De la sumatoria de errores estratégicos se organiza el derrotero fugaz de la derecha: la apuesta a la nostalgia por lo que nunca sucedió crea la psicosis absorbente para vivir flotando en un microclima. Eso es, hoy, la derecha.
Su incapacidad de reconocerse como derecha tiene antecedentes en la nube de olvido necesita obligatoriamente para soportar la nueva direccionalidad organizativa nacional y regional: la aceptación de la democracia.
El pasado de nuestra derecha es de verde oliva. Es la aceptación, típicamente radical conservadora, de la impotencia atenuadora de la política. Esa sensación, tan radical y burocrática, de que el poder está en otra parte. Da cosita que aún no se hayan percatado del cambio de escenario. Que lleva un tercio de siglo.
Pero también tiene la derecha otra fuente de incomodidad para reconocerse como tal: su paso a la antipolítica. Que conecta, para establecer el trípode causal de su negacionismo identitario, con la tercer causa: el único programa de gobierno es el rechazo, por razones morales o de cualquier otro tipo antipolíticamente correcto, lo que deriva, por el peso de la hechura social, en la reivindicación culposa, a menudo limpiada de prontuarios, de la década del 90.
Así, la derecha que no fue pero será, busca, digámoslo con ternura, su lugar en el mundo. Que en Argentina aún no encuentra. Como aconsejaban los antiguos camaradas de la izquierda incomprendida, "si el pueblo no nos entiende, es hora de cambiar de pueblo"
Es interesante que, ahora que la derecha encontró lo que en los manuales debía ser su sujeto social, en los cacerolazos hay un hartazgo latente por un conjunto desorganizado de presupuestos que orbitan, fundamentalmente, en el pucherito táctico de los medios de comunicación dominante, sustancialmente en el ex Partido Clarín, y eso deriva en una masa informe sin posibilidad de representación pero que, en los papeles, puede derivar en la masa necesaria como plataforma de arranque de una alternativa de derecha.
Que, como ahora le toca ser oposición, tampoco puede crearse en el vacío, sino en el antagonismo legítimo, y esperemos que institucionalmente válido (no hay que hacerse muchas esperanzas) pero que también requiere cierto grado de autobombo y microclima, que es la energía sectaria necesaria para la potencia de cualquier movimiento con capacidad de gobernanza.
Por ahora, son una pelota de trapo.
En cancha chica. Con demasiadas pretensiones Con la impunidad responsable de quien sabe que nunca jugará un partido en serio. Por ahora.
Todo indica que las relaciones de fuerza nunca son estáticas ni previsibles y que su congelamiento, en el análisis, es un error de perspectiva.
Su incapacidad de reconocerse como derecha tiene antecedentes en la nube de olvido necesita obligatoriamente para soportar la nueva direccionalidad organizativa nacional y regional: la aceptación de la democracia.
El pasado de nuestra derecha es de verde oliva. Es la aceptación, típicamente radical conservadora, de la impotencia atenuadora de la política. Esa sensación, tan radical y burocrática, de que el poder está en otra parte. Da cosita que aún no se hayan percatado del cambio de escenario. Que lleva un tercio de siglo.
Pero también tiene la derecha otra fuente de incomodidad para reconocerse como tal: su paso a la antipolítica. Que conecta, para establecer el trípode causal de su negacionismo identitario, con la tercer causa: el único programa de gobierno es el rechazo, por razones morales o de cualquier otro tipo antipolíticamente correcto, lo que deriva, por el peso de la hechura social, en la reivindicación culposa, a menudo limpiada de prontuarios, de la década del 90.
Así, la derecha que no fue pero será, busca, digámoslo con ternura, su lugar en el mundo. Que en Argentina aún no encuentra. Como aconsejaban los antiguos camaradas de la izquierda incomprendida, "si el pueblo no nos entiende, es hora de cambiar de pueblo"
Es interesante que, ahora que la derecha encontró lo que en los manuales debía ser su sujeto social, en los cacerolazos hay un hartazgo latente por un conjunto desorganizado de presupuestos que orbitan, fundamentalmente, en el pucherito táctico de los medios de comunicación dominante, sustancialmente en el ex Partido Clarín, y eso deriva en una masa informe sin posibilidad de representación pero que, en los papeles, puede derivar en la masa necesaria como plataforma de arranque de una alternativa de derecha.
Que, como ahora le toca ser oposición, tampoco puede crearse en el vacío, sino en el antagonismo legítimo, y esperemos que institucionalmente válido (no hay que hacerse muchas esperanzas) pero que también requiere cierto grado de autobombo y microclima, que es la energía sectaria necesaria para la potencia de cualquier movimiento con capacidad de gobernanza.
Por ahora, son una pelota de trapo.
En cancha chica. Con demasiadas pretensiones Con la impunidad responsable de quien sabe que nunca jugará un partido en serio. Por ahora.
Todo indica que las relaciones de fuerza nunca son estáticas ni previsibles y que su congelamiento, en el análisis, es un error de perspectiva.
