viernes, diciembre 31, 2010

República Unida de la Soja



Hola, amiguitos, vieron que, cuando termina el año, todos hacen balances y se alejan de las balanzas, buenísimo el chiste, no? ¿no, no qué, no lo entendiste o no te pareció bueno? Balances, balanzas. Porque en fin de año, viste, bueno, claro, eso, epa! más boludo serás vos, gil.
Decía. Cumpliendo este blog cuatro años el balance es bueno. Ok, ya sé, como dijo Úrsula Vargués: "Hay que dejar la vanidad a los que no tienen otra cosa que exhibir" y probablemente sea el caso.
Cuatro años atrás yo abría el mail y tenía un largo y sofisticado reclamo de esa ex, que tenía la manía de mandarme mails (cariñosos, tiernos, pero abusivos y celosos, tremendamente, violentamente celosos) nunca supe porqué me mandaba tantos mails, pero también, en esa oficina sin ventanas de Paraná, escribía cosas muy aburridas. Así que bue, empecé a escribir acá. Tenía la friolera de 40 visitantes, o 41, con Mendieta. 42 con Artemio. Estaba por elegirse, por primera vez de manera desdoblada, gobernador, ganó finalmente el Pato Urribarri, mi amigo. Que sería mucho pero mucho más amigo si me sacase las publicidades que están trabadas por cuestiones impositivas, pero bue.  Como dijo Úrsula Vargués: "Cualquiera puede simpatizar con las penas de un amigo; simpatizar con sus éxitos requiere una naturaleza delicadísima".
Era divertido escribir desde otro lugar, sin editor, sin filtros, sin intereses materiales y simbólicos más que las limitaciones propias de la vida cotidiana (y a veces ni eso). Al poco tiempo, cortan el túnel, con mi señora vivíamos en Santa Fe, yo trabajaba en Paraná, la puta madre.
Formarse (es un decir) como periodista en una provincia de la pampa húmeda requiere conocer el poder agropecuario, y también sentir el impacto de la valorización financiera del negocio del campo. Mi inclinación (seguramente falsa o, de mínima, sospechosa) a la izquierda te da cierta sensibilidad para con la super explotación que es moneda corriente en "el campo".  El homogéneo cierre de los medios de comunicación dominantes con las patronales agrícolas financieras trajo a estas pampas virtuales muchos lectores. Muchos lectores necesitados, también de una orientación política, de un relato, una clave de interpretación. Por supuesto, se sintieron defraudados porque acá no encontraron eso, pero siguieron leyendo, seguramente por esta simpatía que porto, por la inteligencia y la lucidez, por mi sensibilidad exquisita, por esta humildad, porque descubrieron a un ser, verdaderamente superior, que vengo a ser yo. Gracias. Me hacen poner colorado. Pero ya sabemos -lo dijo Úrsula Vargués- que "La mentira forma parte del arte de la diplomacia" y a mí se me hace que la caída del relato totalizante, la fragmentación de la verdad y la cultura digital (que sobreinterpreta una falsa conciencia de horizontalidad pero a la vez trastoca la linealidad; mierda, señora, con este chico tan culto sale su hija) tienen mucho que ver con esta novedad -tan vieja como las ganas de comunicarse- de los blogs; y en esa dirección es que los lectores sienten que "conocen" a quien escribe, a diferencia de esa cosa solemne, y careta, del periodismo analógico (hoy en crisis existencial y con una relación histérica con esta novedad tan vieja). Entonces, de pronto, hay un puñado de miles de personas que leen un análisis político (equivocado) en este blog, pero más se lee cuando cuento algo, generalmente vinculado a mis madrugadas féminas. Ojo, es todo mentira. Lamento tener que dar esta noticia justo en el día de la primavera, pero estoy felízmente casado desde hace 8 años, tengo cuatro hijos, me levanto para trabajar a las 7 de la mañana y no tomo alcohol desde hace unos 10 años, cuando junto a mi pastor comprendimos que en la vida todos tenemos una misión.
"Sin mentiras, la humanidad moriría de desesperación y aburrimiento" escribió Úrsula Vargués y cuánta razón tenía. En el año 2008, por las cosas escritas en este blogs, me empezaron a llamar de muchas radios (ninguna, que curiosidad, de Paraná) de las zonas más alejadas del país, que miraban con estupor lo que pasaba en la Pampa Húmeda y en los barrios del norte en capital federal. Los escraches de la oligarquía existieron en todo el país, la ampliación de la frontera sojera era ya un hecho, pero nunca fueron masivas las marchas fuera de la capital (no, en Entre Ríos, tampoco). Por eso, justamente, apelaban a estrategias televisivas de alta violencia, como escraches a gobernantes democráticos, golpizas, cortes de rutas, etc.  Úrsula Vargués estudió este fenómeno llegando a la conclusión que "La avaricia es un pozo sin fondo que agota a la persona en un esfuerzo interminable por satisfacer sus necesidades, sin llegar nunca a conseguirlo". Pasaron los meses, los lectores aumentaban, también, por supuesto, los que me detestan (que no son pocos, señora) pero tampoco se trata de una cantidad significativa.
