miércoles, noviembre 11, 2009

Duhalde y Carrió: qué dijeron en el juicio




Por Raúl Degrossi


 1. “Aunque quiera utilizar otras palabras para disimular, a mi la doctora Carrió no me engaña: estaba hablando del faso.” (Eduardo Duhalde, en la audiencia en tribunales por la querella contra la líder de la Coalición Cívica)

2. “Aunque el doctor Duhalde se ofenda, hay verdades que no pueden ser calladas y que mi conciencia republicana me reclama decir con toda claridad: tiene una cabeza enorme.” (Lilita Carrió, en la misma audiencia)

3. “Desde las entrañas mismas de la tierra, se está gestando el argentinazo, la revolución socialista que ha de liquidar el sistema capitalista.” (Jorge Altamira, dirigente del Partido Obrero, analizando en su columna de Prensa Obrera el conflicto del subte)

4. “El Estado no puede resignar el control del espacio público, y debe garantizar el libre tránsito de los tanques para hacer su trabajo.” (Mariano Grondona, en su columna de La Nación titulada: “Los piqueteros impiden el retorno de las verdaderas instituciones de la República”)

5. “Si siguen sin cumplir el acuerdo van a ver, les voy a afiliar a los camarógrafos y les meto los camiones en los estudios de TN.” (Hugo Moyano)

6. “Este proyecto aberrante no solo atenta contra la ley de Dios, sino que puede inducir a la confusión a muchos hermanos nuestros en el episcopado, que pueden sentirse tentados de abandonar su ministerio con la falsa esperanza de formar una familia, en lugar de canalizar esas energías en otros fines gratos al Señor, como crear fundaciones para los niños.” (Jorge Bergoglio, arzobispo de Buenos Aires, sobre el proyecto de ley de matrimonio entre personas del mismo sexo)

7. “Que De Narváez se quede tranquilo y no se victimice, el arresto por vagancia no tiene nada que ver con los diputados que nunca van al Congreso.” (Daniel Scioli)

8. “Disculpe que lo haya hecho venir hasta esta plaza para que charlemos monseñor, pero la verdad tenía miedo que hubiera micrófonos en el confesionario.” (Gabriela Michetti)

9. “El grado de represión sexual que hay en este país es terrible, ya ni los gays, lesbianas y travestis consiguen que los apoyen.” (Moria Casán, sobre el fracaso del proyecto de ley de matrimonio entre personas del mismo sexo)

10. “¿Así que para extraerte ADN entran catorce tipos a tu casa y te desnudan?, ¿sabés que ahora que lo pienso, yo podría ser hija de desaparecidos?” (Silvia Suller, sobre las polémicas declaraciones de Fernanda Gil Lozano, diputada de la Coalición Cívica)

11. “Yo les pido a los diputados que sean valientes y bajen al recinto a afrontar el debate, que no se anden escondiendo detrás de los cortinados, y de última si ahí está la partuza, que inviten.” (Carlos Jáuregui, líder de la Comunidad Homosexual Argentina)

12. “Yo candidato a presidente nunca más, ya escarmenté, después empiezan a aparecer los videos raros, y de solo pensar verla a Chiche Duhalde en bolas o en una lucha en barro con Lilita Carrió, me corre un frío por la espalda.” (Carlos Reutemann)

