domingo, marzo 31, 2013

Oh, la centroizquierda....

Estuvo a favor de la paz en el mundo

¿Tiene ganas, tiene tiempo? Con ésta nota uno puede reírse trescientos años sobre lo que se autodenomina "centroizquierda no kirchnerista".
Ese ridículo sólo es posible hacerse cuando el monotributismo político pasa a la su etapa superior: el claudiolozanismo. El desprecio de toda militancia. La política, solamente, para chorrear. Lo que no equivale a los diversos delitos familiares que sacuden a Lozano, sino a chorrear, desparramar, egolatrías de diversos calibres, siempre, un tanto oscuras.
De todos modos, el asunto, goza de una irrelevancia...




Una cándida visión de la política que olvida lo principal: Bachelet hizo todo lo posible para que pierda su partido, La Concertación, que gane la derecha y ella pueda volver triunfal. Como una garantía de éxito electoral.
Una especie de "centroizquierda" que sólo opera en la mirada reduccionista. Cándida. Onda Festilindo. Todo bien igual, los queremos. A todos. Y todas.

El mito del eterno contorno:
Está peelada con Margarita Stolbizer

Terminarán siempre en el medio: fagocitados por la UCR o por al PJ o en la marginalidad, onda Tumini. Un verdadero amante de la marginalidad. Y sus contornos. Y contoneos.

Cerramos acá, está todo muy aburrido en el "centroizquierda no kirchnerista", hasta la denominación del "espacio" es una mariconeada atómica e intergaláctica. 

Leyendooooooooooooooooooooooooooooooooooooooo

1) en el blog de Mas Canosa y la CIA, María Esperanza Casullo

2) Mendieta en Artepolítica

3) Dólar Blue, por Fernando Pisani

4) Boedo en mí, por Alejandro Balbi, en Nacional Rock

5) Baragán sobre Castelo, en Diario Registrado

6) Crecen los juegos de pago en Facebook

7) Néstor Sbarigi sobre Scioli

8) García Ferré y la revista Genios de Clarín, por Fontevecchia

sábado, marzo 30, 2013

Sabatontizarse




La democratización de voces juega en el arenero del jardín Tribilín. La televisión se divide, pluralmente, entre quienes consideran a Susanti Pancho un santo en vida y quienes consideran a Susanti Pancho un santo en vida.
El instrumento educativo preferido por los ignorantes, la televisión, es el objeto, sujeto y derecho de  todos los deseos políticos enmarcados en una ley llena de puntos suspensorios.  Hay sólo una forma de envejecer y sabatontizarse: mal.
El diccionario aún no contiene la palabra, significativa en el lenguaje de este blog, sabatontizarse. Alude, mis queridos, a la necesaria compulsión del panqueque por pudrirse si queda fuera de la heladera soportando el calor del desierto en las inclemencias existenciales del paso del tiempo, pues de eso se trata la vida. Como un Sábato. O un Sabatella. Ambos unidos por la vocación de elogiarse. Sábato, en el caso de Sábato. Sabatella, en el caso de Sabatella.
El escritor de notificaciones fúnebres que nunca ocurrían aludía al drama visceral del fracaso con un humor negro tan pero tan lleno de ceremonial, abogados y protocolo que carecía, para decepción de las minitas indies de Palermo, del más mínimo humor. Ni siquiera el del despecho. O peor aún, de la piedad. Languidecían en la repetición de su propio repertorio.



¿Por qué José Natanson (mi amigo) se negó a publicar esta foto en el Limón Diplomático? La posición de ADEPA, entre el silencio y la duda

