domingo, agosto 28, 2011

Tucumán 1


Nos cuenta Aldo: 


1) Nadie duda que ganará el actual gobernador José Alperovich y que será por paliza. La diferencia con el segundo, en cualquier escenario, superará los 30 puntos. Estoy convencido que Alperovich tendrá un porcentaje de votos superior al 60 %, que podría llegar al 70 % en caso de hacer una elección descomunal. Todo dependerá del grado de apoyo que consiga en la capital provincial, ya que en el interior de la provincia goza de una popularidad indiscutible y sin rivales.

2) En Tucumán se dio con la oposición lo que no se consiguió a nivel nacional: tanto los radicales, como el binnerismo, el carriotismo y el PRO tienen un único candidato a gobernador: el senador nacional radical José Cano, que lleva como candidato a Vice a un hombre de la sociedad rural: Casañas. Es decir: algo así como el grupo A casi completo. Todo ese rejuntado opositor se asume como perdedor y nunca consiguió articular otro discurso que no sea el remanido en contra del autoritarismo, la calidad institucional y pedir que no voten a Alperovich porque reformará la constitución provincial y abrirá la puerta a la reelección indefinida. Toda una cantinela que conmueve a poca gente. Saldrán segundos cómodos. Muy pero muy lejos de Alperovich.

3) Otra particularidad: también se presenta como candidata a gobernadora la diputada nacional kirchnerista Stella Maris Córdoba.Díficil entender desde la lógica politica su postulación, ya que su nula construcción territorial y su sola apelación al voto del "kirchnerista no alperovichista" suena  demasiado ideologizada y resbaladiza como piso electoral, carente de penetración en los sectores más humildes de la población. Se expone al papelón y a rifar su principal capital político: el ser una kirchnerista de la primera hora. Depende demasiado de los votos que consiga en la capital provincial: peleará el cuarto o quinto puesto.

4) Estas elecciones marcarán el definitivo ocaso de los Bussi en Tucumán: los hermanos Bussi pelean en partidos distintos sólo por llegar a mantener sus bancas legislativas. La tendrán muy complicada ambos.

5) El duhaldismo marcha hacia un papelón histórico en Tucumán. Sus referentes locales gozan de una soledad que conmueve. Peleará los últimos lugares.

6) La nota distintiva de estas elecciones será la gran cantidad de acoples (el equivalente a las colectoras de Buenos Aires) que tendrán los candidatos a gobernador, sobre todo en el caso del Frente para la Victoria, en la categoría de legisladores y concejales, ya que sólo en la capital serán 47. Lo que habla a las claras de lo complicado que será encontrar el voto en el cuarto oscuro y de la complejidad del escrutinio.

7) No habrá aquí "tucumanismo" a la hora de los festejos: Alperovich dedicará el triunfo a la presidenta Cristina Fernández. Veremos que dice la tapa de Clarín del lunes...

Más, acá.

Y a un viejo cirujano llamaron con urgencia...igual, todo esto será en vano: les falta el corazón.

Nos cuenta el Ingeniero que, en el ocaso de sus carreras políticas, dirigentes de derecha de distintos partidos se han reunido esta noche para festejar los contratos que rapiñaron, más allá de la absoluta inutilidad legislativa para las instituciones y la república, con el Grupo Aea, que para la cara de torta evitaron agregar la E y la A de AEA. Bien, quedaba medio feo sino. Grupo A, a secas.
Desde acá, que no somos muy amigos de la noche, la joda loca y esas cosas que nos cuentan que hace la gente alegre, lamentamos no haber sido invitados porque, qué duda cabe, tiene que estar divertidísimo ese encuentro, jojo, piñatas, guirnaldas, el humor de Midachi, el vocabulario abreviado de Gabriela Michetti, Federico Pinedo pensando qué mierda hago acá, la incomensurable puerilidad de Silvana Giúdice, la curtida perversión de Patricia Bullrrich, la onda New Age de Paula Bertol -que junto a Pinedo, integran la parte respetable de este cachivache, convengamos- y en fin, mucha alegría, diversión, festejos, más festejos, más alegría, más diversión....¿Ahora se entiende el 51% de Cristina, corazones?

sábado, agosto 27, 2011

AeeEaA!