Neomenemista borracho... estrañas el Uvita Fiesta a $2??
ResponderBorrarCarrasco tenia 15 años, jaja. Igual a esa edad alguna cervecita yo me tomaba.
BorrarChe ANOnimo de las 20:15 algún argumento para refutar el articulo de Carrasco? También yo le pido peras al olmo...
BorrarEste daniel es insoportable, no te cansas de chuparle la verga al borracho?
BorrarEstás esperando un gesto de amor acaso luego de tanta agachada? sos igual que todas las putas al final...
Y vos carrasquito, discapacitado mental, decís que trabajás como periodista pero sos un cero a la hora de escribir. Tenés cero manejo de la sintaxis. Donde estudiaste, en TEA?
Carrasco se refuta solo.
BorrarLoco... te banco.
ResponderBorrarAguante vos.
Ja. Un abrazo
BorrarLoco que te pasa?
ResponderBorrarHacete cargo de la condena de alguna vez haber sido o ser brillante y estirar un pleonasmo como para llenar un hueco.
Te lo tiro desde el corazón,he leído post tuyos que me hicieron vibrar.
A mi a veces la realidad me pasa por encima y no hay antídoto para para el síndrome,salvo la voluntad de no sentirse aplanado te da fuerza para tomarla de los cuernos y voltearla.
Vamos Luquita,tranquilo,vos podés a favor de todos con la mesura que te da tu impronta agitar esas mentes febriles a la sana discusión,a la mayéutica socrática que nos hará libres.
Un Abrazo
Me parece que esa teoría de que los pueblos que viven en zonas frías producen mas. Quiero leer el texto y me tropiezo con la calor y los sesos. Estoy para los escritos melacónlicos de Carrasco. La derecha tiene mucho escrito. Jerarquias, propiedad privada y azotes. No se por qué me acordé de los mensú de Horacio Quiroga.
ResponderBorrarTiti Fernandez y Benedetto votaron a Cristina. Te lo firmo.
ResponderBorrarNo te estarás enroscando mucho borracho?
ResponderBorrarNo tendrás algunos mieditos que te hacen girar sobre tu eje?
No, no?
Hablando del cuco de "la derecha" y "la oligarquía" cuando hacemos asado en el rancho de Máximo???
ResponderBorrarNo??? A nosotros no nos invitan??? Solo para hacer bulto sirve la plebe????
Otro gil q se fuma Magnetto y Fontevecchia Y SE LA CREE; JE, dale mandemonos al rancho virtual d Maximo en Zarate, eso si vas a tener q kedarte parado durante la visita, pinta q a pesar d haber pasado un año desde el 23 d octubre todavia seguis sin poder sentarte con el 55,4% d Cristina en el orto, je
BorrarEstas enojada? Como Cris.
BorrarNo se entiende, todo esta tan bien y siempre esta desequilibrada y enojada.
Raro.
DEJÁ DE PLAGIAR A SABINA, CARRASCO. QUE TE QUEDA GRANDE.
ResponderBorrarpara mí que los anónimos que putean a Cristina, la tratan de loka desequilibrada y demás, con sus novias/mujeres/ son lo más impotentes, son impotentes. Muy bueno el post. Comparto.
ResponderBorrarla derecha, la derecha...
ResponderBorrarno tiene sentido dedicarle tanto espacio a un grupo de 22 personas
yo fui una vez a un acto conservador, que gritaban "Viva Fresco!" y todo... eran 3 de lobos, 2 de mercedes, 1 de rodriguez... ponchos, lindas herederas...
una güevada 0 gravitancia en el devenir de Argentina
que mal analizado todo. Es como si se estuviera jugando un partido de futbol y en la tribuna hay dos pibes jugando a la payana.
ResponderBorrarY te dedicaras a ver y comentar el juego de payana
Según donde uno pone el origen del relato, se justifica algo
Ejemplo:
el pasado de la derecha es verde oliva.
No es así.
¿y las décadas de modelo agroexportador? y la abuela de mi suegra que cargaba los 5 chicos en la bodega del barco y venia año trs año a trabajar en noviembre y se volvia a Italia en marzo? (con guita) y compraba un pedazo mas de tierra?
y las guerras y la rebelión de las masas
y los radicales y la comprension de los conservadores de que nunca mas van a mojar culpa de la ley saenz peña, culpa de la democracia
y el golpe de 30
y la decision diabólica y maricona de la Suprema Corte de que todo lo que hagan en materia de decretos los milicos vale como leyes
y el crear y traer industria nacional
y el ponerse obsoleta esa industria, llenarse de acomodados, no poder crear una industria pesada de base
y la apertura de la economia
y el volver a empezar ahora con el modelo agroexportador de nuevo....
esos son los grandes temas, los grandes hitos
mucho mas serio que decir: "este es malo por eso hace cosas malas... este es bueno, por eso hace cosas buenas"
que no da ni para el jardin de infantes