Háganse cargo: nos toman por pelotudos


Por Raúl Degrossi

Háganse cargo de su fascismo visceral, ese que ve en todo pobre a un delincuente, y en la represión, la solución mágica a todos los problemas de la sociedad
Háganse cargo de esa lacra que arrastran , y no nos abollen más los oídos con la sanata del diálogo y el consenso, ya aprendimos que significan balas y palazos.
Háganse cargo de su golpismo, de su actitud antidemocrática y de su intolerancia hacia todo gobierno que no sea el que ustedes eligen o apoyan, y a veces ni eso, como pasó con De La Rúa, y no nos hinchen más las pelotas a todos con fingidas apelaciones a la república y las instituciones.
Háganse cargo de su moral doble, que tira los papeles al cesto de basura en Europa y llena el conurbano de residuos acá, y reclama servicios estatales de Suecia mientras paga impuestos de Namibia.
Háganse cargo y no jodan más con la corrupción de los gobernantes, actuales y pasados, como si ustedes fuesen ciudadanos ejemplares, y no usen más esa corrupción como un atajo para evadir, tener empleados en negro y sacar la guita del país hacia algún paraíso fiscal.
Háganse cargo de su fastidio con la democracia, y no suspiren más en público por la aparición de algún líder republicano de modales escandinavos, cuando en lo íntimo todavía lamentan que Videla esté preso, y sus camaradas de armas no sean un actor político protagónico.
Háganse cargo de su verdadero modo de pensar, no se disfracen como furiosos comentaristas anónimos en los diarios, mientras se pasean por reuniones sociales y programas de televisión como atildados demócratas preocupados por la transparencia y el futuro de las instituciones.
Háganse cargo, por una vez en su vida, de lo que son, de lo que piensan, de lo que hacen, de lo que votan, de lo que dicen y de lo que otros dicen y hacen en su nombre.
Háganse cargo de todo eso y no se pongan más en el papel de víctimas, de simples ciudadanos preocupados por la inseguridad, de personas sensibles con la pobreza o de almas bellas despojadas de todo afán de acumular bienes materiales y acongojadas por la falta de libertad de expresión.
Háganse cargo de que, en realidad, les importan un carajo la democracia, la república, la libertad de expresión, las instituciones, la voluntad popular, la pobreza, el clima de crispación y que se yo cuantas forradas más que repiten todo el tiempo.
Háganse cargo de llamar a las cosas por su nombre, y de que cada vez que digan “alguien” están diciendo los milicos, las embajadas, la patria financiera o los grupos económicos, y cuando dicen “algo” están diciendo reprimir, meter bala, golpear, tumbar al gobierno.
Por sobre todas las cosas, háganse cargo de no tomarnos más por pelotudos.

Pobre Patria Mía


Cuando termine con Jhon Banville/Benjamin Black tengo pensado pasar por la librería y comprarme El Dueño, el seguramente comiquísimo libelo de Luis Majul.
No se si ustedes han pasado por la fascinante experiencia de leer un libro de Majul. Yo, sí. Leí Los Dueños de la Argentina, que tiene algunos datos interesantes, y La Iluminada, que si mal no recuerdo es de él también, y es francamente muy malo. No es que yo podría haber escrito algo mejor, sino que simplemente me pareció malo.
Pero, mi intuición, que suele fallar solamente en tres de cada dos predicciones, me dice que El Dueño de Luis Majul no será el gran libro sobre Cristina Kirchner. Que será Pobre Patria Mía, el panfleto de Marcos Aguinis. Como, acaso, La Marroquinería Política de Jorge Asís sea el gran libro del período de Néstor Kirchner. Y Robo para la Corona de Horacio Verbitsky  
el gran libro del menemismo, y quizás El Palacio y la Calle de Miguel Bonasso el que retrató el auge y caía de la última alianza progresista con Fernando De La Rúa y Chacho Alvarez; y así.
No se me ocurre nada sobre el período de Duhalde. Pero fue también -no a escalas de la Alianza- un gobierno represivo, que adelantó la entrega del poder, que no fue electo en las urnas y que fue, como bien lo merecían Duhalde-Alfonsín y Chacho Alvarez (los copresidentes del 2002) puteado por todos cuando potenciaron la pobreza y la riqueza a límites imposibles.
Cuando Luis Majul, autopersiguiéndose como márketing berreta para vender libros, se pregunta porqué contra Menem él estaba al lado de periodistas prestigiosos y contra Kirchner quedan etse Jorge Asís cínico y patético (siempre chistoso, pero no es que una generación de periodistas puede referenciarse en tan triste imágen, que HASTA SECUNDÓ a Sosbich!!! Ser segundo es feo, pero de Sosbich!) y Mariano Grondona medio gagá, Morales Solá y otros escribas de la dictadura ahora reciclados, cuando Majul se pregunta, sorprendido, eso, es porque no puede, no quiere o no sabe entender la diferencia abismal entre un gobierno y otro.
Queda bien decir boludeces (por las cuales no aprobarías un exámen universitario ni de sociología nio de teoría política) como que "robar no es progresista" al lado de Vila, Manzano (Manzano!!!) y De Narvaez, mezclando la moral con categorías de análisis político, pero bue, esas boludeces, de una demagogia incalculable, también explican estados de ánimo. Si Luis Majul se pone al frente del periodismo investigativo es que lo más interesante a investigar son las tetas de Moria Casán o algún puterío en el programa de Tinelli, si Jorge Asís es el dedo acusador de la corrupción, jaja, y si Marcos Aguinis nos enseña educación cívica, juaz, bueno: convengamos. Nada. Todo bien.

martes, noviembre 10, 2009

Anticipo del libro de Kirchner sobre Majul



Néstor Kirchner estaba almorzando (se despierta al mediodía) unos chicos crudos de Recoleta con salsa hecha a base de grasas y un toque de orégano cuando leyó esta nota en el diario La Nación.  Con el anticipo de Luis Majul del libro El Dueño, sobre Néstor Kirchner.