El problema estratégico que se le presenta a la conducción del Grupo Aea, y por ende al duhaldismo disidente de El hijo De alfonsín, al duhaldismo Línea Fundadora de Eduardo Duhalde y el FAP (Frente Anti Peronista), con la única excepción de los hermanos Saá (los únicos opositores serios que respetan las instituciones y la república) y del FreePaso de Altamira y Chiche Gelblung, es que los reflejos condicionados, para no decir las verdaderas intenciones económicas, son golpear, hacer circo, con denuncias éticas.
Ese gran periodista que fue Chacho Álvarez -su error, que tantos asesinatos en democracia costó, fue meterse en política- les enseñó el arte de la simulación: cómo parecer progresista estando a favor de las privatizaciones, el FMI, la convertibilidad, la regresividad tributaria, el alineamiento automático con la barbarie yanqui, la reducción de salarios, la impunidad para los genocidas, la concentración de medios, la precarización laboral, pero en contra de que todo esto sea sancionado con coimas por los senadores y no por convicciones ideológicas progresistas. Re feo.
El problema es que pasó el kirchnerismo. Un gobierno que hace de la corrupción una excepción y no, como durante el menemismo y la Alianza UCR-Frepaso, una política sistemática que viene desde la cabeza del ejecutivo, las principales espadas legislativas y la corte suprema.  El problema, estratégico, es ése.
¿Que en el libro que firmó Luis Majul dice otra cosa?
Bueno, he ahí el problema.
3,25% de la Naranja Mesiánica.
Buenas noches.

Tea Party (y reivindicación, de paso, y aunque nada que ver, del Chivi. Pero yo estaba viendo ese video, y qué, eh?)



Yéndose a la B -con River y con el Partido Demócrata- Eddie tradujo un paper instructivo sobre el Tea Party, el grupo de ultra derecha en un país donde se considera de izquierda a Obama (así que serían algo así como....no sé):

LA ARREMETIDA DEL  TEA PARTYPor DAVID E. Campbell y Robert D. PutnamEl llamado Tea Party parece tener tanta influencia entre los republicanos miembros del Congreso y entre los precandidatos presidenciales del partido que se podría pensar que estamos frente a una total redefinición de la derecha política.Pero, en rudo contraste con todo el ruido que el Tea Party hace, la verdad silenciosa es que marcha cada vez más a contramano de la opinión pública: para la mayoría de los estadounidenses ya se está convirtiendo en veneno. Los republicanos les han abierto los brazos a sus miembros pero…Las mediciones de la opinión pública muestran que el rechazo al Tea Party va en aumento.  En abril de 2010, una encuesta del New York Times/CBS News encontró que el 18 por ciento de los estadounidenses tenía una opinión desfavorable, el 21 por ciento una favorable y el 46 por ciento no sabía. Ahora, 14 meses más tarde, la aprobación ha caído al 20 por ciento, mientras que el rechazo se ha más que duplicado, al 40 por ciento.Para dar una idea: el Tea Party es mucho menos popular que grupos tan mal vistos actualmente por la opinión pública como los "ateos" y los "musulmanes". Curiosamente, un grupo que se le acerca en impopularidad es la Christian Right.Resulta raro. En los últimos cinco años, los estadounidenses parecen haber aceptado algunos dogmas básicos conservadores: achicar el Estado, NO redistribución de la riqueza, eliminación de subsidios para los más necesitados, etcétera.  Y estos son también los postulados básicos del Tea Party.  ¿Por qué entonces ese nivel de rechazo?Para averiguarlo, veamos qué tipo de gente lo apoya.A partir de 2006 entrevistamos -como parte de nuestra continua investigación sobre las actitudes políticas- a una muestra representativa de 3000 estadounidenses. Volvimos a hacerlo este verano. Podemos ahora ver que mucho antes que se formara el Tea Party hubiéramos podido predecir quienes cinco años después se convertirían en partidarios y quienes no..Nuestro análisis pone en duda el mito fundante del Tea Party.  Sus miembros se han auto-descripto a menudo como recién llegados a la política, sin afiliación previa.  No es cierto: la mayoría eran republicanos activos como tales desde mucho tiempo atrás que tenían frecuentes contactos con funcionarios de gobierno de su partido.  Es más: contrariamente a algunos informes, el Tea Party no es una criatura de la Gran Recesión. Muchos estadounidenses la han sufrido en los últimos cuatro años pero eso no los ha acercado al grupo. Mientras la imagen pública del Tea Party se centra en el deseo de reducir el gobierno, esa preocupación no es el único ni el más importante vaticinador del apoyo. Entonces, ¿qué tienen en común sus participantes?ESTO:Son mayoritariamente blancos que desprecian a los inmigrantes y a los negros (esto último desde antes que Obama llegara a la presidencia).Más importante aún, en su mayoría eran conservadores en cuestiones sociales –por ejemplo, furiosamente opuestos al derecho al aborto- y siguen siéndolo hoy en día. En 2006 otro vaticinador importante hubiera sido el deseo de esta gente de darle a la religión una importancia mucho mayor en el terreno político.Postulan elegir gobernantes que sean "profundamente religiosos" y que la religión sea un factor respetado del debate político. Los líderes del Tea Party dicen que su principal preocupación es un gobierno más pequeño, pero no sus bases, que están más preocupadas por poner a Dios en el gobierno.Esta inclinación a mezclar religión y política explica que apoyen con tanto entusiasmo a personajes tales  como la representante Michele Bachmann (R-MN)  o el gobernador de Texas, Rick Perry. Les encanta lo que dicen sobre el presupuesto o los impuestos, pero los fascina aún más el lenguaje religioso que usan: las largas plegarias de  Bachmann en sus mítines y la gigantesca ceremonia religioso-política que Perry  presidió días pasados en Houston.Pero es precisamente esta intrusión de la religión en la política lo que ocasiona el creciente rechazo del público en general. Así como, en los últimos cinco años, el discurso económico conservador parece haber ganado aceptación, no ha ocurrido lo mismo con el religioso. Es coherente entonces que la popularidad del Tea Party  –o la falta de ella- corra pareja con la de la Christian Right.

