lunes, febrero 13, 2012

Huyan las señoras, cuiden a los niños, ahí vienen los de La Cámpera!

[12 febrero 2012]
Instrucciones para pegarle a La Cámpora (1)
Por Lucas Carrasco
Diario Crónica 12-2-2012
En el peronismo es una tradición que cuando se está en desacuerdo con alguna decisión del líder (no sólo de los grandes líderes, sino incluso de los barriales, locales, de agrupaciones, de sindicatos), para preservar el liderazgo en cuestionamiento, se apela a que tomó esa decisión equivocada culpa “de su (mal) entorno”.
Hay ejemplos emblemáticos en la rica historia del peronismo.
En el ala, digamos, “de izquierda”, el descreimiento en los días anteriores a la Revolución Libertadora de John William Cooke, porque, sostenía,“Perón se comenzó a rodear de alcahuetes”, es uno. Pero siguió dentro del peronismo e incluso, tras el golpe y como delegado de Perón, tuvo un papel vital en “la resistencia”.

Cuando en los 70 los jóvenes peronistas estaban disconformes con, entre otras cosas, los nombramientos ministeriales del General, quisieron reunirse con él para “romper el cerco” que se cernía,supuestamente,sobre el viejo líder.Y que representaba su secretario privado, José López Rega,a quien Perón mandó, justamente, a recibir a la Juventud Peronista.

Por, si se quiere, “derecha” está el ejemplo del sindicalista Augusto Vandor, que intentó “un peronismo sin Perón” alegando, no sin un análisis político conciso, que el líder en el exilio recibía las noticias de la Argentina de manera ajena y, a veces,contaminada.

El breve y rápido repaso viene a cuento de que, cada vez que se le pega desde los medios ultraantikirchneristas a La Cámpora, en realidad, el tiro es por elevación a Cristina. En general, desde esas usinas de la derecha se considera todo el proceso kirchnerista como una anomalía, como una excepción producto de “dos loquitos” y sostienen que cuando el kirchnerismo se termine volverá el “país normal”. Golpear a La Cámpora significa, tanto como golpear a todas las agrupaciones juveniles peronistas un tiro por elevación al potencial futuro de las ideas que encarnó Néstor y encarna la Presidenta.


Es Cristina una presidenta que tiene, además, la loca ocurrencia de renovar la política con cuadros frescos y darle lugar a los jóvenes.Dos enormes pecados en una Argentina que tiene tradición de marginar lo nuevo y apartar a la juventud.

Por eso es vital que los dirigentes, por lo menos, de La Cámpora, no se parezcan a los pibes de su generación en el relato ultra-antikirchnerista.

Entonces, para golpear a La Cámpora hay que decir que viven en Puerto Madero.

Lo cual les quita en el imaginario el desarrollo territorial en el país, les quita incidencia donde se juega el verdadero peronismo las barriadas populares, los sindicatos, las universidades públicas, las clases medias atadas al mercado interno y -de paso, convengamos-, suena violentamente cursi. Lástima que ese relato hegemónico es, diría Raymond Chandler,“ falso como la sonrisa de un camarero”. Lástima que ninguno de los dirigentes de La Cámpora viva en Puerto Madero.
Iván Heyn, economista muy querido por los militantes de las más variadas tendencias políticas (también incluye el afecto entrañable de este periodista) y fallecido recientemente, era presidente de la Corporación Puerto Madero, un ente gubernamental.
No vivía en Puerto Madero ni rodeado de lujos.

Pero acá entramos en un punto neurálgico: ¿deben los economistas de universidades públicas,militantes de corrientes populares, estudiosos de las doctrinas periféricas, con sueños revolucionarios, meterse en los sacrosantos altares de los más grandes empresarios? El caso vale para Mariano Recalde, para Axel Kicilof, para Santiago Alvarez, etcétera.

En el periodismo hay una vieja máxima, adjudicada a un editor de los años 70,que decía que la fórmula para hacer diarios era armar “la sección cultura con gente de izquierda, la sección economía con gente de derecha y la sección política con gente de centro”.Algo similar pasaba con ciertos gobiernos. Siempre y cuando las áreas claves para el poder económico estuvieran “atendidas por sus propios dueños”, esos jóvenes que no usan corbatas, leen libros raros y tienen ideas nuevas,bien podían refugiarse en lo social,en la cultura,o incluso,en un bloque minoritario de legisladores.Cristina trastocó esa lógica. Apeló a las ideas nuevas, aportó a la generación de una nueva cultura política e introdujo un ingrediente novedoso: la exigencia en el estudio, el saber, la capacidad y el trabajo.