La irrupción, entre el patetismo del Show de la Fe y su vocación de punterito de la Comuna 14, de Susanti Pancho logró poner una tregua a la atención sobre el rol pasivo de la Corte Suprema (de pollo) en el juego de roles, donde Magnetto tiene un látigo y un antifaz. Y la vocación masoquista del carancho Lorenzetti no se pone en discusión si no se le permite abrir la boca. Le está pasando, además, la lengua por los pies, sucios. Y al monarca con olor a oveja la escena le hace parar la pija pero al Gran Público la cosa le da un poco de repulsión desigualitaria.
¿Volverán las oscuras golondrinas de la guerra helada entre el Ejecutivo y el Poder Tribunal; o el clima de monarquía cultural ha dado aire de salvación material y reconciliación al carancho de Lorenzetti?
Lo sabremos en el próximo capítulo, después de este corte comercial.
Languidecer es inevitable. El drama ecuánime del tiempo nos atraviesa filosóficamente a todos. Como bien supo narrar, para la posteridad, en una charla en la Asociación de Amigos del Jardín Botánico, Ricardo Foster.
La sabatontización de la militancia -llamada así a la concurrencia de reuniones y la escucha aplausiva- ha dejado un poco abombados a los cuerpos sumatorios cuando trajeron noticias del exterior, de la realidad. Un corresponsal que vive en el barrio. Se trate de los saqueos (que intentan empañar este gran momento que vive la Argentina, según dijo Abal Medina), la cotización de irrelevancia del dólar ilegal entre los arbolitos blue, el ascenso a dictador amigo del ex jefe de la oposición Bergoglio -Susanti Pancho, según decidió, de viejito y vestido con humildes polleritas, llamarse, al asumir como monarca absoluto de la última teocracia occidental- y es como que quedó fuera de foco, con la imagen quemada, nuestro último héroe, Sabatella. A quien Sábato sin duda homenajearía. Y viceversa. Y viceverso.
Oh, el mercado de los homenajes!
¿Teto Medina fue Montonero?
Entre el repudio y la solidaridad. Entre la imbecilidad conceptual del INADI y el fundamentalismo católico. Entre el festilindo de Indies y los heavy metal del neoliberalismo. Entre los ultras de ningún lado y los del otro.
Tuerca y manteca, trucha y negra. Mandisoví descuella.
Volvé, siglo XX, te perdonamos.
Estoy por salir a gritar que con Seineldín estábamos mejor.
El nacionalismo clerical, en sus feriados (los cuales nos imponen a quienes no tenemos esos graves brotes psicóticos tan habituales en el catolicismo: hay un problema, nosotros trabajamos, entre otras cosas, para sostener la última teocracia de occidente y la vida autopublicitada del monarca absoluto Susanti Pancho. Trabajamos para la Asignación Universal por Obispo, una política social para los ricos) se vuelve más violento. Más estúpido. Más rabiosamente fundamentalista.
Traen su Miami intelectual a las calles, en procesiones de 20 viejos chotos y cuarenta patrulleros, mamita, que vuelva la realidad.
Y nosotros, jugando al policía ideológico con las patrullas perdidas de nuestras promesas incumplidas.
Habrá que volver a algún lado. Aferrarse a algún principio de realidad. Antes de sucumbir a esta última teatralización de la banalidad.
Antes de sabatontizarse.

Leyendo

1) ¿Qué tal, Pascual? Abel Fernández

2) el Pájaro Salinas y Verbitsky

3) Gerardo Fernández y Melconian

4) La enajenación tecnológica, en Página 12

5) Soledades, por Juan Gelman

6) Más sobre eso, comentado por Nando Bonato

7) Pérez Esquivel por Verbitsky

8) Lanata, haciendo otra vez papelones

9) Wainfeld sobre Horacio González

10) Mempo Giardinelli sobre el Susanti Pancho

De dioses, matecitos y policías

¿Qué pasó con el blog de Alejandro Rozitchner? ¿Se escribe así?


La Subsecretaría de Algortitmos Estadísticos decidió crear un organismo de desechos humanos. De acuerdo a la resolución 179027/3, avalada por el Ministerio de Industria dependiente de la Unión Industrial Argentina con sede en Miami, el flamante organismo tiene la misión de "golpear, estratégicamente, en la carótida de quienes duermen en la calle con el fin de asesinarlos por no haberse enterado que tanto el flamante Papa como los retornadores de la política han abolido la pobreza" En los considerandos se sostiene que "está más que claro que la pobreza es un asunto de desinformación".
Un empleado del organismo, peinado a la gomina más allá de ser completamente calvo, rompió el silencio:

