Gracias, Gordo Motoneta, corazón! GRACIAS: sé que lo hiciste de puro corazón, por pura beneficencia. Ayer contaste en Twitter que hablaste con un funcionario del Gobierno Nacional (lo nombraste, comprovinciano y amigo) para que intenten ayudarme echándome de mi trabajo.
Tu plan caritativo era perfecto: lástima que te respondió que yo no soy funcionario, ni integro este gobierno.
El otro detalle de tu plan perfecto, altruista Gordo Motoneta, es que no te vas a poder hacer una campaña de victimización. Es una pena que te salga mal: porque vos sos un gordo inflado de amor, corazón.
Sensible y altruista, Gordo Motoneta, lástima que ayer estabas sacado PERO MUY SACADO contra mí, un montón de insultos, calumnias, fabulaciones, pero, Gordo Motoneta, a las 6 de la mañana todavía no contaste lo de la nota de Máximo, que no sé si sale hoy o mañana o la guardarán.
Sí, la nota que van a sacar sobre Máximo Kirchner, la que arreglaron conmigo, como fuente, la semana pasada.
Para reunirnos.
Y pasó esto y lo otro, Gordo Motoneta. Qué cosa, Gordo Motoneta, te paseé, a tus secuaces, los que me mandaste a organizar un almuerzo con vos, Gordo Motoneta, mientras conté una historia de que anduve alocado por ciudades del conurbano durante tres días, Gordo Motoneta, les contaba a los de la editorial porqué no pude cumplir con la entrega a tiempo de mi novela.
Gordo Motoneta, inventé una historia sugerentemente inmoral, perdido en Ciudadela, de ahí a la villa La Matera, en Solano, y una plaza de Quilmes y un señor bajo el puente de Liniers.
A tus mandaderos, Gordo Motoneta, los que me mandás para ofrecerme trabajo, Gordo Motoneta, les conté otra historia, inmoral, claro, bien para tu cabeza podrida de archivar tus frustraciones, de un trío, en mi casa.
Oh, Gordo Motoneta, tu jefe de política de Libre, Gordo Motoneta, y vos, Gordo Motoneta, me contaron que cierran el jueves, la Revista Noticias, Gordo Motoneta. ¿Porqué, Gordo Motoneta, el jefe de Política de Libre, el que vos me mandás a ofrecerme trabajo, me habla de "un pibe de Noticias", nota sobre Máximo, no la hace un pibe, vamos Gordo Motoneta, no tienen una puta fuente, Gordo Motoneta, te diste cuenta a la tarde que te estaba paseando hasta que llegue el cierre y después, Gordo Motoneta, reírme de vos, Gordo Motoneta.
Y mostrar cómo fabulás, Gordo Motoneta. Fijate la hora, Gordo Motoneta. porque yo sé, Gordo Motoneta, que los carpetazos te los venden (en realidad, te pagan por publicarlos) ex agentes echados por delincuentes y con pedido de captura, de esos miserables, que a vos te gustan.
Te encantan. Encima, Gordo Motoneta, los de Libre que me mandaste el jueves, te contaron que me iba a Paraná. Necesitaba estar en muchos lugares, para que varios se rían y te conozcan. Darío Gallo, Gordo Motoneta, a ver si te queda claro: tus ataques de ayer, de esa vulgaridad tan peligrosa de los Oscuros cuando se ponen nerviosos, para después retroceder, los entendí perfectamente, Gordo Motoneta. Me avisabas. Necesitabas la foto.
Los rumores, las fotos de las reuniones, algo cierto para sostener alguna canallada, ya veremos cuál (ay, está hecha ya la tapa...) y no existe nada.
Sí, la nota que van a sacar sobre Máximo Kirchner, la que arreglaron conmigo, como fuente, la semana pasada.
Para reunirnos.
Y pasó esto y lo otro, Gordo Motoneta. Qué cosa, Gordo Motoneta, te paseé, a tus secuaces, los que me mandaste a organizar un almuerzo con vos, Gordo Motoneta, mientras conté una historia de que anduve alocado por ciudades del conurbano durante tres días, Gordo Motoneta, les contaba a los de la editorial porqué no pude cumplir con la entrega a tiempo de mi novela.
Gordo Motoneta, inventé una historia sugerentemente inmoral, perdido en Ciudadela, de ahí a la villa La Matera, en Solano, y una plaza de Quilmes y un señor bajo el puente de Liniers.
