En el programa de Bettanin (domingos a la mañana, horario criminal para el camarada Carrasco), donde trabajo los domingos, en Entre Ríos, donde está como invitado mi amigo José Cáceres, presidente del partido justicialista entrerriano, candidato con Urribarri a vicegobernador de la provincia. Todo con mucho amor, eh (jeje, cómo me están pegando por acá, en la República de Palermo, corazón). Atención, chicas, no se trata de resistir archivos, a mí eso no me interesa. Sí, quienes venimos de una izquierda nacional, tenemos un pensamiento más o menos así, lo teníamos antes, lo tenemos ahora, con las contradicciones del caso. Como parte del peronismo, donde tengo y siempre tuve muchos amigos.
La obediencia absoluta que se me adjudica, a mí y a otros, no es ni ha sido nunca tal. En fin.
En el año 2008 yo trabajaba con José, vicepresidente de la Cámara de Diputados de Entre Ríos, y único diputado en toda la Cámara que no estaba a favor de la oligarquía y sí del gobierno de Cristina Kirchner y la conducción de Néstor en el partido justicialista.
Días durísimos, donde más de una vez, los empresarios rústicos de la soja, conducidos por Jorge Busti, querían cagar a trompadas al diputado Cáceres, literalmente; y a la gente del Pato Urribarri. Un gobernador que me sorprendió, sobre todo en esos días duros, por su temple y convicción.
Un día estaban en la Cámara De Angelli y su comparsa de empresarios negreros y explotadores, con los oscuros matones del maoísmo y los partidarios de Seineldín, a punto de irrumpir contra cualquiera que disienta con la cosmovisión oligarca. De Angelli daba clases con un pizarrón sobre pobreza, salud, educación, etc, todo a cambio de que le llenen los bolsillos de plata -como sucedió- derogando la 125. Cáceres lo cortó, le pidió que hablara del tema económico que le incumbía, que del resto no sabía un pito, que "los únicos pobres que conocen en la Sociedad Rural son sus propios peones" y la Cámara estalló en silbidos y a punto de pudrirse todo.
Tiempo después volví al periodismo, viví por Santa Fe, por Buenos Aires, por acá, por allá. Las cosas cambiaron. Hoy, el cierre de listas, expresa en su conjunto una visión del mundo por la que muchos, desde distintos y pequeños (en mi caso, literalmente, je) lugares, peleamos. Yo estoy contento por eso.
Y estamos en campaña electoral, así que viva el amor.
(Después de octubre basta con estas cursilerías del amor y del corazón, tá)
si, carrasco. se trata de resistir un archivo. no podés mirar para otro lado y esquivar el bulto. Vos pensás que Boudou es un payaso liberal y está bien que lo pienses. Pero se coherente con tu pensamiento y mandate una notita de opinión diciendo que el candidato a vicepresidente de Cris es un payaso liberal. Pero no lo vas a hacer. No te animás porque sos obsecuente. Simple. Lógico.
ResponderBorrarSi fuese tan obsecuente para que haberlo dicho en su momento? Es mas, para que repetir hoy en 678 que a él no le gusta el liberal?
ResponderBorrarA mi tampoco me termina de cerrar este vice, y? Y eso que no conozco nada de su pasado y su supuesta evolucion en tiempos modernos.