D´Elía: “Kirchner es un hijo de puta pero es un hijo de puta nuestro”
En el blog de Gerardo Yomal se cita esta frase, dicha por Luis D Elía en una reunión. La seriedad de la fuente está descartada (a Yomal lo conocimos con el Betta en un almuerzo que organizó Eva, me acuerdo) y por eso le preguntamos a D Elía por esa frase y en esta entrevista la explica. Es interesante el punto de vista.
La frase tiene un antecedente que gracias a Jorge Croce, podemos leer acá.
También hay un antecedente en los dichos de un miembro del partido socialista chileno que en épocas del gobierno de la UP de Allende que ante la crítica al gobierno por algunos desaciertos notables en la gestión declaraba públicamente que el gobierno del chicho podría "ser malo pero era nuestro", es decir, de los sectores populares. La simbología, también aplicable al fenómeno Maradona, remite a que no existen cosas como lo bueno o lo malo como algo prístino y virginal que desciende cual revelación del cielo, mas bien son valoraciones morales que tienen que ver con las particulares relaciones que se producen entre determinados sujetos históricos.
Somos humanos. Para buscar "puros institucionalistas" está la oposición; "honrada y brillante cual escarapela en el pecho"; o mejor: "sorete en el orto"
También hay un antecedente en los dichos de un miembro del partido socialista chileno que en épocas del gobierno de la UP de Allende que ante la crítica al gobierno por algunos desaciertos notables en la gestión declaraba públicamente que el gobierno del chicho podría "ser malo pero era nuestro", es decir, de los sectores populares.
ResponderBorrarLa simbología, también aplicable al fenómeno Maradona, remite a que no existen cosas como lo bueno o lo malo como algo prístino y virginal que desciende cual revelación del cielo, mas bien son valoraciones morales que tienen que ver con las particulares relaciones que se producen entre determinados sujetos históricos.
Somos humanos.
ResponderBorrarPara buscar "puros institucionalistas" está la oposición; "honrada y brillante cual escarapela en el pecho"; o mejor: "sorete en el orto"