Acá, completo. 

La guerra de Libia no ha tenido lugar



Tomado de acá.

como un viaje



Cuenta, Escriba, sobre: 


el libro "Soy la mierda oficialista", de Carlos Barragán. Escribo esto luego de haber leído la mayor parte del libro, en la que Barragán desarrolla un relato. No los cuentos, ni las letras de canciones. 
Empecé el libro dándome cuenta de que Barragán no usa ni las palabras ni el enfoque que yo utilizaría para contar, por ejemplo, qué me pasa a mí con el kirchnerismo. 
Pero terminé el libro con una certeza que me parece hermosa. Y es que este es el libro de un viaje. Del viaje que hizo Barragán durante estos años en el que la política, los conflictos, los encuentros y los desencuentros, seguramente Néstor y Cristina Kirchner nos llevaron a muchos de viaje. Es el libro de alguien que, como tantos, sintió que tenía que iniciar ese viaje porque el paisaje a su alrededor se había empezado a mover. Es decir, que tenía que empezar ese viaje porque el viaje ya había empezado. Por ejemplo, los que leen este blog saben que hace tiempo, cuando ya estaba Néstor Kirchner en primer plano pero en la Argentina pasaban otras cosas, escribía de algunos temas, con algunas miradas, que ya no uso más. Que justo, justo cuando a los Albertos Fernández de este mundo les dejó de gustar el kirchnerismo, nosotros hicimos las valijas porque era el último llamado y ya estaban abordando. Bueno, en el libro Barragán cuenta cómo vivió él ese viaje, "ese tiempo" (como diría Alberto Fernández). 



Sigue acá. 

Desprogretizando al Escriba



Obviamente, la lectura de este blog le está quitando un 17% por post de progresismo a mi amigo Escriba. 

En Página 12 de la República de Palermo dicen que Binner apoyó la ley de medios y por eso es progresista. En Página 12 de Rosario dicen que Binner no apoyó la ley de medios y por eso es progresista.

Es muy divertido. 

Ja, Sofovich tampoco sabía...



