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No es fácil, compañeros, la vida. Hoy tuve que autorizar que mi hermanita, muy nena por cierto, salga con un inescrupuloso que le lleva 2 años!
Venceremos, pero mientras tanto, perdón, se me desataron los cordones, mientras tanto, creo yo que debemos, ojo, es mi opinión, eh, que la verdad es relativa y los derechos de uno terminan donde empiezan los de Paolo Rocca, decía, mientras tanto, debemos, de mínima, me parece, esperar que llegue un taxi.
Que sino así no salimos, y nadie hace nada, pero escuchame, que el viento de cola te lleva al BIRC, al sudeste asiático, a Japon, a la estratósfera, a cualquier lado.
Pero un taxi tiene GPS.
Yo también los quiero, pavotes.
Sí, a pesar de todo.
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