Situaciones

En el año 2001 se robaba a cara descubierta, había, entonces, cierto plafón social que hoy, en la percepción sencilla de quienes están, aunque ahora parece calmarse la cosa, saqueando, hay cierta percepción sencilla de que eso no está permitido socialmente. Las condiciones son distintas y esto es más o menos compartido.

Más vale que un LCD contiene toneladas de arroz, así que ese punto menor, no tiene discusión. Y está clara la sincronización del lumpenaje delictivo que, naturalmente, prende donde hay ciertas condiciones estructurales: la fecha (las navidades son caras afectivamente en un contexto de brutal desigualdad social; y es además, la fecha donde bajo la vigencia de políticas expansivas la inflación a los pobres se agiganta) una manito de las policías y la indefensión del estado nacional que apenas puede recurrir a fuerzas represivas como la Gendarmería que están conspirando constantemente contra el gobierno.
Tiene algo de razón Abel en lo que me critica. Con dos salvedades. La mirada palermitana de izquierda es la que hace añicos a bandas oportunistas como la que conduce Tumini, de clara responsabilidad en la propagación de rumores infructuosos finalmente, en la localidad, lejana a Palermo, de Moreno. En Provincia de Buenos Aires. O al interior de la formación socialista, que mandó sus narcos policías a ausentarse y ahora no saben cómo parar lo que ellos generaron.
La segunda salvedad es que para prender la chispa en las barriadas hace falta poner unos mangos. Y los que tienen la plata y la bronca para ponerla, son ellos. Y eso se retroalimenta con el Partido Clarín. ¿O acaso dejaron de existir las clases sociales?
En Concepción del Uruguay, un grupo de pendejos desclasados -de los que hay legión: después de todo son décadas de neoliberalismo feroz y pocos años de oportunidades, aún escuetas, para los jóvenes- comandados por la Sociedad Rural y el radicalismo, que en la Pampa Húmeda son la misma cosa, comenzaron con intentos de saqueos que agitan un clima social de por sí agresivo para la juventud pobre. Que, a su vez, signo de estos tiempos, se organizó por facebook para agitar.
La impotencia política de la oposición más marginal, que apuesta ya definitivamente al quilombo, enciende, otra vez, las luces de alarma de los sectores democráticos. Que trascienden al kirchnerismo.
En el posteo anterior hay un video de Bariloche. Se ve una 4x4 robando televisores y tiros. Hay grupúsculos que, amén de delincuentes, consideran que el odio a la izquierda en el gobierno habilita cierta cosa retorcida de estar por fuera de la ley. Hay que prestar atención a estos hechos. Así como a los 2 muertos en Rosario.
Lo más importante es que el kirchnerismo, que transcurre, por primera vez en la historia la continuidad de una corriente política en su tercer mandato constitucional, mantiene la serenidad y el comando de la situación. Los gobiernos oficialistas y opositores en problemas recurren al gobierno nacional porque están desbordados.
Por supuesto, las cosas pueden cambiar y de hecho el vendaval de informaciones (y operaciones de inteligencia de grupos que tienen formación contra estas cosas y no pierden oportunidad de desgastar al gobierno) trae vértigo y novedades. Habrá que seguir los hechos. Pero el gobierno está fuerte, las condiciones sociales han mejorado estratégicamente, hay un rumbo y habrá, cuando las cosas se calmen, seguramente después de navidad, que exigir a los que hacen política a través de actitudes mafiosas y antidemocráticas, que se saquen la careta, que queden aislados y que vayan, además, a los tribunales (ausentes con aviso) a dar explicaciones.