martes, agosto 04, 2009

Grandes valores del tango





Entonces salgo de la ducha, pensando en almorzar, acostarme y dormir hasta dentro de quince días. Me miro en el espejo, me reconcilio, casi que me quiero, y levanto un brazo y el cepillo de dientes se cae al piso y no puedo mover el brazo: un dolor me trepa por toda la columna, me sorprende, me deja quieto, paralizado. Todas las descripciones obvias, digamos, pero vividas de verdad, en vivo y en directo, en mi espaldita, en mis pobres hombros de duro trabajador, en mi sensibilidad exquisita, en mi refinamiento intelectual, en la extensión maravillosa que soy, en suma, toda esta humilde humanidad, húmeda tras la ducha, se ve sacudida por un dolor insoportable que apenas si me alcanza para tirarme en la cama y gritar, urgente, exigir, inmediatamente, la presencia de mi mamá. (No había resultado muy machote, al final, para semejante ego: cosas que suceden, viste vos, pero mejor no se lo cuentes a nadie).
Y ahí, entonces, me quedé. Mirando el techo, la mancha de humedad, una vida vivida esperando que algún acontecimiento grande, imprevisto, arrollador, se presente. Esperando, en vano, que alguien sepa, ponele mis vecinos, que soy, sin más, genial, superior, por lo menos, al muchacho que paga las expensas, hace la cola para pagar los impuestos, lee en el diario qué es la vida de los productores de forraje, esas cosas.
Nada.
Un vecino, independiente, autónomo, que se marchita, eso nada más. Grandecito para madrugar tanto, todavía un pendejo para tantas pretensiones. Qué vida de mierda. Ahora que lo pienso, con el cuello duro, no he sido una celebridad televisiva, no me destaqué en el fútbol, no pude superar la prosa inigualable de mi mejor adversario (que, encima, lo estoy leyendo y realmente es muy bueno y, odio confesarlo, pero el Síndrome de Rasputín es una gran novela de Ricardo Romero) ni pude, siquiera, ser elegido delegado de curso durante la secundaria. Si me tocara morir, apenas, mi dios, apenas tengo una tarjeta de crédito (a punto de ser cancelada) y un par de secretos y un trabajo de mierda: no he desplegado mis mayores encantos, todavía, por muchos bares, no he sacudido la cristiana conciencia de mi pobre madre ni he logrado, sabelo, nada de lo cual sentirme orgulloso. ¿No habrá, alguna fulana por ahí, que me reclame la paternidad de un pibe y qué, sigamos, ahora esté jugando en el sub 20 o sepa por terceros que su padre abandónico es en el fondo y si se le da la oportunidad, uno como esos héroes de las películas? ¿Habrá en esta tierra alguien que me quiera, una valija con tres millones de dólares debajo de un puente para que yo la encuentre, un poco de emoción en algún lado, un cacho de gloria, algo que me saque esta cara avinagrada, esta insolencia tristemente pequeña, esta vanidad sin respaldo? Mi dios, las cosas que uno piensa cuando está a punto de llegar al reino de los cielos. Pará, es sólo un dolor de espaldas: quizás, más que un examen de conciencia, tan drástico y pomposo, la situación amerite un ibuprofeno. Y a otra cosa, mariposa, a volar por las flores y consumir el polen de las metáforas más vulgares ya escritas por Andrés Calamaro, que al fin y al cabo, todos, los que están afuera disfrutando de sus espaldas puras, calladas, bronceadas, esa gente, fijate, también tiene una vida de mierda, son socialistas liberales, pagan sus impuestos, miran la televisión, sueñan con cosas grandes, se escabullen los domingos, pinchan a sus hijos con sus frustraciones, hacen testamentos, pagan al médico, se mueren, se lloran, se casan, se traicionan, todo eso. También suman un montón de problemas menores, cotidianamente, para tener la sensación fresca de resolverlos y que, así, ves, la vida, pasa como si no pasara. Ahgh qué alivio, terminé de pagar la heladera, uh, qué bien: no me vio el zorro hablando con el celular, vaya: qué sorpresa, sacamos treinta pesos en la quiniela y che, no sé si te conté: mi hija se recibió, antes de suicidarse, de odontóloga. Qué lindo sería levantarse un día y tener vocación de odontólogo. Mi dios, este dolor me hace delirar, pensar boludeces: si pudiera, ay si pudiera, sabrían todos, a ver: que se levante el mundo y me aplauda, ¿qué mérito podría tener, mientras espero que pase el dolor y trato de dormir y no llamo, por algo de orgullo en esta castigada espalda, a mi mamá? ¿Se puede vivir, en serio lo digo, sin ser famoso? ¿Qué sentido tiene? Podría sacar la escopeta y tirarle a los que pasen por el balcón, podría amenazar con una bomba, por Alá o por Bergoglio o porque Carlitos Balá nunca mencionó mi chupete en su chupetómetro, pero sería lo mismo, sería nada, sería jugar al maldito siendo ya un poco grande para esa boludez, vamos, querido, estás por recibirte de boludo y ahora te vas a hacer el más malo de todos. Dejate de joder, acostate a dormir. Ya se te va a pasar. Vas a comer una pizza con doble zeta y ponele una cerveza una sola zeta una sola cerveza que el mundo se desparrama con tus amigos un sábado a la noche, te vas a olvidar de todo, tendrás esas emociones chiquitas, delgadas, y tendrás, de cuando en vez, algún resfrío, un dolor de cabeza, cáncer de pulmón sino fumás menos, saldrás a caminar, engordarás, adelgazarás, cobrarás un sueldo, quizás, porqué no, un aguinaldo: una vida llena de emociones y aventuras como siempre soñaste, uau, las chicas que te amaron deben estar arrepentidas, los amigos a los que les debés plata deben estar pensando que quizás se equivocaron, bien, bien, una vida, célebre, inolvidable, no has sido prófugo ni has naufragado en islas rutilantes, puede ser que al final no se de el trío con las caribeñas, quién sabe: acaso pases sin figurar en los próximos libros de historia, pero lo sabés bien, lo que importa, muchachos, es el presente, este presente inmenso, tirado en la cama, pensando en la tarjeta de crédito, en mejorar el celular, en escribir un post lleno de copas y putas y viajes alocados en cruceros locos, mientras tomás, con agua tibia, un ibuprofeno y apagás el teléfono y tratás y no podés dormir y sabés que, en algún lugar, en algún rincón, antes de apagar la luz, has molestado lo suficiente para que por lo menos una persona piense en vos antes de acostarse y, con suerte, dormir. Será un comisario de barrio, será una ya mujer casada, será un profesor borracho, o será, nomás, tu mamá, pero alguien siempre hay, en algún lugar, en alguna parte. Mientras seguís y siguen, todos, y qué.