A tus mandaderos, Gordo Motoneta, los que me mandás para ofrecerme trabajo, Gordo Motoneta, les conté otra historia, inmoral, claro, bien para tu cabeza podrida de archivar tus frustraciones, de un trío, en mi casa.
Oh, Gordo Motoneta, tu jefe de política de Libre, Gordo Motoneta, y vos, Gordo Motoneta, me contaron que cierran el jueves, la Revista Noticias, Gordo Motoneta. ¿Porqué, Gordo Motoneta, el jefe de Política de Libre, el que vos me mandás a ofrecerme trabajo, me habla de "un pibe de Noticias", nota sobre Máximo, no la hace un pibe, vamos Gordo Motoneta, no tienen una puta fuente, Gordo Motoneta, te diste cuenta a la tarde que te estaba paseando hasta que llegue el cierre y después, Gordo Motoneta, reírme de vos, Gordo Motoneta.
Y mostrar cómo fabulás, Gordo Motoneta. Fijate la hora, Gordo Motoneta. porque yo sé, Gordo Motoneta, que los carpetazos te los venden (en realidad, te pagan por publicarlos) ex agentes echados por delincuentes y con pedido de captura, de esos miserables, que a vos te gustan.
Te encantan. Encima, Gordo Motoneta, los de Libre que me mandaste el jueves, te contaron que me iba a Paraná. Necesitaba estar en muchos lugares, para que varios se rían y te conozcan. Darío Gallo, Gordo Motoneta, a ver si te queda claro: tus ataques de ayer, de esa vulgaridad tan peligrosa de los Oscuros cuando se ponen nerviosos, para después retroceder, los entendí perfectamente, Gordo Motoneta. Me avisabas. Necesitabas la foto.
Los rumores, las fotos de las reuniones, algo cierto para sostener alguna canallada, ya veremos cuál (ay, está hecha ya la tapa...) y no existe nada.
Y mientras estaba haciendo un trío en mi casa de Palermo y con Luigi y Cyru en la costanera de Paraná y TAMBIÉN, además de esos dos lugares, fooooo, los chicos de Libre que me siguen en Twitter no lo notaron, bue, pobres, el Gordo Motoneta me amenaza con carpetazos, y los buitres se comen el personaje, salí por primera vez en días (estaba escribiendo, reescribiendo, la novela que hace años reescribo: se llama Las Pelirojas y la terminé hoy, después de días sin salir de casa) un rato al bar de la esquina de mi casa, donde están los cuidacoches que me cuentan lo que pasa en el barrio. Estaba en tantos lugares, Gordo Motoneta, estás acostumbrado a extorsionar putitas en moteles, estás acostumbrado a creer que conocés los resortes de la perversión, a que todos quieren "arreglar", a que ofrecés buen trato a cambio de datos, a que la amenaza de un carpetazo, a la eficacia de fabular. Gordo Motoneta, te metiste conmigo, Gordo Motoneta, te metiste conmigo, y te divertiste en Twitter porque estoy solito.
Vos escribiste, Gordo Motoneta, que La Cámpora me detesta y ridiculiza. Gordo Motoneta, está en tu Twitter, no trates de borrarlo, Gordo Motoneta, porque es obvio que los guardé, no confío ni un tantito así en que no le busques la vuelta para concluir que hay un montón de fuerzas del diablo desatadas confabulándose contra los valores INMENSOS Y PUROS, que vos, extorsionador de telos-redacciones, vendrías a representar.
Porque, Gordo Motoneta, y aprovecho para decírtelo, porque capaz que tu emisario no te fue lo suficientemente claro, me importa un pito que tengas los senos como magnolias o como pasas de higo, pero a vos, forro, no te voy a perdonar la canallada que le hiciste a Pablo Ferreyra.
Vos escribiste, Gordo Motoneta, que La Cámpora me detesta y ridiculiza. Gordo Motoneta, está en tu Twitter, no trates de borrarlo, Gordo Motoneta, porque es obvio que los guardé, no confío ni un tantito así en que no le busques la vuelta para concluir que hay un montón de fuerzas del diablo desatadas confabulándose contra los valores INMENSOS Y PUROS, que vos, extorsionador de telos-redacciones, vendrías a representar.
Porque, Gordo Motoneta, y aprovecho para decírtelo, porque capaz que tu emisario no te fue lo suficientemente claro, me importa un pito que tengas los senos como magnolias o como pasas de higo, pero a vos, forro, no te voy a perdonar la canallada que le hiciste a Pablo Ferreyra.