Sabiendo que en las cercanías de Rosario, un concejal del PRO - el partido de Macri, que llama al cacerolazo para defender la patronal, crece el debate al interior de la centroizquierda urbana y rural:
¿Es ocnveniente incendiar las villas, como método de progresismo moderno, en vez de las topadoras del "mejor intendente de Buenos Aires" Cacciatore?
Ojo, a debatir con fundamentos y PRO-Pues-Tas como acá en esta nota. Nada de crispación e intolerancia, tamos, Tomás?
yo creo que hay que dar el debate, siempre y cuando también entre en el mismo, prender fuego los countrys.
ResponderBorraro no?
De ninguna manera! soy una persona comprometida con el medio ambiente y las quemas contaminan.
ResponderBorrarEsta gente atrasa siglos, las villas las quemaban los antiguos conquistadores. La solución tiene que venir de la modernidad: cámaras de gas y castración. Y si ahora con esta moda ladriprogrepolíticamentecorrecta es demasiado dura, vamos con la solución social: matamos a la mitad de los pobres y hacemos hamburguesas para darle de comer a la otra mitad y así acabamos con la pobreza y el hambre a la vez. Qué distribución del ingreso ni distribución del ingreso...
ResponderBorrarAbrazo!
tiene razón Diego,estos métodos son atávicos.
ResponderBorrarsolución final y a otra cosa.
Luego de la quema, queda el terreno ideal para apropiarlos y plantar soja.
ResponderBorrarAlli tambien se unen los intereses pro con los de la sra, cra, faa y puaj.
¡Dios mío!
ResponderBorrar¿Alguien se puso a pensar en el efecto invernadero? por el Padre Grassi nuestro que descansa en Devoto, ubiquense loco...
Yo quiero un proyecto alternativo, eso de quemar ya re fue.
ResponderBorrarSi yo no fuera pobre, pediría la aniquilación de todos los pobres...
ResponderBorrarOjo, Lucas, porque vos te tomás todo a la chacota y pasás por alto algo grosso. Cuchá:
ResponderBorrar“Espero que nos reunamos para prenderles fuego”
El tipo quiere construir desde abajo, con participación ciudadana, y vos te le reís.
Si, si, todos muy vivos y piolas, pero no dejan de ser charlatanes de café ( o de blog, tanto da). Ninguna propuesta alternativa seria. Que no por esto, que si pero no por aquello. Que no es el momento, que los efectos secundarios.
ResponderBorrarA ver si se la juegan, ché.
Y antes que me critiquen por lo mismo me apresuro a dejar mi propuesta:
Habiendo tanta tierra en la Argentina, ¿porqué no le damos a cada pobre un pedazo, si acá tirás una semilla y crece sola?
¿Cómo? ¿Que la tierra ya tiene dueño? ¡Caramba! En ese caso coincido con el preclaro candidato de PRO, seguro que Rozitchner encontrará el argumento democrático para elevar el proyecto a la cámara de diputados (cuando cambie este congreso ilegítimo, claro)
Una aberración las declaraciones de este tipo, pero digamos las cosas como son. En el sur de Santa Fe, el PRO no tiene estructura propia, es solo un presta nombre. ¿De donde viene este personaje? Del peronismo, si Sr!!
ResponderBorrarUna correccion menor:
ResponderBorrarVilla Gobernador Galvez está en las cercanías de Rosario, Galvez (a secas) esta en la zona de Coronda.
PROmicky!
ResponderBorrarq genteeee!
y q triste!
La quema tiene sus ventajas, ya que se sabe que, además de suprimir a los indeseables, el fuego purifica y elimina gérmenes, siempre asociados a los indeseables.
ResponderBorrarPero también hay efectos secundarios desagradables, como han señalado los distinguidos ecologistas. Un comentarista de La Nación, al apoyar el espíritu del candidato PRO, corrigió su implementación: propuso crear un campo de internación (no de concentración, entiéndase bien) en la Patagonia, para encerrar allí a los jóvenes que no trabajen ni estudien.
¿No vale la pena reflexionar sobre esta audaz propuesta?
Saludos