La economía ya no es manejada por la “mano invisible del mercado”. Hay una lógica de formación de cuadros radicalmente distinta, incluso, a los años en los que se formó la Presidenta y,más aún, la mayoría de la principal dirigencia política. Es un aprendizaje de la sociedad, una maduración, que Cristina incentivó.


En los setenta, las grandes ideas revolucionarias subsumían la técnica; y la eficiencia era una palabra mal vista.

En los 90 fue exactamente al revés y el resultado fue catastrófico.
Se trata,en todo caso, de lograr un justo equilibrio entre medios y fines. Entre objetivos y herramientas.O, en lenguaje setentista, entre táctica y estrategia.

En los años 80, la Coordinadora (un grupo de vanguardia perteneciente al alfonsinismo, de destacados cuadros y multitudes movilizadas) y Franja Morada no estaban al frente de empresas técnicas que todavía eran públicas, en las áreas sensibles.

Ahí estaba toda la vieja guardia radical, distribuida por cupos de la lógica interna.
Eran tiempos de retorno de la democracia y a muchos jóvenes de esa Coordinadora la sociedad argentina les debe que abrieran compuertas anquilosadas por años de tradición autoritaria.

Hay parecidos, hay diferencias, pero no son muy ocurrentes: las críticas a la Juventud Peronista de los 70 y a la Coordinadora Radical de los 80, hoy van contra La Cámpora. Pero, como entonces, no se los critica por lo que hacen mal. Se los cuestiona violentamente por lo que hacen bien. Es de suma importancia en estas Instrucciones para pegarle a La Cámpora, entender eso. Les pegan más por lo que hacen bien que por eventuales errores.

6 comentarios:

  1. Lucas
    Con todo respeto.

    Creo que bçno existe "la Campora", como no existió el G.O.U. del putch juniano que encumbró a quien echó a correr la voz que había algo que se llamaba GOU.

    Son jóvenes y se nombra de funcionarios a técnicos jóvenes (algunos relativamente jóvenes).
    No se los excluye por su juventud, por que no se confunde juventud con inexperiencia.

    Entre ellos habrá efcientes y burros, seguramente. El tiempo lo dirá y el filtrado los correrá de las posiciones de decisión, de la militancia no.

    Lo cierto es que políticamente un grupo grande de joven de un arco de ideas (no ideologico) que va desde M. Recalde, pasa por Axel Kiciloff y termina en Leonardo Grosso, de tradiciones políticas bien diferenciadas, se sitúan dentro de un espacio común, se identifican.

    Lo único malo que veo, es que tambien se los expone demasiado y como jovenes que son, les encanta la exposición. Algunos serán cuadros permanentes del peronismo en el futuro, en eso no me cabe duda, lo que veo riesgoso, vuelvo a repetir, es la disposición a exponerse que tienen, mas de uno de estos jóvenes, se van a incinerar innecesariamente en este proceso.

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  2. Gracias Omar por tu preocupación,por los compañeros, no entiendo como es el tema de la exposición si jamas le hablamos a la prensa sacando contadas y cuidadas ocasiones.. creo que el tema pasa mas que nada por la curva que te comes como muchos de que copamos todos los cargos.. y espero entiendas que esta lejos de la realidad si de 50.000 compañeros aprox, hay 1000 cargos de los cuales 950 son muy menores... entenderás que partimos e la teoría de un sofisma y e todo caso la idea de inflarnos es de la conducción estratégica, obviamente no te voy a pedir que estés contento como referente pejotista pero decilo con todas las letras y yo y muchas compañeros mas te vamos a respetar porque lo que molesta o es que pienses diferente, lo que jode es el disfraz.

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  3. Es decir, Lucas, que es la sítesis de la dialéctica marxista? Tesis (los 70), antítesis (90) síntesis (el kirchnerismo)?.
    El puto de Barracas

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  4. OMIX: todo corpus de ideas lleva NECESARIAMENTE una pesada carga ideológica porque todo discurso es a su vez ideología.
    El Puto de Barracas

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  5. señor Omix, con todo respeto, pareceria que usted tiene todo unprejuicio con respecto a la Campora( que no existe),en àrticular y a la juventud en general atribuyendole a estos virtudes y defectos, sobe todo estos ultimos, que corresponden a los seres humanos en general, ya que la edad de un funcionario no me dice nada con respecto a su eficiencia, ya vemos cuantos viejos chotos dejarn este pais, afortunadamente este grupo de jovenes militantes(que no existen), estan conducidos por un cuadro politico como no hay otro, aunque a veces pienso que no es reconcido por usted, va, le cuesta, pero bueno estos jovenes responden a Cristina,y eso da, mas que miedo grandes esperanzas. lo saludo cordialmente.
    Abrazo para Lucas, y espero sepa disculpar la intromision.

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