lunes, agosto 03, 2009

teoría del Derrame


Muy lindo que, por primera vez en tanto tiempo, las ráfagas del huracán de la crisis internacional no nos hayan, hasta ahora, derribado. Una multicausalidad de factores (no todos méritos del Gobierno, sí que muchos) nos llevaron a este raro escenario de relativa fortaleza interna -en comparación vertical con nuestra historia inmediata, en comparación horizontal con los países regionales-.
Esa situaicón económica se combina con dos datos: la voracidad de la mansa vaca lechera que vive de la teta del estado cuando la vaca está flaca y del mercado cuando engorda; y el derechazo que insunfla los ánimos de corporaciones muy patriotas como AEA, ADEPA, UIA, CEA, SRA y MST (Movimiento Socialista de los Trabajadores, junto al campo y por la patria trasnacionalizada, como el patriotismo de Techin).
La inminencia de una crisis política y la falta de acuerdos en el conglomerado de la centroderecha es lo que frena, por ahora, intentos de embestida final contra el gobierno.
De este cóctel, queda claro que no existen condiciones políticas, culturales, económicas ni astrológicas para políticas expansivas que superen las limitaciones que ya hace un tiempo han mostrado las desplegadas por el neodesarrollismo no sólo nacional, sino sudamericano. Dicho en criollo: el casi 10% de desempleados, el 25% de pobres, el casi 10% de pobres indigentes, están recontrajodidos.
Sólo los ayudará Monseñor Aguer, Hugo Biolcatti y el PCR; pero como la experiencia histórica indica que estas entidades que operan en las sombras no son muy -que digamos- de fiar para estos sectores, hay que decirlo con todas las letras: tamos jodidos.
Recontra jodidos.
Echesele la culpa a quien quiera, pero más allá de los distintos voluntarismos, acá hay limitaciones estructurales que operan por izquierda y por derecha, por arriba y por abajo, y tienen que ver con el poder (y lamentablemente, cierto opaco prestigio) de las corporaciones, y con una inmensa, inmensa derrota cultural que lleva, por lo menos, 30 años.
Si no superamos el estadio de absoluta minoría cultural, más allá del circunstancial clivaje del kirchnerismo, entonces, señores patriotas, amas de casa, tamos jodidos. Muy jodidos.

