El problema de Cristina

Polarización y proscripción: 

Dos tácticas, que un sector del kirchnerismo, el más bullanguero, el kirchnerismo fantástico (conocido por su aflicción en la batalla naval de la cultura) tiene como estrategias, error de principiantes, pues los granaderos simióticos esencialmente carecen de sutilidad; dos tácticas pueden intensificar el actual ocaso político de Cristina.
Tales son: la polarización y la proscripción del justicialismo.

Los dos polara anaranjados: 

El business del país dividido ya dio su primer dividendo negativo. Massa. Por ahora, la campaña de los Granaderos de la Victoria luce muy profesional, muy noruega, estrictamente prolija, enciende el alma muerta de los descreídos que se anotan en la carrera de las falsas ciencias políticas. Muy de mercachifle de la mercadotecnia, como si no existieran los bolsos y ferraris de Fariña. Pequeño detalle.
Mi amigo Nahuel murió en Córdoba, en el único acto espectacular de una vida sin especulación. Dejó, en Paraná, dos polara anarajados que creo que rompía para ejercer su pasión por arreglarlos en el taller de Cáceres, al lado de mi casa familiar.
Eran iguales para un lego en la materia como yo. Uno, acaso, más pálido, con la pintura más compuesta y menos brillante.
El otro hizo como mayor excursión un viaje hasta San Benito.
En aquel entonces de una ciudad a otra estaba el encanto de algunos campos y los montes baldíos. Tenía sentido. Hoy, por ejemplo, ambas ciudades ya no se distinguen: hileras de casas, recuerdos de los inicios del kirchnerismo, cuando hacían barrios chorizos. Los buenos tiempos se terminaron. Quedó la urbanización.
Antes de todo eso, en pleno menemismo golpeado, muere Nahnuel. Se suicida.
Los dos polaras se perdieron en algún agujero de esta historia. Mi memoria engañosa sin embargo, los recuerda como sobrevivientes al costado de la banquina. Durante un tiempo ya sin gloria. Esperando el desgaste definitivo.
Quien quiera oír que oiga.
La muerte y el tiempo fueron corrosivos para la carrocería de la polarización. Una táctica válida y exitosa tras la derrota electoral de 2009.


Traidor y Llevador:

Fariña es el jefe campaña de Massa. El que amenaza con testificar, antes de su propia cárcel, para llevarse puesto a varios. Para evitar un par de años de meditación obligada, Cristina estira la táctica de la polarización.
Joaquín Sabina cantaría Pobre Cristina.
Volvamos, a pesar de los Granaderos que se niegan a entenderlo, a la política. El problema no es el enriquecimiento ilícito, sino el enriquecimiento lícito: la consecuencia es el empobrecimiento ilícito de otros que no tienen nada que ver. Eso es lo very puaj de este kilombo.
El enriquecimiento lícito hace chocar los trenes, matar en las autopistas, en las veredas entre cartones o en la sala de espera de un triste hospital público. La obligación de venerar al mejor expresidente del más largo ciclo democrático es, en ese contexto, de hospitales privados, por ejemplo. Un hospital del Opus Dei para el comienzo del ocaso del kirchnerismo, el tratamiento, por suerte exitoso, de un cáncer a la presidenta. Meses después del batacazo electoral había que mirar a Boudou con otros ojos: se había peinado como Isabelita.
Luego se supo que era más parecido al cuñado de Perón.
Los Granaderos (aclaro que votaré a los Granaderos en Entre Ríos) deberían, una vez que laudó desgasificar la Massa antes de hornearla. Pero no pueden. Las Dos Tácticas (2d) se lo impiden. Una, ya es tarde. No se puede llamar a elecciones internas para el Justicialismo. Pero, ojota bellota, un anuncio de convocatoria a internas para autoridades del justicialismo en, por ejemplo, Marzo, antes de abrir las sesiones en el Congreso, operaría sobre la campaña electoral como señal al electorado kirchnerista que piensa votar La Massa en crudo. Laudaría ahí. Para que no parezca que dada la debilidad de La Massa (sin cantera) acompañada de Tundis y Gianola -que puede hacer la prueba de la blancura a los bonos CEDER y EVADE- o el queso Mendiguren, que está un poco devaluado, es el único que valorará la ayuda de los vencidos. Cantando alegres Vencedores Vencidos. Los Granaderos de la Victoria podrán llevar su solidaridad a los Renovadores, si vencen. No parece que a los Renovadores les tomen en cuenta sus telegramas solidarios si los Granaderos vencen. Asunto derivado de las 2d.
(Consejo a mis amigos kirchneristas: digan que Massa es el Frente Devaluador. Está el queso Mendiguren. Aprovechenló. Seguro que Duhalde busca protagonismo y los ayuda, en vez de hacer hincapié en Macri, al pedo porque nadie lo ve ni virtuoso ni peligroso. Y ni digan que también en el Frente Devaluador está Clarín, dejen eso flotando. No traten de hacer pedagogía que no saben un carajo y la gente no es tonta, de nada)