dijeron que están a favor de la ecología

El catoelipsismo -la organización que retuitea elogios a dios con un cuentaganado de una que le metió los cuernos a José con un fantasma. Sí, ya sé, son gente muuuy rara...- se sostiene en la distribución regresiva de la información, después de todo no es más que un multimedios, que sostiene haraganes, vagos que en la Argentina, como en Israel o Irán con otros amiguitos imaginarios, son mantenidos por el estado, a través de la Asignación Universal por Obispo: una política social para los ricos. La información que propagan sostiene que la pobreza (de los otros) tiene cualidades morales. Es una especie de peronismo de derecha que ni siquiera tiene que poner jamás un peso. Saca, solamente.
Y saca con una angurria que envidiaría la señora Amalita Fortavat. Que en paz desasne.

Te extrañamos

Acabo de llegar a casa. La acompañé a mi hermana, de vacaciones escolares por imposición clerical y militar, difíciles de comprender para una militante de La Cámpora, hasta Recoleta. A la casa de unas amigas. Salen a bailar, a Puerto Madero. Y hacen algo que ahora llaman "la previa". Fuimos caminando. La noche está linda. Un clima otoñal con amagues de verano.
Por la avenida Santa Fe camina, tranquilo, todo el multiculturalismo. El mundo adolescente tiene un ritmo nocturno y pulsional propio. Como los mundos literarios de cada escritor maldito.
Quiebran el paisaje los que están durmiendo en la calle. Los desechos humanos. La basura, la escoria, los que quedaron afuera. Del mercado. Y de la revolución inmobiliaria. Y de las disputas semióticas por la representación de lo popular.
Su patria grande es un lugar lleno de candados, rejas, policías y cerraduras.
Ojalá tengan una botella de vino.
Para calmar la angustia. Del resto de los transeúntes.
¿qué hiciste durante la dictadura?


Paseadores delicados del perro de su propia vestimenta.
Cuando los seres humanos duermen y salen a ocupar la calle los playmóvil, los indies, los alienígenas, los que están en la tele, los que están decidiendo, en pleno uso de sus facultades vulgares, el color de la camisa que les representará su idea del mundo.
Una pequeñez al lado de dormir sin una puta almohada y en el piso duro de la calle. Hasta que alguien te patee la tráquea. Porque sí. Porque tenía ganas.
Capaz que hasta lo filma y lo sube a Poringa.

Allá afuera de la vida torpe de los columnistas, plagada de tics nerviosos, hay un mundo de bosques medievales, asaltantes callejeros, brujos hijos de puta y humanos que parecen perros, de ojos azules y dentaduras podridas, con ganas de morder, necesidad de sangre, que es peligroso y desconocido. Por el mercado editorial que paga mis cigarrillos. Los que me hacen pelota el pecho. La única patria que me queda. Los pulmones.
En cada suspiro ruidoso se va un pedazo de mi infancia a la banquina del tiempo. Como acariciando pronunciadamente la muerte.

Tendría novia

El analista de bufarrías de los bajos fondos del Chaco amaneció resfriado.
La noticia no salió en ningún lado.
Suspendió, por tal motivo, la clase de yoga.
Por ahora, esto no tendría mayores repercusiones en el devenir frágil del ecosistema a escala planetaria.
Por ahora.
¿cómo hacía para afeitarse así?

Los Industriales tiene su ministerio para explotar con tranquilidad a la negrada del conurbano. Los agricultores, también, para juntar la guita en toneladas puercas. Las obras sociales, los mercachifles de la salud humana, tienen su ministerio. Le dicen "del trabajo". Por esa cosa de que en el estado está prohibida la literatura de cierta calidad. La información, nosotros, los periodistas, tenemos todos los ministerios a disposición. La delincuencia, de cierto nivel social, tiene un ente autártico que se llama Policía. Los sacerdotes, los ciriglianos, los distintos rubros del empresariado -tanto el lúmpen industrial como el gánster de la soja o incluso el más sofisticado empresariado del saber tiene su ministerio de ciencia- y el estado tiene su propio ministerio de propaganda, pero le dicen, por educación, educación. Los laboratorios tienen su ministerio. Los boludos que pintan autorretratos de la mersa millonaria tienen su secretaría de cultura. Los policías de la historia tienen un ministerio de indemnizaciones. Los cínicos, como yo, tienen su lugar estatal para estacionamiento. Los que duermen en la calle, no.