Fue ahí, mientras pateaba el perro y gritaba furioso contra las chicas de la UES que lo acompañaban, que decidió escribir su propio libro, sobre Luis Majul. Titulado, El Pelotudo. Y redactar un anticipo que en explusiva presentamos:


Demasiadas cosas para ocultar
  El Pelotudo se empezó a convertir en una obsesión hace más de tres años, cuando el entonces pelotudo de Majul me negó, no de buena manera, una entrevista para su programa.
Todas las personas, incluidos los pelotudos, tienen derecho a decir que no ante el pedido de un reportaje. Pero en aquella oportunidad, las malas maneras de Majul habían llegado demasiado lejos. El sabía que habíamos viajado especialmente hasta Buenos Aires, donde se celebraba el programa en cuestión en el Canal de Francisco de Narvaez, Vila y Manzano, con la intención de que me entrevisten. Antes del viaje, él me había transmitido a través del hombre de su mayor confianza que era muy probable que el diálogo se concretara. Es decir: había jugado con el tiempo, las expectativas y el trabajo de un equipo de producción que había recorrido miles de kilómetros, ilusionado con la promesa del encuentro.
Majul sabía, desde el principio, que no iba a recibirnos. De Narvaez, Vila y Manzano se lo impedirían. Sin embargo, no sólo eligió no conceder la entrevista. Se dio el lujo, a través de otro hombre de su confianza que ahora ocupa el mismo cargo en el canal de De Narvaez, de hacerme saber lo que opina sobre los políticos no alineados en general y algunos peronistas en particular. Fue una extraña madrugada de mayo de 2006 en la cafetería del hotel de Vila donde se alojaba la comitiva de América. Los hombres cercanos al Pelotudo hablaban como si fueran semidioses; es decir, como si fueran a extorsionar por toda la eternidad.
Allí comprendí, de manera cabal, que Majul desprecia a los peronistas que no lo adulan; que no tiene el más mínimo respeto por la información ni por el trabajo de los profesionales de prensa; que trata a la mayoría de los peronistas y militantes como si fueran intendentes del conurbano, necesitados de fondos frescos, y que jamás obtendría ni de él ni de la mayoría de los hombres de su canal datos objetivos e información confiable, por una razón muy sencilla: tenían demasiadas cosas que ocultar. También entendí el mensaje implícito: a los peronistas que no merecen la confianza de Manzano, Vila y De Narvaez y preguntan lo que no deben no sólo les negamos entrevistas, sino que también tratamos de humillarlos.
Tomé el avión de regreso al Calafate el 13 de mayo de 2006, preocupado y decidido. Preocupado por la inusual conducta del conductor del programa, y convencido de que debía trabajar, con mucho tiempo y sumo cuidado, en una investigación documentada y precisa sobre el hombre que estaba dispuesto a llevarse todo por delante. Pensé, al igual que cuando empecé a trabajar en mi candidatura presidencial: si ponen tanta energía en evitar que se informe sobre ellos, es porque tienen algo muy serio que esconder. También comprendí que el proyecto fracasaría si no lo mantenía en secreto hasta poco antes de la salida de la Ley de Medios. De Narvaez, por mucho menos, ya había pedido a los dueños de los medios la cabeza de algunos de sus periodistas. Y no iba a ser extraño que lo intentara si llegaba a enterarse de mis intenciones. Es más: en el transcurso de la investigación, pude confirmar que solicitó mi salida de la pantalla, junto a la de otros peronistas, cuando le empezó a disgustar el programa de gobierno que todavía conduzco. Pero ¿cómo lograría ocultar que estaba trabajando en un libro sobre el hombre y la mujer, Ernestina, más poderosos del país? Ya por entonces Toma y el Fino Palacios  monitoreaban para Macri a empresarios, políticos y sindicalistas que hablaban mal de él, aunque fuera en secreto.
Entonces, diagramé un plan de acción. Durante el primer año, revisé toda la información que se había publicado sobre Ernestina, su mneteórico ascenso, los empresarios amigos y las denuncias y causas contra ella y sus hombres. Analicé cada uno de los proyectos de ley y los pedidos de informes que pudieran esconder cualquier manejo discrecional o sospechas de corrupción.
Durante el segundo año, hablé con más de cincuenta personas que lo conocieron muy bien a Majul durante las distintas etapas de su vida. A todos les pedí que mantuvieran en reserva el motivo de nuestros encuentros, y la mayoría cumplió. Yo quería saber si en privado era igual de Pelotudo que en la tele. En 2007, los dos periodistas que colaboraron en la investigación viajaron tres veces a Mendoza, dos a San Luis y otras dos a Santa Fe para confirmar cada uno de los relatos y las denuncias que fuentes muy valiosas nos venían haciendo desde hacía tiempo. Ese mismo año, visité Santa Fe para analizar la alianza de Vila con Magnetto, y Mendoza para entender la relación de Manzano con Cobos.
Fue muy aleccionador.
Pero fue durante 2008, y en medio del conflicto con el campo, cuando las fuentes más importantes se empezaron a abrir más y comenzaron a contar cosas que jamás había leído o escuchado. En ese contexto, insistí para lograr las entrevistas exclusivas con los hombres de negocios considerados cercanos a los oligopolios de prensa que no hablan con la prensa. Los reportajes con Héctor Magneto, Julio Bárbaro, Alberto Fernández, Julio Cobos, Gerardo Morales y Silvana Giúdici, el cuñado parapsicólogo de Macri, el Fino Palacios,  y también con las hijas de Julio Cobos y de Ernestina, el enigmático y poderoso empresario que paga el alquiler del hotel frente al congreso donde se juntaban los lobbistas contra la ley de medios, no sólo servirán para saber más sobre ellos. También serán muy útiles para conocer los verdaderos secretos de cómo se vincula el empresariado mediático con el dinero y con el poder permanente.Revisé varias privatizaciones de Romero en Salta, de Saá en San Luis, de Schiaretti y Reutemaaan en Santa Fe y Córdoba, de Cobos en Mendoza, de Macri en la ciudad de Buenos Aires. De Videla y Menem, ya que estaba.
Confieso que, antes y después de esas circunstancias, tuve dudas sobre si seguir o no hasta el final. Las preguntas siempre eran las mismas. ¿Por qué casi ninguno de los colegas de nuestra generación, los mismos que invertimos años de energía en investigar los errores y la corrupción de los gobiernos de Raúl Alfonsín, Carlos Menem, Fernando de la Rúa y Eduardo Duhalde no podíamos hacer lo mismo con las apretadas de Clarín y el Grupo América?
El autoritarismo, el abuso de poder y la corrupción no son progresistas. Al contrario: son comportamientos típicos de la derecha y generan más injusticia y más pobreza.

