Cómo entender esta elección

Visto desde una fuerza política con pretensiones nacionales, como el cristinismo (que acaba de desintegrarse como tal, desde el momento en que quedó claro que los Sin Votos chatean con los Con Votos pero no pasa de ahí) la dispersión propia no se remedia en la dispersión ajena. La de la oposición. Por un dato muy simple: solamente en los monopolios de Herrera y Fernández hay necesidad de homogeneizar la oposición, unos para ganar el aparato nacional en 2'15, los otros, por la misma razón pero para ellos.
Se eligen tres diputados nacionales de piso por provincia y tres senadores en cada distrito. Los senadores representan las provincias, cosa que los portuarios, como usan el gobierno nacional de intendencia y a la intendencia real le echan la culpa de la ñpobreza, no entienden. Por eso deliran con sus candidatos presidenciales que después quedan en la nada.  Los diputados nacionales sí representan la Nación, pero no son elegidos por distrito único. De manera que, de acuerdo a lo que la familia presidencial quiso instalar, es Cristina la ordenadora ideológica. En cada distrito. Ganó en la mitad, perdió en la otra mitad, que incluye los distritos grandes, dato sí relevante para las aspiraciones, anteriores a que se vote, de continuar con el aparato del estado nacional pagándole los aviones y demás necesidades legítimas para cualquier jeque árabe que anda vendiendo la privatización de sus pozos petroleros. Como acá.
Las pavadas que dijo Juliana Di Tullio, la falta de una figura como Agustín Rossi, la aclaración de Máximo Kirchner de que a él la militancia y todo eso le chupa un huevo, la presidencia chistosa de Boudou, la ausencia de Cristina, muestran un panorama legislativo complicado.
En 2009 muchos analistas opositores vaticinaban un masivo cruce de bancadas, no ocurrió. Estaba Néstor Kirchner, el kirchnerismo tenía dos candidatos presidencial y quien había vencido a Néstor no podía ser candidato a presidente, pues nació en Colombia.
Massa, por ejemplo, estaba encolumnado, Scioli también.
Pero, sé que quienes viven contratados por el gobierno nacional están ansiosos de hablar de la sucesión por su situación laboral, además de la defensa de los derechos humanos, la Asignación Universal por Petrolera y los duendes y el arco iris.
Bien, para mí, este resultado mirando cada distrito, abre el panorama para que después de De La Rúa, radical, y el actual presidente, UCEDE, gobierne el país una fuerza no peronista.
No es mi deseo, es lo que la realidad manda como dato: sin liderazgos nacionales, el peronismo va a la división agravada (es decir, con división con fragmentación interna) y el hartazgo que genera culturalmente el cristinismo, más su agravamiento económico, crea esas condiciones.
De ahí a que esto se de, no lo se. Pero el año que viene va a ser muy desgastante para el cristinismo y el resto del peronismo. Entre otras cosas, porque los trabajadores existen. Y no tuvieron una buena noticia el domingo. Ni el lunes, cuando Cristina -¿apoyamos lo bueno, culpamos a otro de lo malo?- eliminó los kirchneristas controles de capitales.
Mientras tanto, en la revista Caras, órgano cristinista como supo serlo con las familias de Menem y De La Rúa, nos muestra el Duhalde Insustancial, el jesicastrense que gobierna, es un decir, Lomas de Zamora. A punto de irse a Miami.
Compárenlo con Néstor Kirchner