La pobreza es un asunto de desinformación. Claramente. Dado que en los diarios, ni qué hablar de la TV o la radio, la pobreza ha sido abolida. La desigualdad ha sido convenientemente matizada con estadísticas loables.

La indigencia es la posibilidad de negarle vidas por vivir a un cuerpo. De las tres cosas de la vida.


El 40% del 17% de los 36% de los consultados dijeron que sí cuando les preguntaron si festejaban su cumpleaños.
El análisis de esta información está siendo procesado para contar con más elementos a la hora de tomar una decisión. Estamos pensado en usted. Duerma y muera tranquilo.
En Buenos Aires, la capital federal ilegal (la ley que sanciona que la capital federal se traslada a Viedma, nunca fue derogada) es muy difícil cenar un pescado de río.
La polémica, según una nota que nunca fue publicada en la revista Pronto, tiene partidarios de que las causales de la ausencia de tararira a la manteca negra -a diferencia de la trucha, que sí se consigue, en lugares paisanos y campestres de Recoleta y Puerto Madero (donde no hay ningún madero)- se debe a la contaminación del río. Boludez incomprobable, ciertamente. Allá en La Boca, del otro lado del mundo, los latinoamericanos de la décimo novena ola inmigratoria, pescan y comen y es el Río Matanza, el río más desprestigiado de un país hecho a la mar una vez abolida la cultura del río, estudiada como "aduanas interiores".
En realidad es un problema cultural. Profundamente argentino. Es la negación de la negación del otro. Si se me permite meter una cuña francesa en este sofisticado debate ausente. Necesario para comprender qué pasa cuando pasa algo.
Buenos Aires fabrica pobres a escala industrial. La Pampa Húmeda fabrica pobres a escala industrial. Hay una relación íntima, aunque parezca una locura, que hila la fabricación industrial de pobres con la negación porteña del río. Con la palabra porteña asignada a los capitalinos ilegales y no, también, a mí. Que nací en la porteña ciudad de Rosario. Viví casi toda mi vida en la porteña ciudad de Paraná. Y algunos años en la porteña ciudad de Santa Fe. Y algunos años, salteados y contradictorios, en la marítima ciudad de Buenos Aires.
Pese a las diferencias ideológicas, ambos no han comido sábalo al verdeo
En esta larga semana donde las personas normales trabajamos a pesar de que es obligatoria la imposición clerical y militar de vivir en el siglo 17, el precio del pescado, como es tradicional, se va a la mierda. En la capital federal ilegal es el pescado de mar, el que por suerte no aumenta en el país y es una buena opción -sí, también damos consejos gastronómicos- aunque igual nutritivamente, para enriquecer la dieta. Lo digo en serio. El que aumenta en Argentina por el asunto clerical es el de río. Porque este es un país con muchos ríos, fundamentalmente, en su corazón productor de pobres: la Pampa Húmeda. Vayan sabiéndolo, aunque no les guste. Capitalinos ilegales. Que le deben a Corrientes haber parido al mejor narrador del desagravio a Buenos Aires. Acá su historia, con algunos errores. No formó parte de FORJA. Aunque su ideario haya estado más que cercano, inspirador. De FORJA. Sí, quizás, se afilió, pero testimonialmente. Hay quienes, sin embargo, sostienen que tampoco se afilió. No importa tanto la verdad. A los fines de los trazos gruesos de la historia.
Su papá, fundó un museo en Paraná. Pero esa es otra historia. Que ni siquiera me la acuerdo bien. Sí que el padre era paranaense.
Me voy a dormir. Buenas noches.
Espero que anden bien. 

viernes, marzo 29, 2013

¿Qué pasa, mi querida General, que no hay más fernet con coca en el gobierno popular?