Nos queda, solamente, la teoría del derrame. De lágrimas.

El animal más premiado en la Exposición Rural


neomarxistas


La patria es una fulana





En la canción que Joaquín Sabina compuso junto a Torrente (que por la calle íbamos cantando junto con Artemio López, de camino a chusmear la apertura de la Sociedad Rural), hay una parte que dice: “La Patria es una fulana, menos mi madre y mi hermana…” y así sucesivamente.
Fulana está utilizado como sinónimo de “una cualquiera”, más que como la otra acepción de fulano: la que se lo une a mengano.
Que la patria sea una puta es una blasfemia, con perdón de las blasfemias. Pero que sea equiparable a la nadería de los fulanos y menganos debería ser condenable penalmente. Y el INADI no hace nada. No digo perseguir a todos los extranjeros, solamente a los de países limítrofes como Bolivia, Paraguay, Formosa. Los tucumanos no, porque son trabajadores eso. Pero cuando Sabina, que me cae bien, canta junto a ese borracho que desprestigia a nuestras fuerzas armadas y del orden, ese Torrente, canta ese insulto de “la patria es una fulana”, como se están refiriendo a nuestra Madre Patria, España, pues nos están diciendo, a los argentinos, Hijos de Puta. Y eso sí que no. Cualquier cosa te acepto, pero con mi madre no, eh.
Porque veamos, según la Real Academia Española (en el fondo, yo creo que toda persona que cite a la real Academia Española es un boludo, pero acá queda a tono) la Patria está mal pronunciado, y de ahí los errores, calumnias e injurias de LA fulana, LA puta o LA cualquiera.
Señores, Patria nunca es femenino, Patria, con mayúsculas, jamás de los jamases puede ser una mujer, dios nos libre en su santa gloria de la carne débil, pero intimista, frugal, quadrínica, maternal de la Mujer, con mayúsculas también. Eso sí: Patria tiene las pelotas bien puestas. De ahí, Patria, Patrimonio. Cosas de hombres. Está el Matrimonio, pero es femenino y debe venir de Matria.
¿O acaso Biolcatti no es un Patriota Patrimonial? Viste, qué te dije.
Y ahí vamos. Los dos diarios mejor escritos de Buenos Aires, perdón, de nuestro Patria, son La Nación y Página 12. Está bien que este último no es taaaaaan nacional, pero bue, en cierto punto, algunos j… también son de este país. Fijate los colonos entrerrianos: gente laboriosa, de sol a sol, patriotas, rubios, esforzados, de hogares felices; ahora luchando contra la colectivización sovietizante del gobierno nacional. Bueno, ayer, según La Nación el cálido compañero Hugo Biolcatti dijo la palabra Patria 63 veces.
Según Página 12, la dijo 53 veces.
Ahora bien, es obvio cuál de los dos miente. Uno de los cronistas, sintió un orgasmo ante cada mención de la Patria, el otro, ganas de vomitar.
¿Cuál es, Monseñor Aguer, el ateo neomarxista en este caso? Está claro que la Patria no es la misma para todos: algunos aman y trabajan este país, otros quieren expoliarlo para intereses foráneos, hoy será Venezuela, ayer fue Cuba, pero siempre, siempre, será para los enemigos de Israel.
Yo sí que la tengo clara, no?

