La vueltereta semipresidencial

Después de hablarle a su Club de Fans sobre esas pavadas que gozan de oportuna irrelevancia, un funcionario encargado de anunciar enfermedades dijo que había cambios en el gabinete, creando, incluso, dos nuevos ministerios: el de economía, poniendo un ministro que en todas sus funciones en este gobierno aun no demostró un solo resultado, y la creación de la Jefatura de Gabinete, con el ex jefe de gabinete del semanario Rodríguez Saá, actualmente gobernador del Chaco. Desde el gobierno de Duhalde que un gobernador no ocupaba un ministerio.
Se fueron dos frentegrandistas: Casimira Marcó Del Pont y el mexicano Juan Manual Abal Medina, justo cuando Susanti Pancho no tiene buena onda con el campo y sus productos colombianos y mexicanos. Tuvo reflejos, la semipresidenta.
El productor de Soja, Capicaniche, oficiará, en los hechos, de presidente. Quedando nuestra heroína televisada cobrando el salario, encargada, como le gusta, del control remoto.
El problema es si esto le dura.
El Coronel Gonorrea suele recordarnos que la semipresidente no pudo hacer un candidato a diputado en la provincia de Buenos Aires, menos podrá o tendrá ganas o le dará la humildad para hacer un sucesor. Esto, en sí mismo, no sería hoy un dato político relevante, sino hubiera un tendal de heridos que necesitan de este gobierno para vivir. Y son los aplaudidores. Capicaniche no necesitará aplaudidores, para no herir la sensibilidad de la señora, cobrando demasiado protagonismo, pero trabajará. Ese es un dato novedoso con un gabinete paralizado, viviendo la vida loca mientras boludeaban todo el día en el despacho mirando televisión para después hacer simiótica al gusto de la presi.
La vuelta fue sin épica. Una vueltereta cursi y grasa, bien menemista. Obsesionada, esto es lo nuevo del paisaje menemista, con la televisión. Fluorencia filmó a nuestra heroína dos días después de una multimillonaria licitación para hacer un reality presidencial. Que bien podría hacer Fluorencia, una fiel representante de la juventud: ni trabaja ni estudia. Si no fuera por la herencia y el uso de la flota de aviones presidenciales, y que no paga impuestos a la herencia gracias a Videla, sería una ni-ni más de esas que alegran al ex ministro de educación very grosso.
¿No iba a volver para inaugurar una empresa privada?
Hay un detalle...
Nadie podía movilizar mucho. Y hacer El Show de Cristina en vivo y con público requiere algo más de goyete. Me parece. Aunque probablemente, no haya sido por eso. Sino por algo peor. Para demostrar que resignó el poder, habrá aterrizaje suave, conservadurismo popular, ordenamiento paulatino. Y un adiós con la épica del expediente administrativo.
Eso sí, lo del divorcio express, con Capicaniche defendiéndolo en diputados, sale en 5 minutos