martes, julio 27, 2010

Campaña electoral 2011

Por Raúl Degrossi


Luego de hacer votar a sus legisladores en contra de la creación de una comisión investigadora, Macri pide su propio juicio político (y se afeita el bigote logrando un milagro: tener más cara de garca).

La iniciativa apunta a fracasar, entre otras cosas porque los dos legisladores que responden a De Narváez anunciaron que votarán en contra.

Ricardo Alfonsín va a un acto en Chascomús con la presidenta y Randazzo, la Carrió lo cruza durísimo tildándolo poco menos que de cómplice de la corrupción.

Margarita Stolbizer la cruza a Carrió diciendo que perjudica al Acuerdo Cívico, porque cada vez que abre la boca divide y resta (yo creía que se clavaba un lechón, se ve que no).

Carrió dice que habla ahora para que no vuelva a pasar lo de la Alianza, mientras lamenta los dichos de Margarita echándole en cara que aceptó el 13 % de descuento a los jubilados de De La Rúa, rodeada por Patricia Bullrich que firmó el decreto disponiendo ese descuento siendo ministra de Trabajo, eso sí: todo eso mientras el Grupo A en el Congreso propone el 82 % móvil.

Buzzi dice que la Federación Agraria no va a ir a la muestra de la Rural en Palermo porque Biolcatti está organizando un acto para criticarlos por negarse a pedir la eliminación total de las retenciones a la soja, y Amigazo dice que ahora ellos quieren que sean segmentadas en favor de los pequeños y medianos productores, como decía la 125 que tumbaron con el voto de Cleto.

El mismo día se vuelven a poner de acuerdo y dicen que la Mesa de Enlace no se rompe, aunque tengan diferencias, mientras en el Congreso los "agrodiputados" de la Federación (que, cual pool de siembra, le alquiló el partido a la UCR en varias provincias) se niegan a firmar los proyectos de eliminación de las retenciones.

Los socialistas piden que además de segmentarse las retenciones por tamaño de la producción, se reintegren los fletes a los que están a más de 300 kilómetros de los puertos, y Proyecto Sur (por intermedio de Pino y Lozano), que además de eso las retenciones sean móviles, ajustables por el precio del producto (como la 125, ¿vieron?).

Los radicales quieren interpelar en el Congreso a Marcó del Pont para que explique que hizo con las reservas, debe ser para que les diga como las hizo pasar a los 51.000 millones de dólares en unos pocos meses.

La Nación convoca a politólogos para tratar de entender por que sigue cayendo Cobos en las encuestas, cuando el fenómeno misterioso a develar es por que subió alguna vez.

Rodríguez Saá -en la misma semana- inunda Buenos Aires de afiches lanzando su candidatura presidencial, y le pide la renuncia a todo el gabinete de San Luis por ineficiencia en la gestión y falta de compromiso político (¿armará el gabinete nacional con extraterrestres de Xillium y Negre de Alonso como Jefa de Gabinete?).

Das Neves se lanza en Buenos Aires con un acto con la presencia de Miguel Torres del Sel, que se cansó de esperar que Reutemann se decida, lo que no puede hacer por el momento porque está veraneando en Miami, para reponerse del stress que le causó levantarse de la sesión del Senado, antes de que se vote el matrimonio igualitario.

Duhalde dice que está armando un "compromiso ético" con los radicales (en realidad con Terragno, que todavía no le avisaron que Alfonsín se murió, o le dijeron y no se acuerda), y preparando una propuesta de seguridad a cargo ¡del rabino Bergman!, otra represiva (¿a cargo de Franchiotti?) y opina en contra de Chávez y a favor de Uribe (lo cual es lógico: no se va a pelear con el principal mercado proveedor).

Graciela Ocaña se vuelve a reunir con Adrián Pérez, no para festejar los años de egresados del Instituto Hannah Arendt, ni para discutir sobre el PAMI o Salud (porque en esas áreas fue funcionaria k), sino sobre los negociados de Macri con la recolección de la basura (¿habrá descubierto Ocaña dónde se encondían los mosquitos del dengue?), y Carrió se alegra porque dice que ella nunca le perdió el afecto, lo único que hizo fue putearla seis años por dejarse cooptar por el kirchnerismo.

Y a pesar de todo esto, La Nación, Clarín e Infobae insisten en que hay negociaciones bajo cuerda entre todos los referentes del Acuerdo Cívico y Social y el peronismo federal (incluyendo al PRO?) para acordar un programa común y un pacto de gobernabilidad para cuando se termine el kirchnerismo, que parece que tiene fecha de vencimiento.

¡El gobierno largó con todo la campaña Néstor 2011, eh!



5 comentarios:

  1. Buenísimo resumen político de la semana. Ahora, algo me suena raro...Por qué colocás en la misma bolsa a estos últimos tres medios, cuando-se sabe- uno de ellos preferiría no que el kirchnerismo no tenga fecha de vencimiento nunca?

    Saludos

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  2. Muy bueno, Carrasco!
    Pensaba q quizás los agrogarcas podrían pedir la 126 digo como para q no sea la 125, algo superador.

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  3. Posta posta acá en Venado se habla del consejal del Pro como candidato de los federales

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  4. y de remate el Hermes poniéndole el moñito al perfil psicológico de la Carrió: "es complicada". Si llegan a algún acuerdo la alianza debería llamarse fantasmagoría o algo por el estilo

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  5. Es todo un gran delirio. Como nadie tiene un puto programa político, parece que opinaran de acuerdo a como se levantan. Son de terror!

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