Mirar los desarrollos territoriales de cada fragmentación política, es la clave de interpretación, a mi juicio, como siempre, corazón, modesto, a mi juicio, para entender hacia dónde van las cosas.
Hay, me pasa con muchos amigos, un sociologismo a la carta que utiliza números al voleo sobre cuál incidencia en el total del padrón representa cada territorio de lo que en conjunto se da en llamar argentina. Sociologismo de números mal comprendidos. Los números, para lo social, son parámetros de muy difícil comprensión. Pero tienen la virtud de hacerse creer, como las prostitutas, fáciles para el amor. No. dicho con mi habitual modestia: dame cualquier conclusión, yo le pongo, si querés, los números.
Ponerle números a cualquier conclusión es algo relativamente fácil. Hay números disponibles, sin necesidad de forzarlos, para decir casi cualquier cosa.
Sucede bastante, también, con las encuestas de intención de voto.
Yo confieso mi absoluta ignorancia para comprenderlas, y no hago esta ignorancia extensiva, para nada. Por el contrario, conozco gente sagaz, con verdadero talento para sacar, de las encuestas, lecturas de lo político que al común, yo por caso, se le escapan.
Las encuestas son algo muy serio como para dejarlas en manos de políticos. Los números, son algo demasiado serio para dejarlos en manos de los sociologismos a la carta.
Claro que ante tanta chantada ensayística, la numerología, opera como cientificidad para empresarios, que son los que compran cualquier verdura en la materia que desonocen, y pagan bien. No todos los empresarios. No, no, se requiere cierta habilidad, muy conectada con el clima social, para ser empresario. Ahora, para ser un alto gerente de finanzas, no. Esos son el mercado pequeño adonde vender numerología, diciendo cualquier cosa, con todo de jerga pretendidamente científica, cuanto más lejana e imprecisa al cliente, mejor.
En el actual estado de cosas, el kirchnerismo es el único partido político existente. El peronismo, género literario -como el campo y el folklore- se consigue de mejor calidad, en la República de Palermo, es la condición de posibilidad, de esa constante histórica, del antiperonismo. En la realidad concreta, que debemos a Perón, lo que existe es el kirchnerismo. Y la disputa simbólica sobre el peronismo, o sea, sobre el kirchnerismo, su herencia y su legado.
Es un problema político que no exista ninguna alternativa a la derecha del sistema. Ninguna alternativa capaz de dotar de gobernabilidad.
El FAP -Frente Anti Peronista- que como toda experiencia de mediano y largo plazo en busca de superar las viejas dicotomías se extinguirá tras la próxima elección, no pasa de ser un pronunciamiento ético de la Pampa Húmeda y su subproducto oligárquico: el liberalismo de buenos modales. Nuestra historia democrática, y la de las dictaduras, fraudes y proscripciones, encuentra siempre respetabilísimas candidaturas de este liberalismo oligárquico, de buenas intenciones, estanciero y galerita. Binner es uno más de esos exponentes. A sus casi setenta años, se da el gusto de quedar en la historia chiquita de sus predecesores, principalmente, santafecinos. Como Estévez Boero, su mentor. O Lisandro De La Torre.
El radicalismo es, en cambio, un partido con vocación de mayorías. Alquilado a las corporaciones oligárquicas, se volcó,en la Pampa Húmeda, a un típico partido de derecha moderna, con la variante tercermundista de un partido atendido por sus propios dueños. La típica variante tercermundista es que los partidos de derecha sólo representan a una facción del capital y desde ese partido disputan. Regalando al populismo cierta franja, defensiva, del capital, aliado a sectores populares, siempre, por supuesto, en tensión e inestabilidad. El problema, corazón, es la oligarquía diversificada. Pero bue, es largo y complejo el tema. Son las ocho de la mañana.
Y Paraná está despertándose.
No es menor el problema del radicalismo: la conducción de la Pampa Húmeda y el Puerto, equilibraba el tinte reaccionario y clasista del radicalismo norteño. En el sur, el radicalismo replicaba este equilibrio, con variables.
La idea de El Hijo De alfonsín, que es la idea de la principal dirigencia radical -el impresentable Cobos y Ernesto Sanz, por ejemplo- no es mala. Con la socialdemocracia en bancarrota, el peronismo volcado a la izquierda y en sintonía con sudamérica, el único espacio vacante estaba a la derecha. Como, momentáneamente, acompañante. El servicio de acompañante -a veces recubierto tras el eufemismo de "masajista"- le sienta bien al alfonsinismo siempre y cuando alguno de la dinastía retenga las riendas del liderazgo partidario. El Hijo De alfonsín demostró que, en octubre, pierde cualquier liderazgo interno. Habrá que ver. Hasta ahora fue eficaz en pulverizar a Moreau, Storani, Cobos y Sanz, si logra sobrevivir a su estrepitoso fracaso electoral.
¡Qué mal está el radicalismo, qué lo parió!
ResponderBorrarMe gustaría que Binner se transformara en una alternativa viable... me cae bien (tiene menos onda que un renglón, pero es un tipo bastante capaz). El tema es que está grandecito.
Saludos
Hay muchísimos candidatos geniales, lo que pasa es que ninguno va a fomentar la vagancia y regalar plata por no hacer nada como Kristina. Duhalde es una muy buena opción. Como dijo el compañero en el comentario de arriba, Binner y Rodriguez Saa tienen sus provincias de una manera increíble, tanto que no parecen Argentina. Alfonsín también es un tipo muy capaz.
ResponderBorrarMe parece que no falta mucho para que al "frente antiperonista" le tenga que cambiar el nombre por el de "frente de saldos y retazos antiperonistas" porque no me lo imagino a binner diciéndole: ¡No me atosiguéis!!, a todas las hadas madrinas que ahora se le tiran encima
ResponderBorrarConclusion...el milagro fue para Altamira no para la izquierda.
ResponderBorrarLos nros:
presidencial 2007
PSUR+MTS+PO+PTS=3,38%
PASO 2011
PSUR+MTS+PO+PTS=3,38%
Un deporte divertido para debatir: utilizar la prensa trosca para argumentar con troscos.
Prensa del PTS 2011:
"...el PO es un aparato capaz de darle la espalda a su lucha real con tal de salir en televisión. el mismo afán de figurar, así sea de espaldas a la lucha de clases..."
"Sencillamente es la consecuencia de un grupo político (el Partido Obrero) que ha perdido contacto con la clase trabajadora real y no quiere tenerlo."
"..en el caso de PO, su participación en la lucha de clases es apenas una pose, un “cazagiles” para cubrirse por izquierda dentro de una estrategia de construcción de un partido absolutamente
electoralista." La Verdad Obrera, enero 2011. PTS, en el Frente de Izquierda de los Trabajadores.
Saludos
Algo de ésto, acá http://elescupitajo.blogspot.com/2011/08/y-despues-de-oktubre-desde-oktubre.html
ResponderBorrarchagrasia!