La Massa sin cantera:

La reelección de Scioli como presidente del Partido Justicialista, en las elecciones de marzo que desde acá convocamos, sería posible ante la candidatura de La Massa. El problema es que La Massa quiera disputar ese escalón previo hacia su irreal candidatura presidencial.
Pero, de esa manera, se nacionalizaría la interna bonaerense. Lo cula sería justo.


Los ministros Toblerones todos unidos lararaeeeemoos laraeando al capital PERÓN PERÓN:

Envases feos. Pero muy ricos. El único Toblerone que es candidato es el Toblerone de Agricultura, en Chubut, un municipio del sur administrado por quien fue electo opositor y en la extrema unción de la noche del triunfo se hizo Granadero. El Toblerone de Agricultura tiene pasado político en el municipio de Chubut, por eso es candidato. Además, como el ex gobernador de ahí era de los favoritos de Cristina, o sea, de los primeros en darse vuelta, le permitió al Toblerone de Agricultura, total el municipio de Chubut es petrolero, hacer política. Misteriosamente, Cristina, también le permitió hacer política al Toblerone de Agricultura, pero nada más que en Chubut. Consistente en repartir contratos para chubutenses mientras repartía subsidios a la oligarquía de la Pampa Húmeda tratando, eso sí, de convencerlos de las ventajas del socialismo nacional. Incluso, hay interesantísimos sermones presidenciales donde no está sentado, aprendiendo la leeción, el alumno Toblerone de Agricultura. Le permitían trabajar. Seguramente confiados en que el Toblerone no podía zafar de semejante engendro ministerial. Los cagó.
Por las dudas, encima, le pusieron al único funcionario del gobierno que no es Toblerone, que hace política aunque sabe que por esa razón no estará en ninguna lista y el único en el gobierno aparte de Cristina que tiene respaldo de militantes y lo sigue teniendo después de ser viceministro, incluso con una gestión para el olvido: Pérsico.
Ningún otro Toblerone es presentable ante la sociedad (ni para lista sábana, como le dicen ahora al cupo femenino) excepto el vicepresidente, que se presentará en 2015 en tribunales para una candidatura a perpetua. El Centro de Estudiantes del  Conurbano se entusiasmó con una candidatura de Máximo en Santa Cruz, pero perdieron por goleada la interna del Justicialismo. Peralta, el más cristinista de la provincia con clima destituyente, naturalmente, les aplicó la lección que más les conviene para zafar: llamar a internas para autoridades.
Alicia quiso ser candidata en provincia de Buenos Aires. Manejando el proyecto colectivo. Tuvieron que conformarse con el proyecto combi. Se subieron Kunkel, la monstruosa Diana Conti y Depetri. Maneja Insaurralde. Camino a una derrota digna si polarizan las ventanillas.
Alicia medía tan poco que su próximo destino es de suplente del mini en Duro de Domar.