Reutemaaaaaaaan


Juan Schiaretti, Juan Carlos Romero, Ramón Puerta y Jorge Busti son los dirigentes peronistas que sostienen una candidatura de Reutemaaaaaan, según La Nación de ayer, que escribe una breve hagiografía sobre el prolijo y moderado ingreso a las tierras de San Pedro, previo paso por la presidencia, del ex corredor. ¿No hay ninguno que haya ganado las elecciones? No. De hecho, la esposa de Busti, segunda en la lista entrerriana –debajo de un kirchnerista- fue la que más cerca estuvo de ganarlas. Pero iban aliados a Urribarri, y al kirhcnerismo. La derrota acentuó la sobreactuación reutemanista; pero está claro que si los dos sectores juntos no lograron triunfar, cada uno por su lado restaría, no sumaría.
Ramón Puerta volvió a hacer su eterno amague y perdió por porcentajes siderales. Esto es así desde que el duhaldismo apoyó su candidatura a Gobernador, en el 2003, enfrentando a Rovira, del kirchnerismo.
En Salta, el ex candidato a vice de Menem y hombre de negocios en la línea blanca, perdió contra Urtubey y prácticamente está quedando afuera de la política provincial, aunque se esmere en desestabilizar el gobierno provincial. Hoy integra el Consejo Nacional del PJ, Kirhcner lo hizo.
Juan Scharetti, con su tercer puesto en su provincia, tiene que resolver todavía su mini interna con José De La Sota, y luego garantizar que podría juntar algo más de los votos que su presencia resta. Porque además, y a diferencia de Santa Fe, varios intendentes de su partido se fueron a las pobres listas kirchneristas; pero no deben tener mucho ánimo de volver en auxilio de la estrepitosa derrota del ex cavallista.
Reutemaaaan no se metió en la interna obligatoria que sucedió ayer en Santa Fe. Sus candidatos, apelaron al fotoshop y a una campaña pobretona. Tienen el envión de la victoria que pronosticó su consultor de cabecera, aunque le haya errado por sólo unos 20 puntos. De cualquier modo, todavía tiene que ganar las postergadas elecciones de concejales de setiembre. Tiene a su favor el hartazgo contra Binner, las sucesivas y ridículas postergaciones vía decreto, y el cansancio de tres elecciones juntas en seis meses para dirimir las internas entre la dirigencia sojera. Pero, aunque en Rosario el radicalismo va solo y no con sus primos de derecha, los socialistas, seguramente estos primen (pero hay que ver, Derek, hay que ver) y en la Capital el escenario es difícil para Reutemaaaan, pero los candidatos de la unidad básica de Franja Morada son demasiado conocidos. Si en vez de punteros de la Universidad Nacional del Litoral, los radicales postulasen a Tincho Carpincho, podrían ganar.
¿Y si Reutemaaaaan no gana? A otra cosa. ¿Y si gana por mucho? Tendrá el envión necesario, el territorio asegurado y saldrá a buscar el apoyo del peronismo victorioso, sin por eso perder a sus apoyos más genuinos. Eso llevaría a un escenario de acuerdo con el kirchnerismo, conveniente –a las relaciones de fuerza de hoy- a todas las partes.
El peronismo perdería su muy debilitada ala izquierda, que intentaría, con pocas probabilidades de éxito, una nueva experiencia como en los 90 o bien la conformación de una línea interna de alcance nacional.
¿Y si gana por poquito? Ahí tendrá la generosa lectura de diarios progresistas como La Nación a su favor, el fervoroso apoyo del campo nacional y popular de la Mesa de Enlace, y su territorio muy inestable. Y eso abriría la puerta a una serie de acuerdos del socialismo con el Gobierno Nacional, que podrían empujar también al juecismo de Córdoba y otras experiencias provinciales, como el Partido Humanista y Proyecto Sur en la ciudad de Buenos Aires. Ese escenario, más inestable, llevaría posiblemente a ser revalidado en las urnas en el 2011 a Cleto Cobos, cuando la otra mitad del país que no lo votó y creyó que asumió con fraude, clientelismo y gualichos execrables, ahora lo vote proyectando en él virtudes varias que recuerdan, con perdón del recuerdo, a un tal Fernando que también, haciéndose el boludo y cagando hasta a su madre, un día logró ser presidente de todos los argentinos. Incluido el Oso Arturo y la hija y la esposa de Marcelo Tinelli.
Estas posibilidades, al día de hoy. Pero todo puede fallar. De hecho, siempre falla. Los seres humanos se obstinan neciamente en hacer la historia, y los progresistas en negarla; y esa falta de consideración para los pronosticadores, es otra señal más de la falta de previsibilidad de las reglas del juego, de la inseguridad jurídica y de la falta de libertad de expresión que preocupa a la SIP y a ADEPA.
Ya lo dijeron los dos grandes pronosticadores de nuestro país, Jorge Altamira y Miguel Angel Broda: lo más probable, es que se pudra todo. Y si no se pudre, ya se va a pudrir. Es inexorable que se pudra. Esa es la posta, de nada.