Las muñecas hacen ¡Pum! (1979) de Gerardo Sofovich, con Carmen Barbieri, Reina Reech, entre otros, es una de las películas apologéticas de la dictadura militar.
Aunque se trate de una película ofensiva para la inteligencia, chabacana y perversa; las metáforas no son para nada sutiles: una supuesta organización Amor combate a los comandos del ODIO, que por supuesto son semi extranjeros y quieren apoderarse del país. En 1979 y conocidos los roles de propagandista de la dictadura de Gerardo Sofovich y, más que nada, su hermano Hugo, estas metáforas eran perfectamente comprendidas como la apología del régimen.
Cuando Sofovich volvió a ser el propagandista de un gobierno de derecha, esta vez fue parte de la democracia, como sospechado y procesado por corrupción funcionario de Carlos Menem, que había indultado a los genocidas.
Después, en cuanta posición reaccionaria tenga que embarcarse, lo hizo gustoso, claro que le debe dar verguenza, en el patetismo con que afronta su vejez, su complicidad cultural e intelectual con el régimen que cometió delitos tan aberrantes que se consideran de lesa humanidad. Por es, la tergiversación y la mentira, sustentada en tanta tilinguería e imbecilidad cultural televisiva, que ciertamente no es pecado ni delito, solamente una payasada.
Ahí sobre sale Camilo García.

viernes, agosto 26, 2011

Uuuuuooooouuuuooooo!



Había un marinero que subía por la escotilla y no miraba para atrás a una mujer embarazada. Después, cuando fui narcotraficante, me escondí de la policía en un callejón detrás de unas rejas con alambres de púas porque no me alcanzaba la guita para pagar la cuota. Semanal. Los policías se habían vuelto más sofisticados. Además de plata, me pedían pastillas de colores que yo compraba viajando a Misiones, donde un alemán, que seguramente me mentía, decía que las traía de Brasil y que tenía que pagar peaje a las dos gendarmerías de las dos fronteras y así entonces me fajaba un 40% más. Igual, cuando me explicaba, al alemán no se le entendía mucho y le faltaba una pierna, que se había roto, primero, infectado, luego, antes de que se la amputen, cuando se cayó desde un trapecio en el circo donde trabajábamos -ahí lo conocí- durante una gira por Catamarca donde tuvimos que dejar varios animales, como el león, hambriento y viejo, que le habíamos robado a un anciano ciego que cuidaba una reserva de Chubut mientras yo me casaba con la hija en una iglesia católica, pero en Catamarca habían sancionado, un día antes, mientras íbamos con los camiones del circo por las rutas más aburridas y torpes que he visto en mi vida, habían sancionado una ley en defensa de los animales de circo y los habían dejado, a los animales, sin trabajo; entonces en la frontera de la provincia dejamos el camión con las jaulas y todos tenían malhumor y encima el alemán cargaba, la noche en que se rompió una pata -cuando se hizo mierda todos los chicos sonreían y aplaudían: los niños son muy crueles, aveces olvidamos eso, porque la infancia es eso que pasó hace mucho tiempo- tenía el alemán una resaca espantosa por que se había tomado la vida en un prostíbulo que tiene un tío mío en San Juan y habían traído unas nigerianas, seguramente de contrabando, que huían de la guerra civil europea que, como es común en europa, dirime sus diferencias provocando matanzas fuera de sus fronteras porque por dentro son tan civilizados y educados, sí que parcos, eso sí: me acuerdo que le dí el asiento del clásico colectivo inglés a una vieja chota y paqueta  en Londres que se sentó y como me notó el olor a extranjero y nafta (yo trabajaba como surtidor, hasta que incendié la estación de servicio porque me peleé con el jefe) no tuvo ni el más mínimo gesto de agradecimiento, la cosa es que las nigerianas le dieron al alemán una bebida espirituosa, que yo probé cuando fui un tiempo (me asusté a las dos semanas) mercenario en Nigeria, el alemán se agarró un pedo que vomitó todo y al día siguente, más vale, se cayó del trapecio, se rompió la pata y lo echaron del circo, y se fue con el bolsito silbando y rengueando y cuando lo perdimos de vista, ese día hacía 67 grados de calor, mandaba el diablo, la transpiración era la baba del diablo en Catamarca, cuando lo perdimos de vista nos dimos cuenta que el alemán se había ido con toda la guita de la recaudación y nosotros comiendo sánguches de mortadela y vino en caja y me mandaron a mí a correrlo y le seguí el rastro, tenía experiencia en eso porque yo fui detective privado en Brooklyn cuando era más pibe y antes de terminar en alcohólicos anónimos de una iglesia de Costa Rica al lado de reventados, faloperos, gordos hijos de puta y rufianes melancólicos y absurdos y no sabía qué mierda estaba haciendo yo ahí ni cómo había ido a parar y encima tenía un brazo enyesado y un tiro en el hombro, nunca me pudieron sacar la bala, los días de humedad, todavía me duele, y le seguí el rastro al alemán y terminé encontrándolo, dos años después, en Misiones, donde se había hecho narcotraficante y evangelista, en ese orden.