El Pelotudo es un intento personal por mantener en alto los principios, las convicciones y la voluntad con los que soñamos muchos cuando nos hicimos peronistas. Puede leerse como una biografía no autorizada, una investigación sobre la corrupción en la era De Narvaez, Manzano, Vila o un intento de ensayo político para comprender qué le pasó a la Argentina en los últimos treinta años para que el Grupo Clarín apretara y extorsionaria a todos los gobiernos, y lo que le podría pasar si Kirchner y la Presidenta no cambian a tiempo.
¿Deberían estar preocupados por la salida de este libro, como sugirió el funcionario del Grupo Clarín que me pidió, con amabilidad, que lo informara en detalle sobre su contenido? Es una pregunta que no puedo contestar.
Yo sé que se autovictimizarán y luego dirán que Kirchner y quienes lo rodean son demasiado inteligentes como para tomar represalias. De cualquier manera, aconsejado por gente prudente, hice lo indispensable para evitar consecuencias indeseables.Aunque de todos modos, me están matando.
Por ahora, sólo pienso en la posibilidad de encarar una segunda parte. Para 2011 faltan sólo dos años, pero podrían llegar a ser los más intensos de la época.
Sería ideal, aunque poco probable, que para entonces Kirchner y la Presidenta también respondieran un gran reportaje, sin condicionamientos de ningún tipo.
Una fuente oficial, muy fidedigna, sostiene que Cristina está pensando seriamente en mejorar su relación con los periodistas y los medios.
Ojalá ese pensamiento se transforme en realidad. Significaría un cambio para bien en todos los sentidos.

Luis Majul en las frases de la semana


Por Raúl Degrossi

1. “Es tan nabo Mauricio que se pensaba que me iba a espiar sin que me diera cuenta, se olvida que soy parapsicólogo y tarotista.” (Néstor Leonardo, cuñado de Mauricio Macri)

2. “Lo que está pasando en la Argentina confirma lo que yo siempre dije: no hay ningún gobierno que aguante …536, no, 537 tapas de Clarín en contra.” (Carlos Grosso)

3. “Durante todos estos años mientras escribía el libro, muchos me veían en televisión y pensaban: “¿será posible que haya un tipo tan pelotudo?”, bueno, cuando lo lean van a confirmar que sí.” (Luis Majul, sobre “El dueño”, su polémico trabajo sobre Néstor Kirchner)