Hice muchos, pero muchos amigos a lo largo de todo el país por República Unida de la Soja.
Conocí a gente verdaderamente brillante, un semillero -cuando esto se armó como una comunidad virtual- de donde van a surgir grandes periodistas, escritores, dirigentes políticos, novias de Lucas Carrasco, economistas, poetas, salieris de Artemio.
Se hicieron, en el 2009, algunos encuentros, pequeños primero, multitudinarios luego, impulsados por Eva Row  (que es la mejor, humanamente, de todos nosotros) de escritores de blogs políticos de afinidad con el kirchnerismo. Ahí,algunos planteaban crear una especie de organización. Yo era de los que me oponía, en fin, discusiones ya agotadas (unos optaron por crear el Movimiento Peronista Bloguero, otros, no, pero respetuosamente y con buena onda) pero sigo sosteniendo que la política se define en otra dimensión, y en cambio un blog, que requiere escritura (o diseño o fotografías o edición) y creatividad, necesariamente se hace de manera solitaria. Y con un concepto de sí mismo, digamos, bastante grande. Sino, en nuestro tiempo libre, en vez de escribir en un blog haríamos algo en la pastoral social. Se pueden, obviamente, hacer las dos cosas, pero potenciando en el acto dimensiones diferentes de la personalidad. Bah, no sé si me explico. Pero las estrategias comunicacionales a utilizar en cada dimensión de la vida son distintas: para hablar con Malena soy la humildad -ya rozando la humillación- en persona, pero luego para escribir sobre cómo hacer un huevo frito uno debe creérsela, sólo un pelotudo importante puede suponer que a alguien le interesa porqué no
sabés hacer un huevo frito. ¿Se entiende?
En el 2010 se sumaron nuevos lectores, en buena medida por mis mamarrachos (el de Duro de Domar fue lo sublime del mamarracho, y mirá que tengo varios, pero esa parte no se la cuentes a tu mamá, flaca) y por la operación que me hicieron con Clarín y Leuco. Gvirtz me enseñó, desde la primera vez que me invitó a 678 que podés escribir diecisiete volúmenes de lo que quieras, pero para que una gitana te pare en un entre baño de un bar de Rafaela para meterte la lengua hasta la garganta necesitás 5 minutos de televisión. Ya lo dijo Úrsula Vargués: "Solo existen dos cosas importantes en la vida. La primera es el sexo y la segunda.. no me acuerdo" Se está haciendo largo el balance.
Ludmila, en esa foto, estás preciosa.  Hoy es Un Día Peronista. Franco, te lo dije: hoy no puedo, pero después voy a la fiesta en el Gardel de Medellín, eh, pasa que Ludmila ha cocinado, con sus manos que tan bien (y a tantos, hija de puta) acarician...quereme, guacha, no soy sólo un asesino bonito.
Muchos de los lectores -los que no andan, digamos, buscando carroña- no sé cómo son pero me los imagino (en bikini): están en familia, son jubilados,estudiantes, trabajadores, haraganes, dirigentes políticos, profesionales, artistas, buscavidas, pibes de barrio, señoritas tímidas, adolescentes barderos, adultos de gafas, enfermos de diabetes, de duelo, enamorados, malhumorados, tramposos, locos, irreverentes, santos de mi devoción, fracasados, merqueros, putísimas, soñadores, de traje y corbata, pagando el alquiler, viajando en trenes, volviendo a ninguna parte. Como somos todos. Complejos, tarados, buena gente, resignados, trepadores, alcahuetes, solidarios, mentirosos, compadritos, papanatas, inteligentes, cultos, sensibles, hijos de puta. Todos somos un poco de eso. En eso nos parecemos. Pero la relación es desigual: ustedes me han dado algo, ojalá pueda retribuírlo.
Yo estoy agradecido, de verdad, a todos, los pocos o muchos, eso es lo menos, porque es cada uno, por robarle unos minutos de su vida y usufructuar de su lectura. Porque sí, hay que admitirla, a la verdad, y la verdad es que este blog garpa. Aunque no en el sentido monetario que fabulan desde la comunicación concentrada. Ya voy para allá, Ludmila. Sos la mina más linda del mundo.
Feliz 2011, para todos. Bah, no, para todos no. Para nosotros, sea lo que sea ese nosotros, hay un nosotros y a ese nosotros feliz 2011.
Ojalá en el 2011 pueda matarlos a todos, porque mejor que prometer es realizar.

7 comentarios:

  1. Vieja, más que una metralleta vas a nesitar una pistola de rayos para matarlos a todos. un abrazo

    ResponderBorrar
  2. ah...me olvidé, vos seguí chapando meneetash

    ResponderBorrar
  3. Lucas,Lucas al final no nos pudimos encontrar este año. El que viene en un ratito seguro. Pasala bien. Un abrazo compañero.
    Y como dijo Ursula Vargues " Las ultimas palabras son cosas de idiotas que no han dicho nada mientras vivian".

    ResponderBorrar
  4. Como presumo que pertenezco a ese "nosotros" que mencionás, no dudo en mandarte un abrazo y desearte un sensacional Año Nuevo.
    Eddie

    ResponderBorrar
  5. Como dijo Leuco (y creo que Úrsula Vargués también), Gracias, Lucas!

    ResponderBorrar