6 minutos y medio. Durante ese tiempo, me sentí bien, fui varias personas que nunca sería: fui narcotraficante, surtidor de nafta, trapecista, hombre casado, detective privado, mercenario en África, domador de leones.

Después, preparo el mate, me siento frente a la computadora, cruzo las piernas, apago los teléfonos y el espejo me devuelve una cachetada. En las ojeras.

Bue, con esa foto, en fin. Con razón ya no sos más mi amigo, ahora entiendo todo.



Recientemente electo diputado en las listas kirchneristas ganadoras de la provincia de Santa Fe, Eduardo Toniolli dejó de ser mi amigo pero igual, yo lo banco, un poco, bah, más o menos, no sé; el asunto es que ahora que la derecha rompe las pelotas con jugar con las instituciones, vulnerar la seguridad jurídica y seguir haciendo papelones con la república, como Binner y su chantada de la boleta única (en Página 12 se consiguen elogios a la bolea única, excepto, claro, en Página 12 Rosario, pero eso es comprensible, cuando yo no estoy en Santa Fe y me quedo, ponele, 3 días en la República de Palermo, Binner me parece, no te digo de izquierda, pero así como progresista, si es que eso quiere decir algo o si es que Binner cuando habla quiere decir algo) Edu hizo una presentación judicial contra esta boleta.
Y dice en su página de chicas, perdón, de Facebook (hay, corazón, me encanta meterte en problemas!)


Elecciones provinciales 2007 en Santa Fe. Votos nulos a gobernador: 16.436 (0.92%). Votos nulos a diputados: 16.711 (0.93%).
Elecciones provinciales 2011 en Santa Fe (con Sistema de Boleta Única). Votos nulos a gobernador: 77.460 (4.24%). Votos nulos a diputados: 148.320 (8.13%).
Si el debate es cómo se garantiza que la voluntad popular se exprese sin trabas, queda claro que la boleta única tiene sus grandes inconvenientes.




La boleta única es para muchos partidos/pymes unipersonales - cuya práctica política exclusiva es la de transitar los estudios de televisión - una estrategia de supervivencia. La transparencia y, fundamentalmente, las grandes transformaciones sociales, se construyen manteniendo abiertas las Unidades Básicas, los comités, los locales partidarios, y debatiendo en el seno del pueblo. Muchachos no le faltan fiscales y boletas, les faltan votos y vocación para construir colectivamente.



Jorge Rial y Graciela Alfano



Claudio Uriarte, gran periodista, escribió El Almirante Cero, la biografía de Massera, donde cuenta y prueba que Graciela Alfano fue la amante del genocida. También se cuenta, en ese libro, que Susana Giménez y Moria Casán eran cortesanas de Massera. Ese libro está editado por la Asociación Madres de Plaza de Mayo, cuya presidenta era, y es, Hebe de Bonafini.

jueves, agosto 25, 2011

Tres Tristes Tigres



María Esperanza Casullo analiza los discursos pos electorales de Cristina, y principalmente, los Tres Tirstes Tigres: Duhalde Binner y Alfonsín:


...resultó de gran interés escuchar los discursos de Alfonsín, Duhalde y Binner luego de saberse que quedarían los tres en relativa paridad. Para un candidato, el gran desafío en el pasaje de una primaria a una elección general es siempre cómo pivotar de manera no forzada desde un discurso que necesariamente está dirigido al interior de su propia fuerza partidaria a un discurso dirigido a seducir al campo más amplio de potenciales votantes de la general. Visto desde este punto de vista, ninguno
de los tres discursos pareció especialmente decisivo.
Alfonsín eligió relativizar la importancia de las primaras y enfatizar un ángulo optimista (“la bandera negra –quiso decir “a cuadros”– se baja recién en octubre”.) Se agregaron a esto algunas apelaciones bastante generales a posibles sectores de su coalición (“los emprendedores y los trabajadores”). Sin embargo, el discurso de Alfonsín resaltó, por su misma ausencia, lo que es tal vez la mayor falla de su comunicación política: la incapacidad de ofrecer un relato verosímil que enmarque, dé sentido y explique su alianza con Francisco de Narváez. Esta ausencia es llamativa, ya que esa alianza debería, por su audacia, ser el puntal de su campaña.
Sin embargo, Alfonsín dijo poco y nada sobre su relación con De Nárvaez. Así, su discurso quedó extrañamente desperfilado: no enfatizó los temas socialprogresistas más caros a su tradición, no eligió un discurso más populista de derecha similar al de De Narváez, y tampoco ofreció una síntesis novedosa. Si Alfonsín quiere llegar a octubre sin una sangría de votos debe ofrecer algún relato atractivo sobre su alianza
con De Narávez, si no, correrá el riesgo de espantar al votante radical sin reemplazarlo con ningún otro sector.
El discurso de Binner demostró dos cosas: primero, que a pesar de salir cuarto el FAP imagina como posible seguir creciendo de aquí a octubre y, luego, que para hacerlo irá con decisión a captar a los votantes radicales desencantados con el experimento de la alianza Alfonsín/De Narváez. Para esto, Binner enfatizó el perfil socialdemócrata de su Frente (con una extensa a “los niños pobres”), mencionó a una figura emblemática para el corazón radical como lo es Arturo Illia e invocó el emblema radical de “que se quiebre pero no se doble”.
El discurso binnerista utilizó todos los temas del discurso liberal-progresista urbano más clásico, matizados por una apelación al federalismo. Fue también enfáticamente antipopulista, ya que no apeló a un lazo emotivo directo entre la persona del votante y la persona del candidato. Queda por verse, sin embargo, cuál es la amplitud real que tiene el espacio progresista no populista en el país; los malos resultados de Proyecto Sur en todos el país, el segundo lugar de Binner en su propia provincia y la mala performance de Margarita Stolbizer en la provincia de Buenos Aires plantean ciertas dudas sobre esta estrategia.
Una mención especial merece el discurso de Duhalde, que resultó sorprendente. Los buenos resultados que obtuvo su propuesta, que peleó un segundo lugar con Alfonsín hasta el final, hacían prever un discurso más abierto, general y conciliador, dada la necesidad de sumar votos de aquí a ocubre por fuera de su “núcleo duro” de peronistas antikirchneristas. Nada más alejado de lo que sucedió.
En su discurso, Duhalde pareció seguir más preocupado en impugnar al kirchnerismo que en impulsar al duhaldismo. Para empezar, Duhalde no mencionó ni una sola
orientación concreta para su posible gobierno. Luego, sus tres menciones a “Juan Domingo Perón y Eva Perón” dejaron muy claro que él le habla a un votante exclusivamente y ortodoxamente peronista.
Duhalde además eligió un discurso con una retórica excesivamente violenta y que pareció no haber sido sometida a ningún tipo de testeo. Por caso, un candidato que carga con la fama de alentar acciones conspirativas no debería decir “aspiro a recibir buenas noticias mientras ustedes están durmiendo” ni cerrar su discurso con la frase “le vamos a darle un susto al Gobierno”, ya que estas metáforas resaltan antes que anulan las connotaciones más negativas que ya existen sobre su persona.
Finalmente, hay que resaltar que Duhalde tuvo el dudoso honor de ser el primero en
romper una regla no escrita pero estricta de la política argentina desde 1983 a la fecha, al utilizar la palabra subversión. 

Acá, completo.