La economía, para un conservador lúcido como cualquier kirchnerista promedio, está muy bien. Si se quiere saciar cierta necesidad dramática, aunque el recurso ya está algo gastado, hay fantasmas por doquier, según anuncia la prensa conservadora de centroizquierda. Cuando no está 17 horas democratizando en todos los canales a un boludo que pluralizó con el taxi a tres ciclistas.
La opinión de un ciclista desde el móvil de exteriores.
Dice que está de acuerdo con los derechos humanos.
Nos cagó.
El dólar de los narcos que van a tarjetear Punta del Este y Miami tiene algo de histeria. Ni siquiera alcanza para mucho bardo. Pero ponele que sí, total, la semana que viene tendremos otro escandalito de ocasión.
El asado, aunque está caro, no debería hacerse con tanto humo. Y sino que traigan lomito ahumado.
Un Ultra, el Chelo Lima, tomaría la Casa Rosada para pintarla de Rojo. Otro Ultra, un malo neoliberal, nos haría retroceder al año 2002: cuando Luisana Lopilato estaba buena

Las internas al interior del único dispositivo que importa, sin desmerecer la inminente interna en el Partido Intransigente, el peronismo (o sea, el kirchnerismo: lo cual, traducido, significa qué harán Scioli y De La Sota, todo lo demás son asuntos de comarca) no estallarán antes de tiempo.
Ni siquiera es seguro que estallen. Están todos muy indies, que es la modalidad socialdemócrata en las cuatro manzanas palermitanas de José C Paz donde se realiza la plenitud de la historia romántica; ahora, un poco en dudas, con ésto de lo nacional y clerical. Tomando un matecito. PNT del Equipo de Difusión.
La restauración conservadora, de la mano del monarca con olor a oveja, ayudado por el muy terrenal asunto de la muerte, sentida, sorprendente, de Kirchner y Chávez, pierde su empuje inicial. Más parece necesitado Susanti Pancho de quedar bien con el kirchnerismo -y su sistema de relaciones ideológicas y económicas en el mundo- que a la inversa.
En la medida que la correlación de fuerzas no tenga un vuelco dramático, cosa que no puede suceder por atrasados debates de derechos de tercera generación porque nunca operan a corto plazo en el núcleo estructural de lo social y, además, el artefacto jurídico a veces, y Argentina, la argentina K, es pionera en la región, apenas convalida lo que ya sucedía en el barrio. Como el matrimonio monosexual o las reformas, necesarias pero aburridas, al Código Civil. Que son como la reforma a la Carta Orgánica del Banco Central: su dimensión no es bien comprendida porque sencillamente están bien comprendidas. Es decir, no pasa naranja. Los jóvenes calvos y canosos, en voz baja, cantan:
Qué pasa
Qué pasa, General
que está lleno de expedientes
el Gobierno Popular

Y luego se van de la plaza. Que sigue plenamente ocupada en esta semana de superchería clerical y militar donde Miami se llena de críticos del gobierno y en Cariló no se habla de otra cosa que de la inminente crisis económica, que vendría apenas el Rey de España deje de repetir a Francella y Los Simpons.

También estaría a favor de la Asignación Universal

La restauración conservadora, con todos estos elementos a su favor, juega su carta ansiosamente definitiva. Y no puede meter segunda. Ojo, aún no conecta con cierto hartazgo, incipiente pero sostenidamente creciente al igual que sostenidamente ineficaz (excepto en twitter, que son legión: hasta que recupere mi cuenta hackeada y volveré y seré crayones), entre la magnitud de las promesas y el avance percibido. Como una comedia costumbrista: mucho drama para poca cosa. Pero te reís igual. Como con Los Simpson y Francella. En el canal soberanizado que ya recibió la cartita de Sabatella. El Rey de España tiene así cuenta verificada.
La repetición ceremonial de ritos, como al catolicismo, de cuño peronista, ya no interpela con la fuerza inicial. Lo cual es natural, a diez años de iniciado el ciclo kirchnerista. Pero mide bien.
Los quilombitos con el Partido Clarín le ponen algo de salsa a la tanguería rutinaria de los días. Para todo lo demás, funciona, la Mastercard.
La redistribución del ingreso anda algo sepia. Como con nostalgia. Pero pueden ser las curvas, habituales, en los ciclos. Se verá. A nuestro país, por eso siempre hay que sospechar del exceso de calma, le gustan, en materia estadística, las tetas abrumadoramente cursis. Llamativas. Para luego desesperanrse en un pezoncito que haría reír a un limón de Concordia. O los montes tucumanos.
Por eso, compañeros, hace falta, en mi jamás humilde palidecer, fernet con coca. General. Que está muy aburrido el gobierno popular.