4. “La situación de la Argentina se parece cada vez más a la de Honduras, por eso lo invitamos a Cobos a la reunión, es lo más parecido a Micheletti que encontramos por acá.” (Gustavo Víttori, presidente de ADEPA, sobre la presencia del vicepresidente en la asamblea de la SIP)

5. “¿Cómo decir lo que representa la libertad de expresión sin que sea interpretado como una lisonja obsecuente?, es algo que Uno necesita desesperadamente, porque la sana Crítica del periodismo independiente es como un Clarín que alerta al gobernante sobre sus errores, y forma el Perfil de democracia que La Nación necesita.” (Julio Cobos, en la asamblea de la SIP)

6. “Lilita, ¿me dejás que la carta a la embajada de Francia la lleve yo?, así con un cognac o algún vinito del Ródano de por medio, les explico bien de que se trata.” (Patricia Bullrich, sobre la polémica iniciativa de la Coalición Cívica)

7. “¡Claro, yo digo que este gobierno es un escándalo, la continuación de la corrupción menemista y todos se cagan de risa como si fuera un viejo loco, pero aparece el primer pelotudo que escribe un libro sobre el tema y salen todos corriendo a comprarlo para leerlo en la playa, sin esperar a ver mi próximo documental!” (Pino Solanas, sobre “El dueño”, el nuevo libro de Luis Majul sobre Néstor Kirchner)

8. “Con esta cantinela de la inseguridad resucita cada personaje, en cualquier momento va a volver Blumberg mostrando el diploma y diciendo que se recibió de ingeniero por correspondencia.” (Aníbal Fernández, sobre la cobertura mediática de la inseguridad)

9. “A mí también una editorial muy importante me ofreció hacer un libro de investigación sobre el kirchnerismo, pasa que por un lado no me gusta subirme a las modas literarias, y por el otro una biografía de Lino Barañao medio que no daba para un best seller y me iba a hacer pelear con Paenza.” (Jorge Lanata, sobre el libro de Majul)

10. “En materia de restricciones a la prensa, estamos cada vez más parecidos a Venezuela, en materia de inseguridad prácticamente ya somos Colombia y en materia de corrupción..., bueno, después de todo es importante conservar algún rasgo de identidad nacional bien nuestro.” (Luis Barrionuevo)

11. “¿Así que Majul tiene miedo que tome represalias contra él por el libro?, ¿pero con que se puede amenazar a un tipo que acepta solito llevarlos todas las semanas al programa a la Carrió y a Macri?” (Néstor Kirchner)

12. “¿Cómo que hoy tampoco tengo correspondencia?, ¡ése es el hijo de puta de Moyano, que seguro quiere afiliar al gremio a los que manejan los camiones que reparten el correo!” (Lilita Carrió, reaccionando ante la falta de respuesta de su carta a las embajadas extranjeras)

13. “Mirá Jaime, siempre hay que tener alternativas, si se termina de pudrir lo de Ugolini, hay que buscar a alguien intachable, de honestidad probada, ¿cómo lo vés a Pereyra De Olazábal?” (Mauricio Macri, conversando con su asesor Durán Barba sobre el trámite de designación de un miembro del Superior Tribunal de la ciudad)

14. “Vamos a tener que cambiar la frase: ahora sería: un vaso de agua, una denuncia de Monner Sans y un libro de Majul, no se le niegan a nadie.” (Cristina Fernández de Kirchner)

15. “Esto es otra pérfida maniobra de los montoneros que gobiernan, en este caso del Comando Mariano Recalde, yo que lo único que hice fue tomar prestadas unas lapiceras para subrayar unos libros que saqué de una librería de la Recoleta.” (Jorge Pereyra De Olazábal, sobre el confuso episodio protagonizado en un vuelo de Aerolíneas)

16. “Este viaje al sudeste asiático, entre otras cosas, es para abrir puertas al intercambio cultural entre nuestros pueblos, vamos a filmar una coproducción que se llamará “Sandokán, el Tigre de la malaria.” (Hermes Binner, sobre su viaje al sudeste asiático y la situación financiera de la provincia)

17. “Hemos decidido suspender la visita a Entre Ríos por razones de seguridad, recibimos una amenaza que decía “No olvides que tú estás en la primera fila” o algo así, firmada por un autodenominado “Comando Jorge Chemez”.” (Hugo Chávez Frías, presidente de Venezuela, explicando los motivos de la cancelación de su visita)

18. “Si me acusa de eso, yo le respondo que él y el gobierno de De La Rúa del que formó parte son culpables del empobrecimiento ilícito de millones de argentinos.” (Milagros Sala, sobre la denuncia de Gerardo Morales)