domingo, agosto 02, 2009

El Plan de Biolcatti para terminar con los pobres


Este es el plan, Ingeniero, de las cuatro entidades de la Mesa de Enlace para terminar con los pobres. 100% preparados, viste?
(Linda tu nota en zoom, Ingeniero, eh) La estaba leyendo cuando me avisaron que estalló la tercera guerra mundial, contestó Diego F y esto no para más, no para más, se va todooooooo a la mierda che!!!

sábado, agosto 01, 2009

Habla la Patria que se levanta temprano, al pedo pero temprano

Atención, firmes, escuchen: "El campo tiene un programa para terminar con la pobreza". "Un programa que no incluye dádivas ni clietelismo". Firmes, apunten, fuegoooooooo!!!! Viva la Patria, carajo!

Jodido

Jodido, eh, mi energía regeneradora no está en armonía con el cuadrante de mercurio y se me sube la Quatrinidad. Me voy al Ministerio de Salud, a ver si me dan una mano.
Te decía, se está realizando, en Cancillería, en un encuentro de partidos políticos de Latinoamérica, el Caribe y Asia Pacífico. Debería estar ahí, pero bue. Me quedé en los pagos, mirando las vacas, los pastos, los pajaritos. Igual, el encuentro puede, sin mí, continuar, les doy permiso. China viene pisando fuerte, en todos lados. La que no veo es que Brasil, después de Lula, siga en la misma línea. Pero posiblemente, cambien también los gobiernos que rodean a Brasil, con lo cual, el despliegue de su política exterior se haría sin el freno de Lula. Pobre Bolivia, pobre los industriales argentinos, Uruguay se va a cortar con Chile pero ya sin mucho sentido: vuelve Colombia, en ese escenario, a ser la niña mimada de quien esté de Presidente de los Estados Unidos de Irak y Afganistán. ¿Vuelve la normalidad a Latinoamérica? Posiblemente, en un par de años. Chavez viene muy complicado, el golpe de estado en Honduras apunta a debilitar a Chavez. El Petróleo volverá a sus legítimos dueños: la clase media atlántica, y sus ejércitos. La banana ecuatoriana, el gas boliviano, el dinero negro de los uruguayos, la armonía social brasilera, la soja argentina, las balas y la merca de Colombia, todo a su lugar, muy bonito. Vuelve la normalidad, el diálogo, el consenso, las putas cubanas, las maquilas mexicanas, el cobre chileno, los presidentes centroamericanos volverán a usar corbata, nada de sombreros ridículos en esos países llenos de curas guerrilleros, locos de la guerra. Diálogo y Consenso. Vargas Llosa es un visionario: apostar a los poderosos es jugar a seguro. Volveré, más de lleno, al periodismo. Nunca fui muy querido, pero ahora, uh, jaja, la que se viene. El periodismo quedó partido, nunca viví algo así. El 90% están por la libertad y contra la dictadura, el 3% contra el diálogo y el consenso, el otro 7% está un poquito harto del maniqueísmo y el chamuyo. Y yo, que siempre fui progresista, moderado, bien educado y decente como pocos, necesitaré algún trabajo. Que alguien le hable bien de mí a Reutemaaaaaaan o a Binner, el compañero Busti ya me conoce. Me adora. Qué futuro promisorio, no? Tanta incertidumbre. Yo estaba convencido que los presidentes, las ideologías y las modas iban y venían, lo único que quedaba sólido era Aníbal Ibarra. Ahora ni eso. Ni esa certeza. Hasta los grandes estadistas caen en el olvido, che. La primavera kirchnerista estuvo buena. Ahora hay que dedicarse a joder. Yo, me voy a afiliar al partido de Claudio Lozano, que ni sé cómo se llama. Pero digo de verdad, aunque Lozano me parezca un pajero, me voy afiliar a su partido. Y pedir internas. Sí, buenísimo. Me voy a afiliar, voy a pedir internas, y encima, me voy a quejar de que no se blanquean las fuentes de financiamiento. Buenísimo. En fin, por lo pronto, me voy a dormir la siesta.