sábado, enero 28, 2012

Recalculando: a 20 metros, zona peligrosa.


La Familia está aumentando las provocaciones al gobierno. Ay, Moyano. Por ahora, Papá Gerente se cuida y, en una actitud un poco tipo que no da, manda a vandorear a su prole hereditaria. Tanto Samid hijo -que juega de policía malo- como Pablito Ruiz -que juega de policía rojo- cumplen, con aburrida previsibilidad, su papel. La situación se les está yendo de la alcancía y el escenario no tiende más que a escalar, corazones. Con Cristina, por ahora, sin hacer nada. ¿Para qué?
Las fotos de Pablito Ruiz, el Wachiturro, vacacionando en el caribe dan muy "niños bien", mientras que en La Nación, educaditos, cuentan al pasar (como quien no quiere la cosa) que el gerente fue a Santa Fe, al cordón industrial de Rosario, a dar un discurso contra Cristina, en un avión privado. Un avión privado, qué tierno.
Recordemos que la mafia sindical de Barrionuevo en Aerolíneas Argentinas....
Suena difícil,  en este cuadro, tornar creíble que Pablo, o Samid hijo, es un viejo luchador sindicalista. Ni con las mejores intenciones de Clarín, ni con el celo -educadito- de La Nación. No cuaja.
La provocación continúa con un capítulo imperdible: una marcha de Moyano srl. Era hora. De que prueben los cartuchos: si pueden movilizar la misma cantidad de trabajadores ahora que están enfrentados a Cristina.
Por las dudas, los tres mosqueteros, ya anunciaron que la marcha la harán con Pablo Michelli, de la CTA ilegal, la CTA al revés o ATC, y con el movimiento Barrionuevos De Pie. Tanto ATC como Barrionuevos De Pie responden, en teoría, a Hermes Binner. Y sumemos el imprescindible aporte del grupo Pabellón: Barrionuevo, Pedraza, Zanola, Venegas.
El avión privado de Moyano aterrizó en Rosario, acompañado por los sindicalistas Omar Viviani y Omar Viviani. Estaban, además de Omar Viviani, Omar Viviani. Pero para que no queden dudas del fuerte respaldo de la CGT a Moyano, estaban presentes Omar Viviani, Omar Viviani y Omar Viviani. El discurso, en la zona industrial de las afueras de Rosario (en San Lorenzo) fue escuchado por los seguidores del secretario general de la CGT de San Lorenzo, el trotskista Quiroga. En la provincia de Hermes Binner.
Se le complica, al gerente, el activo más preciado entre el neoperonismo indie: ser peronista de Perón e Isabel. Para reemplazarlo, por los más tiernos, Hermes y Bonfatti. Negoción.  Demasiado bueno el negoción y demasiado obvio. Zanola le podría aconsejar al respecto.
La enunciación del gerente siguen siendo "los trabajadores", pero como los trabajadores de carne y hueso no tienen posibilidades de elegir al gerente o a cualquier integrante de su familia -no hay elecciones en esos gremios, a diferencia, por ejemplo, de ATE, del ATE de Pablo Michelli- dividir el capital político, ni más ni menos que con Cristina, es una apuesta, tulipanes, de altísimo riesgo. Pero el poder corporativo también cruje. Básicamente porque el gerente le afanaba (en buena ley, reconozcamos) afiliados a los sindicatos amarillos que ahora fungen de aliados. Poco consecuentes. Pero aliados al fin. Hasta nuevo aviso.
Legítimamente, los trabajadores de gremios amarillos -que al igual que con los tres mosqueteros, no pueden elegirlos- querían, pasivamente, cambiar de sindicato, de paritaria y de obra social. Sea al del gerente, hoy en manos de Samid hijo, o al de Pablito Ruiz, el Wachiturro. Porque funcionan, para regocijo de la pastoral social, en tánden: uno te atropella con el camión, el otro pide peajes y el gerente sobrevuela las mundanidades, en su avión privado. Pero consiguen salarios altos, beneficios laborales y, también, sí, prestigio para la clase obrera que representan. La distribución del prestigio es también una deuda social. De la totalidad de las fuerzas culturales; pero principalmente del gobierno. Y este gobierno ha hecho mucho en ese rumbo, se debe reconocer, tanto como reconocer que la trayectoria de Moyano, Hugo, también.
Los Moyano tienen, en su haber, una capacidad sindical mayor que el promedio de los sindicatos autoritarios. Mejores números. Kirchnerismo básico, digamos. Mérito que ahora salen a disputar con el gobierno. Espero, de todo corazón, que les vaya mal.
El kirchnerismo tiene el desafío de construir una mediación más presentable que Moyano. Hoy, entre lo real disponible, no es fácil. El desafío, tulipanes, está lejos ya no de concretarse, sino de plantearse. Por lo que puede oírse.
Esa mediación a construir es imposible plantearla hacia los afiliados cautivos que tienen los tres mosqueteros sin que se resquebraje toda la CGT. Porque, tulipanes delicados, el gerente, Samid hijo y Pablito Ruiz, el Wachiturro, siguen siendo lo mejor de la CGT. Asi de bajo es el piso, tan bajo que hasta yo me lo tropiezo.
¿No será porque Hugo afanaba afiliados que el grupo Pabellón no es un aliado consecuente ahora? ¿Y no será por esa razón que la Familia Moyano SA se acercó a los binneristas?
El costo, simbólico, es quedarse sin el peronismo de Perón e Isabel, o Perón y Evita, o Perón evita la Patria Socialista y la evita porque quiere la Patria Peronista. 
Moyano, el gerente, es para colmo (encima de negro, peronista, sindicalista, anti Clarín y anti menemista) evangelista. Ciertamente que de avanzada, por ejemplo, estuvo a favor del matrimonio igualitario.
Las provocaciones de Capitanich y Urribarri, donde utilizaron la iglesia romana como excusa para sus apetitos personales, no lo acercan, a eso iba. Y el favorcito de Scioli (un empujón a quien mira el abismo), su ex adversario hasta que renunció al PJ, menos.
Se cierran los caminos.
Pero tienen, los Moyano, la principal carta: los otros nuevos aliados de la CGT son en promedio muchísimo más berretas e impresentables. Alejarse del grupo Pabellón, pero...¿para recalar en el binnerismo, o al lado de Scioli?  Significa, en los intestinos, romper o dejar al borde la ruptura las alianzas tejidas por los Moyano con el Movimiento Evita y con los partidarios de Luis Delía.
Obligarlos a romper. Quitarles su razón de ser. Quedarse, repentinamente, solos. Malheridos. Y con medicamentos truchos como consuelo.
Barrionuevo diría que es un mal negocio.
Y Barrionuevo de negocios, sabe.

