Jaime Campos

Patricia Bullrich definió el Grupo A y el Grupo B, se olvidó del Grupo C: el Grupo de las Corporaciones.Resulta que Luis Pagani, dueño de Arcor, dejó la presidencia del partido político de la derecha real: la Asociaciación Empresaria Argentina. Al igual que la UIA (¿alguien conoce cuál es la empresa de su presidente, Héctor Méndez?) en la AEA se designó un nuevo presidente, que no es un empresario.
Las notas sobre las críticas del Grupo Clarín a la ingerencia del estado en el turbio y oscuro negociado de Papel Prensa, omiten en Nación y en Clarín señalar este dato central: qué empresa tiene Campos.
Techint tiene para manotear subsidios a la UIA, y Clarín a la AEA. Por eso, Pagani (hasta apellidod e garca tiene) reorganizó la COPAL, la cámara de empresarios alimenticios en pie de guerra para captar la renta que se intenta redistribuir a través de la asignación universal. Al frente d ela COPAL no hay ningún empresarios, tampoco, sino un abogado patronalista: Daniel Funes de Rioja (gracias a la revista Debate por levantar este post, eh)
Hasta entonces director ejecutivo de la AEA, Jaime Campos fue designado presidente.
Me parece bastante probable que lo se esté especulando sera una ofensiva política contra el gobierno, por lo cual, ponen un tipo más experimentado y menos necesitado de subsidios al frente
Las ofensivas políticas de este partido político con poder real, que integran Grobocopapel, Bagó, Pescarmona y Aceitera General Deheza no son con notitas sin firma en Clarín y La Nación (que integran AEA) sino a través de escaladas inflacionarias y tumbando gobiernos. Tienen la sutileza de Biolcatti, el cinismo de Claudio Lozano y el poder de un monarca. Son de temer. Conducen al empresariado y sus diversas facciones, tras la palidez que los millonarios sojeros mostraron últimamente, y fundamentalmente, porque controlan los grandes resortes de la maquinaria agrofinanciera.
Y controlan la maquinita de generar mal humor: esa que miran y donde intervienen obsesivamente las gentes bien del Grupo A.