viernes, abril 26, 2013

Me quiero irrrrrrrrrrrrrrrr (1)



La tarjeta SUBE ya es parte del sentido común metropolitano -naturalmente, al resto del país estas cosas no les llegan, reforzando tanto la desigualdad entre provincias ricas y pobres como la desigualdad entre trabajadores migrantes hacia las periferias del puerto y los habitantes del puerto (que tienen los aviones subsidiados a Miami, al sur, a Bariloche, a Cataratas, sistema de subsidios que no utiliza la SUBE y que se nutre de recursos del sistema impositivo regresivo. Esto, cuando Mariano Recalde, aún haciendo una buena gestión. tiene que soportar los ataques de la derecha que en el fondo reclama la reprivatización. Recalde hereda un sistema aéreo infinitamente más regresivo. Que la presidenta le de centralidad a la aerolínea de bandera, que el Congreso y los gobernadores apoyen razonablemente la gestión, es más que un punto de partida, es un avance enorme)- y en en un tiempo relativamente rápido. No hace falta recordar los agoreros. Para qué. Falta, nomás, que repensemos la idea que nosotros mismos nos hacemos del estado. De sus posibilidades, anhelos y alcances.
¿Porqué tengo que pagar -con las naturales y escandalosas comisiones- un pasaje aéreo con una tarjeta de crédito privada y el tren con la SUBE? Se puede avanzar ahí.
La SUBE hay que pensarla como parte de los mecanismos financieros.
Incluso, para integrarla con otros mecanismos financieros, altamente valorables, creados por esta misma gestión. La tarjeta que creó Polémico Moreno -que a la postre resultó más eficaz para regular el sistema financiero privatizado y regresivo, que la reforma de la Carta Orgánica del Banco Central, donde está paveando y haciendo cagadas Mercedes Marcó del Pont.
Lean ésta nota. 
Es Clarín, más vale. Si siguen aumentando la tipografía de las letras catástrofe sólo se va a poder entrar a la web desde la pantalla de los cines, pero Daniel Fernández Canedo me parece un opositor razonable. Y el dato de que las reservas bajaron, en relación al PBI, a la mitad en dos años es escalofriante.
Siguiendo la moda de yuppies boludos, faranduleros y analfabetos políticos al frente del Ministerio de Economía, Hernán Lorenzino podría contrarrestar el razonable planteo de Fernández Canedo  -muy parecido al más serio economista Alejandro Bercovich (no sé si se escribe así) en la revista Crisis, que denomina a la falta de insturmentos de ahorro para la clase media alta como capitalismo punk- planteando que existen instrumentos de ahorroa con credibilidad política en un segmento del mercado que nos detesta (a los kirchneristas) como los bonos YPF. Que la inflación es reconocida por la presidenta, que no habla del tema para no agrandar expectativas, por que es lo que históricamente conviene a nuestro país, pero que en los hechos ésto se reconoce a través de los aumentos jubilatorios por ley, de la Asignación Universal por Hijo (por decreto) y del alcance normal de las paritarias al interior del estado, que volvieron gracias a éste gobierno.
Volvamos al asunto del tamaño del estado.
Recomiendo esta nota de María Esperanza Casullo en Artepolítica. Y me voy a almorzar, después hago una segunda parte. O tercera y cuarta. Si supieran lo que estoy cocinando...cuánto me quiero, dios mío, es mucho.  Buenas noches.

4 comentarios:

  1. es q el tema de la inflacion es complejo...porque si bien le come el bolsillo al laburante, tambien le escatima intereses a los acreedores y ese ahorro vuelve en obras y servicios(a veces). pero eso no lo puede salir a decir Lorenzino.

    eso no quita que sea un boludo por no anticipar la pregunta y tener una respuesta preparada y por no avivarse que hoy en dia siempre hay un microfono prendido...

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  2. Esta buena tu propuesta de la SUBE, Carrasco, la verdad que es la primera vez que la escuchó y tiene mucha lógica. El tema es que al hacer eso, estarías atentando directamente contra los negocios directos de la Banca Privada, que ha sido uno de los grandes apoyos oligárquicos de los gobiernos kirchneristas. Hay que ver si se atreven a llevarse a esos amigos puestos (que son los que en 5 años fugaron 70.000 millones dolares al exterior y ahora pedalean el dolar blue, aunque no los nombran ni Clarín, ni 678. Parecería que la banca privada en este país simplemente es el tipo simpático del banco francés que pelea a la fabrica de ropa para descuento los martes y jueves). Repito, tu idea es muy buena sobre la SUBE. Coincido en que el aparato financiero es un recurso estratégico para un país, que debe ser aplicado para el desarrollo de la sociedad y sin animo de lucro. Debería ser estatizado, no solo a nivel nacional, sino también regional e interconectado.

    Con respecto a Aerolineas: no prejuzguemos la gestión, el día que se presenten los balances veremos que es lo que están haciendo. La empresa debe ser totalmente estatizada, no hay dudas de eso. Un país debe tener si o si una aerolínea de bandera y esta debe ser una de las mas importantes en el mercado. Es otro recurso estrategico. Que hay señales graves sobre la gestión de recalde, no hay dudas, sobretodo lo que tiene que ver con los trabajadores. Igualmente no hay que dejarse llevar por las opiniones idiotizantes pro-privatistas. Lo cierto es que mantener aerolíneas le cuesta al estado la mitad de lo que cuesta el programa de AUH. Más los subsidios a Miami y Bariloche de los que hablas. Lo que digo, no hay que prejuzgar. Aunque si esta mal que siendo ya una empresa estatal, esta no presente balances, sobretodo consumiendo la cantidad de recursos que consume. Ya se, es decisión política. Pero porque tanta incapacidad cronica por parte del gobierno para consensuar cosas, al menos las mas minimas, como el simple hecho de tener una linea de bandera. Hoy tenes a toda la clase media prostituta pidiendo que se reprivatize. Tanta animosidad estupida para las cosas lo unico que genera es bronca, y cuando venga la derecha no va a tener resistencia para borrar con el codo lo que el kirchnerismo hizo con la mano. una garcha.

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  3. Olvidate un momento de la clase media alta. Olvidate de los gorilas, los destituyentes, los Pro, olvidate de esos.
    Y decime cómo uno puede ahorrar para un futuro. Cómo puede acceder a una vivienda -y no seguir viviendo con los viejos a los 30-. (No me digas el plan Procrear).
    Decime algo más sencillo que los bonos YPF, de paso. Algo no sofisiticado.

    Y por un momento recuerden que hay gente que no necesita la AUH, pero que no es clase media alta. Que quizá solo sea clase media baja. O media media baja. A la que desanimaría mucho saberse condenada a seguir siéndolo por el resto de sus días.

    Sobre todo cuando ve casos de movilidad social ascendente tan vertiginosos como la hija del colectivero, o el ex cajero del banco de Santa Cruz.

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