sábado, diciembre 26, 2009




A Macri en la ciudad de Buenos Aires, sus temibles aliados del GRUPO A como la Coalición Cínica y Proyecto Surf, no le hacen sombra.
Que Macri se mande un par de cagadas, propias de su cosmovisión despolitizadora y tecnocrática, no quiere decir que lo que con generosidad se denomina "progresismo" en el 2011 pueda ser gobierno.
En todo caso, se rompió la ilusión de que podía ser candidato a Presidente.
De todos los "jefes de gobierno", trascendencia nacional (que todos buscaron) sólo tuvo el progresista Fernando De La Rúa.
Por otra parte, el lanzamiento de Duhalde y el anuncio de su futuro gabinete -incluyendo el ex candidato presidencial de la UCR, Roberto Lavagna- no motivó más que críticas desde el peronismo de derecha, indifernecia en todo el arco político y un entusiasmo bizarro por parte del Grupo Clarín. Nada, por ahí.
Posiblemente, ese lanzamiento y el anterior de Felipe Solá a presidente, le sirvan a Reutemaaan para demostrar, en ese espacio, que es el candidato más taquillero.
De todos modos, la fortaleza del peronismo opositor -que se expresó electoralmente en la Provincia de Buenos Aires, en La Pampa y en Santa Fe, a la vez que perdió en Córdoba, en Entre Ríos (la esposa de Busti en alianza con Urribarri y el kirchnerismo) en Misiones, en Salta, en La Rioja- va menguando, entre otras cosas, porque la mitad de los "referentes" de ese espacio son candidatos a presidente, la otra mitad, a vicepresidente. Todos, con sus más o sus menos, tienen importantes parcelas de poder en sus provincias, pero nada saliendo de esas fronteras. Y ningún liderazgo sobresale, después de la sobreestimación reutemanista y el raro despliegue de Solá, el eterno segundón que hace tropezar al primero para afanarle el sillón.
Lo único que queda en pie, en el escenario nacional opositor, es Cobos. Y Kirchner, Néstor, no Cristina.
Pero, Kirchner perdió en provincia de Buenos Aires, y aunque conserva la primer minoría, cierta cohesión interna y un liderazgo claro, se encuentra más debilitado que antes de las elecciones.
La increíble recuperación de la iniciativa política, tuvo el efecto de instalar que "no se da cuenta que perdió" (como no se dan cuenta Schiaretti, Binner, Busti, Pino Solanas, Romero, Carrió, Stolbizer, Alfonsín, Gerardo Morales: todos perdedores que, sin embargo, festejaron victoriosos un triunfo junto a los que sí triunfaron dentro del Grupo A -ah, y el Grupo B fue el ganador en la contienda nacional electoral última, para colmo) y otorgarle gobernabilidad y cohesión interna. Pero, también, la creencia en los sectores más perdidos de ese espacio político de que la fortaleza, tras el 28 de junio, es mayor. No, es menor.
Antes del 28 de junio se creía que ganaba con comodidad Kirchner en la provincia de Buenos Aires, no sucedió y la derrota hasta en Santa cruz, tendrá sus efectos.
Cobos y Reutemaaan (este último, muy desdibujado y sin una estructura nacional donde no estén todos peleados) emergieron como los grandes ganadores.
Cobos desde el Acuerdo Cínico y Social, pero incluyendo un lobysta peronista de Mendoza en sus listas y coqueteando con el colombiano de la efedrina.
El Acuerdo Cínico y Social, además de establecer un claro programa de gobierno para los próximos 60 mil años, se partió al otro día de las elecciones. La Coalición Cínica, por cuestiones de plata a los sellitos moniotributistas, se hizo pedazos: Margarita Stolbizer, salió a inventarse antecedentes progresistas, Patricia Bulrrich a sostener los fondos del exterior que le mandaban (a nombre de Carrió) y Carrió contra todos.
El partido socialista, arrastrando su interna entre los votos de Binner y el derechismo ilustrado de Giustiniani, se alejó de los radicales y de la Coalición Cínica.
Y Cobos quedó solo. Sabiendo que la hasta entonces ONG radical, que compró a todos los radicales K borotizados, lo había echado de por vida para considerarlo a los dos meses el hombre que podía suplir a Lavagna en la dura lucha de conservar las bancas, desconfiaba de los radicales y acentuó sus reuniones con el colombiano de la efedrina, y las maratones consensuales donde pide y pide. Mientras, en los almuerzos de Mirtha Legrand, los radicales lavagnistas balbucean sobre las instituciones, Cobos arma reuniones opositoras en su despacho de la vicepresidencia.
El clásico boludeo para inventar un estadista (reunir a un grupo de licenciados de la UBA para que proyecten de acá a siete mil años, y viajar a España a reunirse con el rey y a Estados Unidos a reunirse con algún subsecretario) le está vedado a Cobos, porque es impresentable en su rol de demoledor de las instituciones. La gente de a pie, sin embargo, sigue considerando que su desempate fue la consumación de una monumental gesta heroica, pero no mucho más.
Cobos, que también pide no ser comparado con De La Rúa, tiene varios no positivos que sortear:

-El no muerto recuerdo de De La Rúa.
-El no entusiasmo que genera entre la militancia orgánica de la UCR.
-Las no precisas argumentaciones sobre su rol antirepublicano.
-La no presencia de un candidato serio en la provincia de Buenos Aires (perdón por Stolbizer y el HIJO de Alfonsín, pero bueno, a veces hay que hablar en serio).
-La no existencia de un candidato en la ciudad de Buenos Aires.
-La no posibilidad de articular a Binner con Macri, para resolver estas cuestiones.


No la tiene tan fácil Cobos, aunque es hoy, ayudado por Duhalde y el peronismo de derecha, quien más posibilidades tiene de acceder aun balotaje contra el kirchnerismo y de ese modo ganar la elección.
Si hoy fueran esas elecciones y sucediera un balotaje entre Cobos y Cristina, sin dudas ganaría Cobos, pero contra una fuerza política o corriente interna-el kirchnerismo- que estaría batiendo récords históricos: tras dos gobiernos consecutivos, accede al balotaje.Contra su vicepresidente.
Una situación, convengamos, compleja. Sobretodo porque el vicepresidente elector presidente no se apoyaría en las estructuras del ex kirchnerismo (digamos, en Solá, Juez, Busti, Reutemaaaan, Schiaretti, Aníbal Ibarra, Telerman) sino la de sus adversarios de la resistencia lavagnista.
No es un buen prospecto para comenzar a gobernar, si además sumamos que, como Cobos no tendría reelección, y a los radicales les gusta tanto las internas que....




1 comentario:

  1. Excelente lo suyo.

    Me reí un rato con lo de Proyecto Surf y la Coalición Cínica. También me gusta el Desacuerdo Cívico. La creatividad dañina me encanta.

    Un saludo cariñoso de año nuevo y felicidades!

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