6 comentarios:

  1. q bueno, lucas...q buen post... q lúcido!! frescoabrazo de agua

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  2. Las tensiones son lógicas en la vida en sociedad, más en este contexto internacional. El tema es el reconocimiento de quién debe arbitrar. El Estado, claro. Que es la posición que adoptó el kirchnerismo y Cristina. Sobre todo ahora, con la legitimidad de octubre. Algo que Moyano hace mal en discutir, cuando quiere ponerse al nivel de CFK llamando "chirolitas" o "che pibes" a los que estén del vicepresidente para abajo.

    Lamentablemente, como decís, en la CGT es lo mejor que hay. Y si lo que quiere es una foto con CFK, hay mejores maneras de hacerlo. Y sin vulnerar la imagen de la Presidenta. Se haría un favor también, si lo que quiere es hacer política.
    Además, no jodamos, yo lo respeto a Moyano, pero a Vandor no le llega a los talones. Y a Lula, menos.

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  3. Así que todos los sindicalistas peronistas de la CGT o responden a Binner (Barrionuevo) o se acercan a Binner (Moyano)? Largá de lo que sea que estés tomando.

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  4. naaaa, cómo podes escribir así! apoteótico... quiero más
    sld

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  5. Asi pasa con los progres, cuando empiezan a aparecer los negros se tapan la nariz

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  6. Che... ¿Ana te trató de "progre" ó lo dice por Cristina?! Abrazo, muy interesante el post!

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