane.

    Anécdota de la época. Almuerzo de trabajo, su servidor y un colega.

    SS: "Que barbaridad lo de Bolivia, como pueden ser tan hijos de puta"
    C (midiendo la cancha): "Si... vos porque lo decís?"
    SS: "¿Cómo por qué? No leiste lo de la matanza de campesinos?"
    C: (ahora sin dudas) "Ah, si, si, terrible" (silencio) "Igual yo no estoy con Chávez"
    SS: "¿Chávez?... Morales"
    C: "No, no, Chávez, es terrible que pasen estas cosas, pero igual yo no estoy con Chávez"

    Ante lo cual decidí cambiar de tema. Una persona que no es que descrea de la fuente, o que piense que todo es una vil patraña del chavismo. No objeta la noticia, le parece terrible, pero igual se preocupa en despegarse de sus demonios. Terrible.

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  3. jajajaja, qué se yo, uno no sabe si reírse, y sí, hay que reírse.

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