jueves, marzo 28, 2013

Los ultras de un lado y del otro


A las 7 de la mañana iba leyendo, en el subte, el diario conservador Tiempo Argelino, la edición exclusiva para subsecretarios, con recargo de 0,50 centavos "al interior".
En una nota sin firma, pésimamente redactada -o sea, elaborada directamente en la Casa Rosada- recogen un discurso patético de la presidenta donde cuestiona los rojos y pone, como ejemplo, a los jóvenes vestidos de los colores de la bandera celeste y blanca. "Los ultras de un lado y del otro", les llama, como tantas veces escuchamos en este país.
El país de los derechos humanos y del Proyecto X, el del matrimonio igualitario y el estado católico.
Quisiera saber quiénes son los ultras, me intriga.
¿Los jóvenes de celeste y blanco que van a aplaudir que les pagamos a los organismos internacionales o los jóvenes rojos que se indignan porque en la calle, por cada cuadra, hay tres o cuatro chicos durmiendo?
¿Los ultras de qué lado son los que consideraban el miércoles al procesista entregador Bergoglio el jefe de la oposición y el jueves, matecito de por medio, un amigo? Saludos, de paso, al Susanti Pancho. El ultra.
¿Saben, misericodiosos presidentes -salvando las distancias entre la presidenta democrática, la más democrática que ha tenido la argentina; y el monarca absoluto de una dictadura fundamentalista, saben las condiciones de mierda en las que se trabaja la yerba? ¿Dónde están los ultras, en las Ligas Agrarias o tomando mate en el Vaticano? ¿En las casas de adobe de Misiones o en las torres de Puerto Madero discutiendo con Boudou cuestiones de consorcio con el compañero Ramón Puerta?
¿Quiénes son los ultras?
Si son los que yo imagino, los que prefieren a Verbitsky en vez de a Bergoglio, soy uno de ellos.



miércoles, marzo 27, 2013

El Papa Francisco viene a Argentina en diciembre. Convoco -aunque vaya solo- a una marcha de repudio y por un estado laico ¿Quién se suma?

El Papa Francisco viene a Argentina en diciembre. 


Convoco -aunque vaya solo- a una marcha de repudio y por un estado laico 


¿Quién se suma?


10 de diciembre. 20hs, Iglesia de San Patricio  REPUDIO A LA VISITA DEL PAPA PROCESISTA. POR UN ESTADO LAICO.

martes, marzo 26, 2013

Procedimentales

El pulso latinoamericano continúa, con ciertos amagues -la asunción del colaboracionista de la dictadura y entregador de sus propios sacerdotes, Susanti Pancho (para los lectores fuera de la Argentina: el ñoqui que cobra un sueldo de ministro del gobierno argentino por acuerdo con una dictadura anterior, Jorge Bergoglio, encubridor de pedófilos y dirigente político ultraconservador de pasado antisemita), esas entregas de sacerdotes fueron magistralmente documentada por el mejor periodista argentino, Horacio Verbitsky- amagues de conservadurismo restaurador, que no logran opacar los grandes lineamientos duros del devenir novedoso, en términos históricos. Mientras el planeta, al ritmo suicida del embudo, sigue girando. A la derecha.
La muerte de Kirchner y Chávez no significó, como simplificada el pensamiento de la derecha caribeña-yanqui, el fin de los procesos que lideraron. Por el contrario, significaron, esas muertes, su profundización. Aún cuando resulte complejo pensarlo mientras se está dando está claro que estas tendencias son sostenibles.
Para todo lo demás, sobra la histeria.